El primer proyecto para GBA de una joven compañía
Casi seis meses después de la salida de la nueva portátil de Nintendo en España, Lady Sia se alza como un juego que por fin se aleja de las conversiones a los que los desarrolladores nos han acostumbrado durante la aún corta vida de Game Boy Advance. Aunque parezca mentira, éste será uno de los primeros juegos a considerar que no hayan sido reconvertidos, y ciertamente ya era hora, ya que aunque a todos nos ha gustado revivir viejas glorias como Final Fight, Mario Kart Super Circuit, o Street Fighter 2, la consola requería ya de nuevos argumentos y aventuras. Obra de la joven y desconocida por muchos RFX Interactive, compañía occidental que se estrena en GBA, nos llega esta aventura mística, que aún y aparecer de puntillas por el mercado europeo –y americano-, y aunque la primera impresión de la cual pueda no ser muy alentadora, promete sorprender a todo aquel que le dé una oportunidad.
¡Salva a tu reino de la invasión!
El argumento del juego, aunque un poco trillado ya, nos trasporta a un mundo de fantasía, en la edad antigua donde aún prevalece la magia y los reinos del mundo apenas empiezan a formarse, lugares en los que conviven pacíficamente tanto extrañas criaturas como humanos. Pero la subsistencia de dichos reinos se tambalea cuando los T’soas, un ejército liderado por el malvado mago Onimen y formado por un numeroso grupo de hombres-bestia, comienzan a sembrar el terror por los reinos del mundo, sin piedad alguna. Los reinos no saben cómo defenderse, puesto que cada uno mira por su propio bien y sus propios intereses, hasta que aparece la princesa del reino mágico de Myriad, nuestra bella y rubia protagonista, que propone la creación de un ejército común para combatir el mal. La lógica propuesta de Lady Sia –ése es su nombre- es sorprendentemente acogida con frialdad por los miembros de los restantes reinos, que la desestiman, por lo que la princesa decide emprender su gesta en solitario, con tal mala suerte que sin haberla empezado aún, cae prisionera por los T’soas, y es trasladada a una celda y privada de sus pertinencias, en especial de su espada y de un anillo con algún poder mágico especial.
Por suerte, un misterioso personaje saca a nuestra protagonista de allí, y le da una espada con la que defenderse y así poder empezar de una vez por todas su arriesgada aventura. El personaje en cuestión desaparece una vez nos ha explicado los movimientos básicos que podremos realizar con nuestro personaje, no sin antes pedir que recupere la espada y el anillo robados, pues son de mucha importancia para la familia del reino de Myriad. En ese instante, tomamos el control de Lady Sia. Y con ello empieza la aventura...
Una mezcla de géneros
Aunque a priori el juego parezca un simple plataformas, cabe remarcar algunas cosas al respecto. En efecto, es un plataformas de los de siempre, con sus difíciles saltos, sus plataformas elevadas, sus transportadores, y demás opciones, aunque también hay que decir que tanto las batallas –a golpe de espada- como la magia –aunque bastante simplificada, todo sea dicho- también estarán presentes durante la aventura, y tendrán su peso, por lo que podríamos considerar el juego como una mezcla bastante lucida entre el género de plataformas y el beat’em up, lo cual es de agradecer en los tiempos que corren.
El objetivo de los niveles es completarlos en el menor tiempo posible, derrotando al mayor número de enemigos que podamos, y obteniendo el mayor número posible de ‘esmeraldas’, así como liberar al máximo número de prisioneros posibles, que iremos encontrando a lo largo del nivel, y deberemos librar de sus cadenas.
Preciosista gráficamente
Lo primero que nos llama la atención del juego es su diseño gráfico. Con los fondos realizados a mano, todo ellos muy coloristas y elaborados -además de ser muy variados y contrastados entre ellos-, observamos que los personajes están perfectamente integrados en los escenarios, y que a su vez están más que correctamente animados –en especial Lady Sia-. Aunque la verdad es que esto es solo el principio, puesto que a medida que vayamos avanzando en el juego, iremos viendo paisajes realmente fantásticos y muy elaborados, algunos incluso en movimiento, como un cielo que se mueve a una velocidad de impresión, o una agua recreada fenomenalmente –para tratarse de una portátil-. El scroll funciona fantásticamente, aunque hay veces que echamos de menos tener un mayor control sobre él, para localizar determinadas plataformas que no están al alcance del scroll automático. La única pega destacable que le podemos achacar al juego en cuanto a los gráficos son su mediocres escenas de “vídeo” –si así podemos llamarlas-, que podrían haber dado mucho más de sí de haberse trabajado más; y ya en el juego en sí, el hecho que los fondos sean hechos a mano y completamente planos dificulta en muchas ocasiones ver qué plataformas son parte del terreno, y cuáles parte del mero decorado, situación que puede llevar en algunos casos a una muerte bastante absurda y desesperante.
El sonido
En cuanto a la música y los FX, nos encontramos otra vez con el kit de sonido de Factor 5, utilizado en esta ocasión por los chicos de RFX Interactive para recrear un sonido generalmente más que aceptable, con unas melodías que, aunque en ocasiones demasiado repetitivas, tienen su encanto, con algunas de ellas de bastante mérito, tanto cualitativa como musicalmente. Además, encajan francamente bien con los escenarios y el momento de la aventura en los que se encuentran, y ayudan a ensalzar o dramatizar las situaciones que así lo requieran. En cuanto a los efectos de sonido, son solamente correctos. Algunos gritos, golpes de espada, chapuzones en el mar, ... nada especial, aunque no son malos.
