Kirby vuelve multiplicado por cuatro
Cuando aún tenemos recientes las anteriores andanzas de nuestra pequeña bola rosa preferida, un nuevo juego de la saga llega a la portátil de Nintendo. Kirby y el Laberinto de los Espejos es la traducción que se le ha dado en nuestro país a Kirby & The Amazing Mirror, juego que apareció en el mercado Japonés hace pocos meses bajo unas grandes expectativas y con un notable éxito de ventas.
Y es que a pesar de lo adorable que es nuestro regordete amigo no le faltan enemigos con ganas de hacerle la vida imposible a los pacíficos habitantes de Dream Land. En esta ocasión el mal llega de la mano de Dark Mind y acosa al vecino mundo de los espejos, amenazando con pasar al tranquilo universo de Kirby. Con la intención de evitar el peligro Meta Knight vuela hasta el Gran Espejo del Reino, momento en el cual un desconocido enemigo lo divide en ocho partes cerrando la puerta a la fuente del mal. En similar escena Kirby es atacado y sorprendentemente dividido en cuatro Kirbys solo diferenciados por su color. Con este simple argumento comienza nuestra nueva aventura con el objetivo de recuperar cada uno de los ocho trozos del Gran Espejo y así hallar el camino que conduce al enemigo final de cuya destrucción depende el futuro de Dream Land.
¿ Qué hay de nuevo viejo ?
Pasemos a analizar cuales son las novedades que nos ofrece este juego frente a su antecesor, recordad que ésta es la primera aventura original del personaje en GBA ya que su anterior titulo se trataba de una conversión del clásico de NES Kirby's Adventure.
Gráficamente el juego es igual. Igual de bonito, colorista, carismático y preciosista en cada uno de los escenarios que lo componen. Los clásicos paisajes de fantasía de Kirby repiten en esta ocasión con el mismo derroche de color e imaginación que hacen del devenir por ellos una delicia. Indudablemente la animación no podía ser menos y vuelve a desarrollarse de forma aún mas perfecta si cabe, con perfectas y fluidas animaciones para cada uno de los personajes y enemigos del juego. Gráficamente es un juego sólido, sin rastro de ralentizaciones o fallos que desvirtúen un conjunto delicioso y vibrante. Por repetir repite incluso en el único fallo reseñable de su antecesor, el limitado numero de planos de scroll que aumentado daría mas profundidad a los escenarios.
Varios Kirbys en acción
Variaciones de las clásicas melodías de la saga y nuevas composiciones siguiendo el esquema propio y desenfadado de Kirby componen junto con decenas de nuevos efectos de sonido sumados a los cientos anteriores el conjunto musical del juego. Un apartado sonoro que encaja a la perfección con el estilo de juego y desarrollado técnicamente de forma impecable con un sonido limpio y consistente.
La forma de juego es calcada a Kirby: Nightmare in Dreamland, nuestro amigo no dispone de ninguna habilidad de ataque fuera de tragar a sus enemigos y escupirlos cual proyectil, sin embargo esta habilidad es más útil de lo esperado ya que al tragar a un enemigo podemos capturar sus habilidades, si tenemos en cuenta que durante el juego encontraremos decenas y decenas de enemigos diferentes es fácil ver que las posibilidades aumentan de forma exponencial. Muchos nuevos enemigos aparecen en este juego sumados a los anteriores y ampliando la gama de ataques con posibilidades aun mas sorprendentes.
La pantalla principal
Hasta aquí todo calcado... ¿ Dónde están las novedades ?. La principal novedad de Kirby y el Laberinto de los Espejos es el modo en el que se desarrolla el juego y la importancia de los espejos que le dan titulo. Frente al desarrollo lineal y clásico de la saga donde la forma de avanzar en la aventura era finalizar de forma secuencial fases que nos daban acceso a la siguiente, en esta ocasión disponemos de un mapa único y gigantesco donde están integradas las distintas fases del juego a las cuales podemos acceder desde diferentes lugares por medio de los espejos. Dicho de esta forma suena un poco lioso... Digamos que el mapeado es un gigantesco laberinto donde para acceder a ciertos lugares es necesario encontrar el espejo que lo comunica abriendo de esta forma nuevas ramas del mapa general. Por tanto encontrar los espejos que nos den la entrada a nuevos lugares es el objetivo principal del juego junto con la búsqueda de los trozos esparcidos del Gran Espejo, una vez los tengamos todos la puerta al enemigo final se desbloqueara. Este nuevo modo de afrontar la aventura hace que sea necesario recorrer en multitud de ocasiones el mapa completo para encontrar la puerta que nos lleve a ese misterioso lugar del que no sabemos como llegar, unámosle que el acceso a ciertas zonas solo es posible cuando estemos equipados con ciertas habilidades o telefoneemos a los demás Kirbys y tendremos el motivo por el cual la duración y posibilidades del juego son ampliamente superadas frente a su antecesor.
Un espejo
¿Telefonear a otros Kirbys?. Sí, esto constituye la segunda novedad del juego, durante la aventura podremos llamar a nuestros tres clónicos, que si bien no alardean de una aguda inteligencia nos serán muy útiles para acabar con los enemigos finales y necesarios para acceder a ciertos lugares. Como una aportación más el modo multijugador nos permitirá completar la aventura completa junto con tres amigos mas ( con sus respectivos cartuchos y cables link ), controlando cada uno a un Kirby de distinto color. A modo de guinda final se incluyen tres nuevos mini juegos tanto para un jugador como para divertirnos en compañía de amigos.
¿ Más de los mismo ? Más de lo mejor
Muchos podrían decir y dirán que el nuevo juego de Kirby es más de lo mismo, y no les falta razón, es más de lo mismo que siempre nos ofreció esta saga, es más de lo mejor del genero. Más de lo mismo, pocas cosas cambian... ¿ deben cambiar cuando así son perfectas en su concepción de juego ?. La verdad es que casi todo sigue igual, igual de divertido, igual de jugable, igual de encantador e incluso igual de ingenuo. Este juego es el recuerdo vivo y presente de una generación que agoniza entre tecnicismos y virtuosismos gráficos de ultima generación, artificios que en muchos casos solo es una patina de brillo sobre un fatuo contenido carente de alma propia. Kirby y el Laberinto de los Espejos es "simplemente" un plataformas de la vieja escuela, cuya única pretensión es divertir y lo consigue con una jugabilidad perfecta, medida y consistente. La única aportación nueva viene por el modo en que se desarrollan las fases, cubriendo de esta forma el principal defecto de su predecesor, la escasa duración, ya que a pesar no encontrarnos frente a un juego realmente largo sí que aumenta su duración considerablemente. Si te gustó el anterior, éste te gustara aún mas, si no lo conoces, dale una oportunidad.