A nivel global, la cantidad de perros y gatos sin hogar supera ampliamente el número de aquellos considerados animales de compañía. Mientras que en algunos países se les percibe como un problema que debe erradicarse, en otros son vistos como parte del ecosistema urbano.
Un reciente estudio publicado en el Journal of Applied Animal Welfare Science ha analizado las diferencias en la percepción y gestión de los animales callejeros en Estados Unidos e India, arrojando datos reveladores sobre cómo se abordan estas cuestiones.
Se preocupan más por los animales pero como vectores de enfermedades
En Estados Unidos, el 93% de los encuestados expresó preocupación por el bienestar de los perros callejeros, y el 86% por el de los gatos. Sin embargo, también existe un alto temor por los riesgos sanitarios y el impacto ambiental, especialmente por el daño que los gatos pueden causar a la fauna silvestre. De hecho, no está mal visto el sacrifico de animales sanos que estén en situación de calle.
En contraste, en India, aunque la preocupación por el bienestar animal es menor, los animales callejeros son parte del entorno urbano y son cuidados por la comunidad. La Constitución india fomenta la compasión hacia los animales, lo que influye en esta percepción más integradora. Uno de los puntos clave del estudio es la responsabilidad sobre la gestión de estos animales. En ambos países, la mayoría de los encuestados cree que el gobierno y las ONG deben encargarse del problema.
Sin embargo, en India, casi un 30% más de personas considera que la ciudadanía también tiene un papel activo en este cuidado. En cuanto a estrategias de control, Estados Unidos prioriza la adopción y reubicación en hogares, mientras que India favorece el método de captura, esterilización, vacunación y suelta (CES), permitiendo que los animales permanezcan en la calle.
Cómo es el panorama en España
En España, el abandono de animales sigue siendo una realidad. Según el informe Él nunca lo haría de Fundación Affinity (2024), más de 286.000 perros y gatos fueron recogidos por protectoras en 2023. Aunque la adopción está consolidada, el sistema CES sigue siendo la principal estrategia para el control de colonias felinas.
En el caso de los perros, la mayoría es derivada a refugios a la espera de adopción, aunque las protectoras denuncian problemas de saturación y falta de recursos. Con la Ley de Bienestar Animal 7/2023, España prohíbe el sacrificio de animales sanos en centros de protección, una medida ética pero que plantea desafíos logísticos. La diferencia en la percepción y gestión de los animales callejeros a nivel mundial muestra la necesidad de modelos equilibrados que combinen bienestar animal, control sanitario y sostenibilidad urbana.