Un sistema de guardar algo extraño
Con cada fase completada correctamente durante el juego, automáticamente se guardará el progreso en la memoria del cartucho, pero para facilitar el juego en algunas fases más largas o difíciles encontraremos un curioso sistema de salvar la partida, que consistirá en pasar por una especie de “checkpoint”, y a partir de ahí en adelante cada vez que nos maten seguiremos la aventura desde ese punto. Lo que se diferencia de lo habitual es que, además de estar situado en localizaciones estratégicas, al volver a empezar la partida desde el punto marcado, empiezas con la misma vida que cuando salvaste. Esto, aunque parezca típico en estos juegos, plantea un gran inconveniente, como puede ser el hecho de que hayas grabado la partida justo antes de un jefe final –lugar donde normalmente podremos guardar- con tan solo ¼ de la vida, con lo que derrotar a dicho jefe sin ser muertos una y otra vez no será nada fácil. En ocasiones así, lo mejor será volver a empezar la fase – que tampoco son demasiado largas- y procurar llegar al ‘final boss’ con más energía. Pero se podría haber buscado otra solución menos costosa para este problema.
Un control adecuado
El conjunto de movimientos que Lady Sia podrá realizar es suficiente, si bien podría haber dado mucho más de sí. Así pues, nuestra protagonista podrá ayudarse de su espada para agarrarse a una plataforma, volar a lomos de una gaviota, arrastrarse por el suelo, subir escaleras, andar a hurtadillas. ... pero no será capaz ni de –por ejemplo- nadar, ni de trepar por una enredadera, ni de colgarse de algún sitio, lo cual habría añadido si cabe aún más variedad al juego.
En cuanto al control, es sencillo y pronto le cogeremos el truco, aunque la pequeña “inercia” que Sia coge al andar o correr puede hacer que en más de una ocasión caigamos de alguna plataforma sin desearlo, aunque con práctica y tiempo de juego acabaremos por controlar esa “inercia”. El control en sí es bueno, y a su vez fácil de utilizar: como viendo siendo usual en los juegos de portátil, usaremos el pad de dirección para correr y agacharse, mientras que A será para saltar y B para golpear con la espada, y usaremos L y R para andar –en vez de correr- y para un ataque más potente.
Es necesario añadir que al mantener pulsado el botón B después de golpear, Lady Sia generará una bola de magia que herirá al enemigo, y que en cuanto tengamos la opción, esta se hará más y más grande como más pulsemos el botón B. Como también es necesario añadir que a lo largo del juego iremos disponiendo de magias que nos otorguen, que invocaremos mediante combinaciones con el pad y los botones, y en ocasiones nos serán realmente útiles.
Niveles inteligentemente diseñados
Si hay algo que personalmente me llamó la atención al jugar al juego fue su estructura de niveles. Acostumbrado a los niveles lineales de la mayoría de plataformas, Lady Sia ofrece niveles con muchos –reitero, muchos- niveles de terreno, con atajos, zonas ocultas, ... lo cual no hace más que incitar a que volvamos a jugar los niveles una vez completados por primera vez, pues cada vez que juguemos probablemente descubramos esa plataforma aún más elevada –o más subterránea-, o esa zona que se nos había pasado por algo, o hasta un camino nuevo para completar el nivel más rápidamente. ‘Chapeau’ para los chicos de RFX Intercative en este aspecto.
¿Largo y exigente?
Entramos en quizás el aspecto más importante. ¿Dura lo suficiente, y es lo suficientemente difícil? Pues la verdad es que sí, porque aunque el juego no vaya a durarte cientos de horas, sí te proporcionará grandes ratos de juego, un juego intenso y lleno de acción y aventuras, con paisajes variados y bonitos. Cabe apuntar en este aspecto que al final de cada nivel la máquina te proporciona el porcentaje de objetos que has obtenido durante el nivel. Es decir, que por ejemplo en el segundo nivel la primera vez que lo juegues obtendrás un 81%. En dicho porcentaje se tendrán en cuenta tanto la cantidad de enemigos derrotados, como la cantidad de ‘esmeraldas’ que recojamos, así como el tiempo empleado en acabar la fase en cuestión; por lo que siempre estaremos a tiempo de mejorar nuestra ‘puntuación’. Esto llevará a tener que recorrer una y otra vez los niveles si queremos completar todos los niveles al 100%, lo cual no será nada fácil, y convertirá al juego en una aventura ostensiblemente duradera. En este aspecto también hay que destacar que un modo multijugador –con cooperativo para los niveles, por ejemplo- hubiese encajado muy bien en la mecánica del juego, y se le hubiera podido sacar mucho jugo, además de alargar su duración aún más. Cuan al nivel de dificultad, el juego no será en absoluto fácil, sobretodo en las fases avanzadas, de manera que muchas veces moriremos a manos de los enemigos, de los jefes finales, o de saltos o encuentros fortuitos; pero el nivel de dificultad –salvo situaciones concretas- no será tampoco excesivamente alto, pudiéndose jugar al juego sin el peligro de estancarnos demasiado tiempo en una zona determinada.
Conclusión
En definitiva, si el juego os ha interesado y decidís probarlo, esperad un lujo en cuanto a gráficos, así como acción muy variada, diferentes tipos de enemigos, y 36 apasionantes fases, que son cada una de ellas perfectamente re-jugables. Jefes finales, orcos, pájaros, tiburones, humanos, ... todos se dan cita en este notable estreno de RFX Interactive, que, de la mano de TDK Mediactive nos llega traducido al castellano –aunque un pequeño tirón de orejas por la mediocre, en algunos casos, traducción que el juego ha recibido-. Magia, acción y plataformas; suena bien. Aunque suene tópico, si le das una oportunidad, seguro que te sorprenderá.