Finalmente, en España
Este análisis llega tarde, casi dos meses después de la salida de un juego que los usuarios de Dreamcast esperaban ansiosos. No en vano, ShenMue fue, para vosotros los lectores de Vandal, y para muchos otros "colectivos" más, el mejor juego de 2000. ShenMue 2 llega como agua de Mayo para los usuarios de Dreamcast, que han visto como en apenas un año, su consola ha pasado de gozar de un excelente momento de forma a tener los días contados; quedan pocos lanzamientos para Dreamcast, y ShenMue 2 será uno de los últimos grandes juegos que los usuarios de la última consola de Sega puedan jugar. Y es más, parece que debiésemos sentirnos agradecidos por el derecho a poder disfrutar de ShenMue 2 en Europa, pues nuestros casi siempre envidiados compañeros de aficción americanos no podrán disfrutar de este esperado juego en su país. ¿La razón? Money, pela, plata, cartos, dinero, el vil metal, o el nombre que ustedes quieran ponerle; Sega ha hecho al juego exclusivo para Xbox en Norteamérica, gran jugada de Microsoft y buena cantidad de dinero para Sega. La actitud de Sega hacia sus usuarios ha sido nefasta en este caso, aunque comprensible. Si yo debiese cientos de miles de millones de yenes posiblemente acabaría decepcionando a unas cuantas personas. Sin embargo, el "desembarco europeo" de ShenMue 2 no parece deberse a la benevolencia de Sega hacia los usuarios del viejo continente, sino que más bien se deba a que Big Ben tiene los derechos de distribución de Dreamcast en Europa, y Sega tenga las manos atadas (por contratos) en este caso. Aunque finalmente haya llegado, hay que resaltar que la localización tal vez sea la peor de todos los tiempos (bueno, exceptuando a Zero Wing): Voces en japonés, textos en inglés y sólo las ayudas y el diario en castellano. Aunque siguiendo el proverbio de los Monthy Python, ahora si un japonés me viene preguntando por la mafia podré contestarle que me deje en paz en su propio idioma, mientras que antes llamaría a la policía (o a inmigración). Empecemos pues con el análisis de ShenMue 2, que llega tarde y tal vez como homenaje a la obra de Yu Suzuki, pues no creo que sea necesario, pues no es un juego del que haya que aconsejar la compra; todo usuario de Dreamcast (excepto el que haya odiado el primero) debería comprar ShenMue 2.
La relevancia de ShenMue no se debía, aunque bien pudiera, a su sensacional apartado gráfico, que por aquella época, cuando Xbox y GameCube aún no estaban en el mercado y PS2 aún no había mostrado su mejor cara, impresionaba. Su importancia se debía a su jugabilidad, a ese sistema de juego llamado, especialmente para que sus siglas coincidan con el adjetivo "libre", Full Reactive Eyes Environment; en ShenMue la ciudad de Yokosuka estaba viva, y sus habitantes realizaban sus quehaceres diarios como todo bicho viviente que se precie. Nosotros podíamos verlo todo, interactuar con muchas cosas (en realidad pocas, pero en comparación con los juegos actuales, eran muchas) y hablar con nuestros paisanos, que nos ayudaban con valiosa información para nuestra aventura. La exploración se combinaba con unos impresionantes Quick Time Events y un sistema de lucha "yo contra el barrio" inspirado en Virtua Fighter. De hecho, durante mucho tiempo las revistas japonesas se refirieron a ShenMue como "Virtua Fighter RPG". ShenMue, al contrario que otros juegos revolucionarios como Mario 64 o Doom, no será clonado ni copiado, por la sencilla razón de que la cantidad de recursos necesarios para un proyecto de esta envergadura no está disponible para muchas compañías; solo unas pocas (Nintendo, EA, Konami, Capcom y alguna que otra más) podrían permitirse el lujo de hacer "su ShenMue".
