Eric Dane, rostro icónico de la televisión gracias a su paso por series como Anatomía de Grey o la aclamada Euphoria, atraviesa uno de los momentos más complejos de su vida. A sus 52 años, el actor ha revelado que padece Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), una enfermedad neurodegenerativa que ya afecta profundamente a su cuerpo y amenaza con arrebatarle mucho más que su carrera.
Eric Dane y la batalla más dura del actor de Euphoria y Anatomía de Grey: "No quiero que este sea el final de mi historia"
"Estoy luchando más de lo que puedo", confesaba Dane en una entrevista reciente para Good Morning America, donde narró con crudeza el camino que lo condujo al diagnóstico. Todo comenzó con una molestia aparentemente trivial: una debilidad en la mano derecha. "Pensé que era por abusar del móvil", explica. Pero aquella sensación fue creciendo. De médico en médico, recorrió una cadena de especialistas hasta que la temida palabra se hizo presente: ELA. “Está muy por encima de mi nivel salarial”, ironiza con amargura sobre el tratamiento.
Su testimonio no se queda en lo físico. Dane habla también del dolor emocional: "Estoy enfadado porque perdí a mi padre cuando era muy joven. Y ahora hay muchas posibilidades de que mis hijas me pierdan a mí". