El survival horror vuelve a Dreamcast
El miedo extremo vuelve a Dreamcast, en unos pocos meses podremos enfrentarnos al horror de sobrevivir a un megatrilher de mutaciones y aberraciones monstruosas en un portaaviones de la marina estado unidense, así que en vandal te ofrecemos este análisis ntsc para que no te pierdas un ápice de lo que te espera.
Bueno hay que decir que el juego no es una maravilla, en realidad es una bonita fusión entre resident evil y blue stinger pero en serie B. De resident evil coge casi todo, lo que me hace dudar de sí es un blue stinger es lo parecidos que son los personajes del juego en diseño, lo que bastante peor plasmados.
Un portaviones cargado de mutantes
Como lo oís un portaaviones americano será donde se desencadenara la masacre. Jaleco ha apostado por hacer un survival horror que aunque esta claramente inspirado en resident evil puede dar mucho de sí.
La historia del juego será un tanto confusa, data del año 2000 cuando un grupo terrorista que se ha alzado mundialmente contra las fuerzas aliadas(suponemos que se refieren al mundo libre), bien pues dicho grupo se ha alzado con tanta fuerza que siembra el terror entre las naciones aliadas, el mundo libre preocupado por la seguridad de sus conciudadanos crea un portaaviones con armamento mega sofisticado en el año 2023, este porta aviones tendría la difícil misión de hacer sucumbir a la resistencia terrorista y su primera misión sería la Hurrican misión; Lamentablemente el govierno perdió la comunicación con el portaaviones cuando iba de camino a la misión y los aliados enviaron un helicóptero con nuestros dos héroes armados hasta los dientes para que descubrieran los extraños sucesos que acontecían en el portaaviones que navegaba sin rumbo por el basto océano.
Como habréis podido apreciar, demasiados cabos sueltos en este guión de introducción al juego, no es por ponerle pegas al producto de jaleco, pero enviar a un equipo de rescate de dos personas tan solo parece un poco ridículo.
Gráficos
Las imágenes de vídeo de la introducción están geniales, podremos ver una secuencia de vídeo en la que el protagonista que llega en helicóptero al sofisticado barco de guerra Carrier, es bombardeado por este, hasta ser derribado.
Los escenarios son prerederizados, es quizás un punto un tanto negativo del juego, ya que este tipo de escenarios se utiliza en juegos de playstation pero en Dreamcast se pueden hacer entornos 3D sin problemas, claro que también son más problemas para el programador.
Los escenarios se limitan a ser básicamente salas y pasillos de un porta aviones, pero al andar por el barco tenemos en todo momento aquella sensación de que nada bueno ocurre en el lugar, como si oliera a gato muerto, es decir nos introducen muy bien en el rol de la aventura.
Las cámaras del juego son fijas como las de resident evil siguen la acción cinematicamente.
Los efectos de luces y visuales del juego son quizás uno de los puntos más a destacar del apartado gráfico ya que cumplen con creces su objetivo que es darle una atmósfera lúgubre al juego.
Sonido
Es casi nulo, una especie de tondadilla que se acelerará o se enllentecerá según el grado de acción de la escena para de esta forma generar las dosis suficientes de tensión que requiere el juego, nada que reprochar en este aspecto.
Los FX cumplen su papel y gracias a dios el doblaje del juego japonés es en ingles lo que me ha facilitado mucho la tarea a la hora de entender los diálogos y trama del juego.
Jugabilidad
La copia idéntica de resident evil. El personaje rota sobre un mismo punto hasta que decidas la dirección que decides tomar para avanzar. Los menús de armas y items son idénticos y el framerate igual de bueno que en cualquier resident.
Divertido
uff, es que si he de ser sincero no es muy divertido matar zombies con un aspecto más que dudoso, si he de decir verdad el héroe de la aventura esta bastante trabajado pero los zombies y extras no son lo suficientemente buenos para aparecer en el juego, esto hace que a veces el juego pierda ese carisma del que en vano han querido dotar los programadores de Jaleco a Carrier, una lástima.