Algunos cambios respecto a ShenMue
ShenMue 2 es un juego que aquí en Vandal hemos seguido de cerca, desde antes del primer vídeo que incluía ese GD extra que venía con la versión japonesa de Fighting Vipers, desde los primeros rumores sobre si saldría o dejaría de salir, y desde ese momento fuimos publicando cada detalle nuevo que salía a la luz, cada nueva imagen de esplendor gráfico (servidor se paso una hora capturando imágenes de un vídeo), en definitiva, todo lo que podría interesar a aquellos que, como yo, disfrutaron mucho con el primer juego. La información fluyó continuamente e incluso se publicaron hasta dos avances del juego. Ahora es toda una experiencia ver cuales de esos rumores o promesas hechas por los desarrolladores se han cumplido. Hay pequeñas decepciones. Los tiempos de carga no se han disminuido, el slowdown no ha desaparecido, aunque eso sí, ahora se muestran más personajes en pantalla (aunque sigue habiendo fade-in y fade-out). Además, y aunque ShenMue 2 es mejor gráficamente que la primera parte, relativamente parece peor. Hay que darse cuenta de que en este año de diferencia que hay entre los dos juegos han salido dos consolas nuevas, con monstruos gráficos de la talla de Rogue Leader, Halo o DOA3, y PS2 ha comenzado a demostrar sus capacidades gráficas, con espectáculos visuales como GT3, DMC o MGS2. Por lo tanto –y como es normal-, ShenMue 2 ya no causa tanta impresión como el primero, lo cual a mí personalmente me es irrelevante, pero deja constancia del abismo existente entre la consola menos potente de esta generación (diciembre 98) y la que mayor capacidad gráfica posee (noviembre 01).
Señores pasajeros, estamos llegando a Hong Kong
Es un gustazo poder hablar ahora de la historia de ShenMue 1 sin miedo a "spoilear" a nadie, pues es necesario conocerla para entender esta segunda parte. Además, el juego se encarga de contárnosla mediante la "digest movie" del cuarto GD. Nosotros somos Ryo Hazuki, un joven de 17 años cuyo padre es un maestro de artes marciales llamado Iwao Hazuki; un buen día de diciembre, "papá tiene visita", en forma de chino malo de película de van damme con vestimenta verdeamarillenta, mirada torva y nombre Lan Di. Un combate memorable tiene lugar en el que nuestro padre recibe una espectacular paliza, para morir después, tras unas últimas palabras. Nosotros, pese a haber heredado por memoria genética las artes marciales de nuestro padre, estamos mientras en el suelo tras recibir un par de bofetones de Lan Di. Inmediatamente tras la marcha de los malvados juramos venganza y nos ponemos en camino para obtener información. Tras meternos en bastantes peleas con gente de los barrios bajos, conocer al Maestro Chen y a su hijo, vencer a un malo final realmente loco y descubrir que Lan Di se ha marchado en Hong Kong, nosotros hacemos lo propio, con el objetivo de encontrar a Yuanda Zhu, un viejo amigo de nuestro padre, para lo cual buscaremos la ayuda del maestro Lishao Tao.
Así comienza la historia de ShenMue 2: Ryo llega al puerto de Hong Kong con su petate verde al hombro y con el objetivo de encontrar a Lishao Tao en mente. Aunque encontrar a una persona puede parecer fácil en un principio (si sabemos donde vive), Lishao Tao es ahora el maestro de un templo y para verle tendremos que superar una pequeña prueba, que llevará a Ryo a profundizar más en el conocimiento de las artes marciales.
Evitando fastidiar la historia a los que aún no lo hayan jugado, diré que ShenMue 2 vuelve a empaparnos de rica cultura oriental como ya lo había hecho el primero. A la historia de los dos espejos se les suman otras de la mitología china, o de las artes marciales, y la historia de venganza de Ryo se cruza con otras, de tristeza en el caso de Xiuying, de ambición en el caso de Ren o de simple y llana golfería si hablamos de Joy.
Los lugares y personajes
Aunque lo mejor es descubrir las cosas por uno mismo, e ir conociendo los lugares y personajes a medida que la historia avanza, veamos una breve descripción de los sitios por los que transcurrirá la aventura y de los personajes importantes que intervendrán. En la primera parte de la aventura estaremos en Aberdeen y Wan Chai, dos zonas conectadas entre sí y que corresponden al puerto y al "area de trabajo" de Hong Kong, y a su zona comercial. El tercer capítulo y el tercer CD transcurren por entero en Kowloon. Por último, el cuarto CD transcurre en Keirin, donde por fin veremos a Shen Hua.
En cuanto a los personajes, aparte del emocionalmente retrasado Ryo Hazuki, tenemos a Wong, un chico de los barrios bajos con el que tras un mal comienzo entablaremos amistad, Joy, una pelirroja explosiva y algo golfa que intentará constantemente que le hagamos caso, Xiuying, una mujer con la que tendremos una relación bastante interesante y que nos intentará llevar por el buen camino, Ren, el jefe de la más peligrosa banda de Aberdeen, que tras su temperamento agresivo, su actitud su agresiva, su forma de hablar agresiva, su vestimenta agresiva y su navaja agresiva, esconde un corazón agresivo, pero también noble; y por último Fang Mei, ayudante de Xiuying, una chica con la que no entablaremos mucha relación a no ser que queramos, lo cual nos otorgará alguna que otra sorpresa. Estos son, por decirlo de alguna manera, los principales "buenos" de la película. En el plantel de malvados tendremos a Lan Di, por supuesto, pero a otros de la mafia de Hong Kong como el enormísimo Don Niu, la insoportable Yuan y otros con el que nos batiremos el cobre a lo largo de toda la aventura.
Un mundo mayor
Un cambio radical respecto al anterior ShenMue es que ahora el mundo donde transcurre el juego es mucho mayor. La Yokosuka que conocimos constaba del dojo Hazuki y sus vecinos, del pueblo de al lado, del barrio de Dobuita y del puerto. Fin de la historia. En ShenMue 2, en cambio, cada escenario urbano es mucho mayor, lo cual además de contribuir a que la historia no se "encapsule" en un solo lugar, hace que aumente la cantidad de lugares a donde ir, con los que interactuar, y personas que conocer. La parte mala de esto es que al aumentar el tamaño de las ciudades, es posible que nos perdamos muchas cosas: si investigásemos al fondo todo el mapeado, tardaríamos muchas horas en ver todos los detalles. Como advertencia, por si llegáis a Kowloon sin "oler" las máquinas de Wan Chai, están en el Golden Qr. Esta cantidad de escenarios ha provocado que muy inteligentemente AM#2 colocase varias máquinas de mapas, que por 10 dólares hongkongeses nos darán un mapa del área actual o de la siguiente. En Kowloon habrá incluso mapas de los edificios.
Los cambios en la jugabilidad
El sistema de juego de ShenMue 2 es más o menos el mismo que el anterior. Todo un mundo por explorar, encauzados suavemente por un desarrollo completamente lineal que no nos dejará salirnos del devenir de la historia ni por un momento. Por decirlo de la manera más clara: la libertad de actuación, y elección, es nula. Sólo podremos hablar con la gente del tema en cuestión sobre el que estemos buscando información, y sólo podremos entablar cierta relación con dos personajes (Izumi y Eileen) que no estén insertados en la historia del juego. Estamos, pues, ante un Full Reactive Eyes Environment capado y mutilado, puesto que lo que podría ser toda una revolución como concepto de juego ha sido de nuevo contrariado por la linealidad.
Aparte de esto, que sencillamente sigue igual, se han introducido los Command Quick Time Events, que son como los Quick Time Events pero combinando varios botones al mismo tiempo. Con esto y con un mayor nivel de exigencia (cuando estemos sobre las tablas de ese edificio de Kowloon lo sabremos) se han hecho más difíciles los QTE. En cuanto a la Free Battle al estilo "yo contra el barrio", son prácticamente iguales a las de ShenMue con la excepción de un mayor número de movimientos, ya que en nuestro periplo por la colonia británica aprenderemos bastantes movimientos de las artes marciales chinas que añadiremos a nuestro repertorio de movimientos, que llegará a tener hasta tres movimientos por combinación de botones. El número de luchas y Quick Time Events no es demasiado numeroso, siendo casi nulo al principio del juego y, aunque aumenta después, no consigue que SH2 esté "más orientado a la acción" como se había dicho en un principio.
En el modo Free Quest, ahora los botones indicarán, al estilo Zelda, las acciones que podemos realizar, gracias a iconos superpuestos. También podremos seleccionar dos tipos de conversaciones con los viandantes: la conversación habitual y la de dinero. Para ganar dinero tendremos varias formas, siendo la más habitual trabajar (aunque no hay demasiados trabajos: cargar cajas, dependiente de pachinko y poco más), el juego (aquí sí hay variedad, aunque mucho riesgo), los pulsos o las luchas (los pulsos son terriblemente difíciles, y las luchas no consisten exactamente en derrotar al enemigo) y el pachinko (más que otra cosa, cuestión de suerte).
