Análisis de Eternal Legacy (iPhone)
Hasta el momento todos los usuarios de iPhone, iPod Touch y iPad veían grandes posibilidades de juego para sus dispositivos táctiles, pero no ha sido hasta finales del 2010 cuando estos condicionales se han convertido en una realidad.
Con Infinity Blade pudimos comprobar lo mucho que podía dar de sí el apartado gráfico de un juego para iOS y ahora con Eternal Legacy recordamos algo que ya nos había enseñado Chaos Rings, el título de Square Enix; que un RPG amplio, profundo y de calidad también es posible en estas plataformas.
Y es que Gameloft, compañía a la que muchas veces se le acusa de "clonar" para iPhone franquincias de éxito de otras consolas, entra por la puerta grande en el mundo de los JRPG con Eternal Legacy, un título que cuenta con una de las mejores producciones de la App Store.
La pregunta más importante es, ¿es una copia de Final Fantasy? Sí y no. Por supuesto Eternal Legacy está completamente inspirado en la saga de Square Enix en cuanto a sistemas de juego y soluciones gráficas (toma elementos de Final Fantasy VIII y Final Fantasy X).
Pero también es cierto que introduce sus propias novedades, y el carisma estético y de sus personajes alejan la idea de que Eternal Legacy es una simple copia de Final Fantasy. Es un RPG independiente que se sostiene con ideas propias; las coincidencias con la saga de Square Enix son jugables y no van más allá de lo que se puede encontrar en cualquier título del género.
Aclarado esto hay que explicar que Eternal Legacy es un juego de rol en el que exploraremos diversas áreas del mundo, interactuando con personajes secundarios y NPCs y buscando objetos. Los combates son por turnos y lo cierto es que el sistema jugable que propone Eternal Legacy funciona perfectamente para iPhone y además presenta todas las opciones que reclamaría un fan del género. De hecho, el título podría haberse lanzado perfectamente en PSP.
Con una mano controlamos a personaje y con la otra la cámara, que se puede girar libremente durante los momentos de exporación. Cuando tengamos que accionar ciertos mecanismos o hablar con personajes secundarios, aparecerá un botón en la pantalla. Se nota mucho la experiencia de Gameloft a la hora de diseñar controles en pantallas táctiles. Los combates tienen una curva de aprendizaje muy interesante y se controlan mediante menús perfectamente colocados en la pantalla. El único problema es que resulta demasiado fácil ganar batallas, incluso si luchamos contra un enemigo final.
En los combates de Eternal Legacy podemos atacar, usar habilidades (como invocaciones, magia o golpes especiales) y pócimas que recuperan magia y vida. También se puede asociar ciertos objetos a las armas y al equipo para potenciar sus características. Tan solo controlamos las acciones de Astrian, el protagonista de la aventura, y quizás sea esta la característica que rebaja la dificultad de los combates, ya que lo único que podemos hacer con los demás miembros de nuestro equipo será recomendarles atacar o curar al resto del equipo, pero es la IA del juego la que tomará la decisión de si debe seguir tus consejos o no.
La verdad es que Eternal Legacy lo tiene todo y en términos generales se trata de un título imprescindible para iPhone, iPod Touch y iPad. Un apartado gráfico sobresaliente con personajes carismáticos en un mundo colorista y gigantesco que podemos explorar libremente; Un sistema de control perfecto para pantallas táctiles y una curva de aprendizaje equilibrada que no exige al jugador conocimientos previos del género; Miles de opciones y diálogos e incluso curiosidades como la posibilidad de desplazarnos por los escenarios utilizando una montura; Llega a buen precio y traducido al español... Tan solo hay dos características que lo alejan de la perfección: Su curva de dificultad y un guión es demasiado convencional e insulso.