No solo pasa en Madrid. Si bien la capital está sumida en un proceso de cambio profundo en infraestructuras y la ampliación de la urbe con el colosal Madrid Nuevo Norte, el levante español está dando pasos en la misma dirección. Más allá de Benidorm, lo cierto es que el horizonte de Valencia se prepara para recibir un nuevo inquilino como otras grandes capitales.
La ciudad del Turia, que en los últimos años ha visto cómo su perfil urbano crecía en vertical, sumará pronto un nuevo símbolo de esa tendencia arquitectónica: AQ The One, el proyecto más ambicioso de la promotora AQ Acentor en la región. Situado en Burjassot, el edificio superará los 100 metros de altura distribuidos en 30 plantas, con un total de 200 viviendas que dominarán la Avenida de las Cortes Valencianas.
Valencia construye AQ The One, un rascacielos de gran lujo con viviendas de más de 400.000 euros y tecnología de vanguardia
Los futuros residentes podrán elegir entre pisos de dos a cuatro dormitorios, todos con amplias terrazas orientadas a maximizar la luz natural. Los precios oscilan entre 426.000 euros para las viviendas más estándar y 1,5 millones para los áticos de lujo, un abanico que revela tanto la orientación residencial como el atractivo inversor del proyecto. A ello se suman comodidades propias de la alta gama: garaje, trastero y acceso a zonas comunes de estética contemporánea, donde el vidrio y las líneas limpias protagonizan el diseño.
Pese a su altura, AQ The One no destronará al edificio más alto de Valencia, la Torre Hilton, hoy Hotel Meliá, que con 117 metros mantiene su reinado desde 2011, aunque se integrará en ese nuevo paisaje urbano que empieza a definir la periferia norte de la ciudad. El complejo reserva su planta baja a los espacios sociales: una piscina familiar rodeada de jardines, gimnasio, cine privado, áreas de trabajo, lavandería industrial e incluso un espacio para el cuidado de mascotas y reparación de bicicletas o patinetes.
En la planta 12, los residentes encontrarán un paraíso para el bienestar: piscina infinita, spa, sauna, baño turco, jacuzzi, pileta fría, zona de masajes y un espacio de coworking con biblioteca y bodega de vinos. Este proyecto, diseñado por el estudio Ingennus -los mismos detrás de la Torre Zaragoza., se inscribe en una tendencia nacional: la nueva fiebre de los rascacielos residenciales.
Ciudades como Benidorm, Málaga o Madrid están viviendo una auténtica carrera por elevar su perfil urbano con proyectos que mezclan lujo, sostenibilidad y vistas de vértigo.