Gráficamente, aún con fallos
A nivel gráfico ShenMue 2 es de lo mejor que se ha visto en Dreamcast aunque como ya decíamos antes ha perdido el poder de impresión que tenía el interior. La presentación de las secuencias cinemáticas sigue siendo soberbia, dando al juego en algunas ocasiones un aspecto muy cinematográficos. Los escenarios están recreados a la perfección, con una variedad y riqueza de texturas que llama la atención. Se nota que AM#2 no ha escatimado en detalles (lease numerario) para intentar recrear la ciudad de Hong Kong, sus tiendas, sus gentes y en general, la excelente ambientación con que han dotado al juego.
Sin embargo, donde hay luces siempre hay sombras, y la belleza gráfica de ShenMue 2 se ve enturbiada por unos slowdowns que entrarían en el record Guiness. De acuerdo, cuando vimos la escena con los tropecientos karetekas practicando en el templo creimos que no existirían, pero de hecho están en todas partes (menos, casualmente, en esa escena). También se había dicho que desaparecería el molesto fade-in de los personajes (en la primera parte era ridículo que a tres metros la gente desapareciese de nuestra vista), y en ShenMue 2 es menor, pero no ha desaparecido del todo. De hecho, esta vez en vez de desaparecer a tres pasos, lo harán a diez, e incluso si están a nuestro lado antes de salir de nuestro campo de visión. No creo que esto les haya pasado desapercibido a los técnicos de AM#2, pero suponemos que para lograr introducir tantas cosas en pantalla hay que hacer algún que otro sacrificio, debido a que el hardware de DC es limitado.
Melódicamente perfecto
Composiciones de corte oriental conforman el apartado sonoro de ShenMue 2. Básicamente, cada parte del mapeado tendrá su propia melodía, y en las escenas cinemáticas se intercalarán otras. Las melodías nunca llegan a cansar, puesto que ni poseen mucha carga (suelen ser pausadas y suaves) y varían con bastante frecuencia. En cuanto al sonido, obviando los clásicos FX de monedas, golpes, etc, las voces están dobladas al japonés, por lo que aquí no se puede juzgar demasiado, puesto que no somos japoneses; las voces son simplemente incomodas, ¡¡puesto que no las entendemos!!. De acuerdo, que estuviesen en inglés en la primera parte pasa, pero el japonés ni siquiera es indoeuropeo. Un gran fallo por parte de Sega, que subsana como puede con unos subtítulos en inglés y una nimia traducción del diario al castellano.
¿Un juego para todos?
Cuando estamos llegando al final del análisis y ya hemos descrito más o menos como es ShenMue 2, es necesario abordar un tema muy importante, el de la diversión: el primer ShenMue no dejó indiferente a nadie: Hubo algunos que amaron el sistema de juego, el hecho de pasear por las calles de Yokosuka por mero placer, descubrir los secretos, cuidar al gato y conseguir todas las figuritas posibles; hubo también los que jugaron y disfrutaron del juego, aunque sin profundizar más (por miedo a quedarse dormidos) en la "experiencia ShenMue"; y hubo, por último, aquellos que simplemente odiaron la lentitud del juego desde el principio. Podría decirse que hay dos maneras de jugar a ShenMue 2: una aburrida, y otra muy aburrida. La aburrida nos tiene esperando haciendo las cosas lo más rápido posible para llegar a la próxima escena de acción, y la muy aburrida (que será divertida para el jugador) consiste en preocuparse del cumpleaños de Fang Mei, participar en las carreras, etc...
ShenMue 2 vuelve a tener esa terrible falta de acción del primero, quizás mucho más acusada en las primeras horas de juego, y también vuelve a tener esa agobiante y odiosa linealidad, que te impide hacer algo diferente que no sea buscar la venganza. Sin embargo, su historia es de lejos mucho más entretenida que la del primero, sus personajes más carismáticos (Ren y Xiuying simplemente aplastan a Ryo), la aventura más variada (con los Chawan Signs, las pruebas del Wude, etc...) y sus parajes mucho más imaginativos y numerosos. Si eres de los que disfrutaron de la primera parte, ShenMue 2 te encandilará aún más. Si por el contrario odiaste la primera parte, corre, no pares de correr, y no mirés a atrás. Sea lo que sea, objetivamente ShenMue 2 es uno de los mejores videojuegos de Dreamcast, una buena muestra de la imaginación y creatividad de Yu Suzuki y su equipo y una compra obligada (a no ser que sientas fobia) para todos los usuarios de DC.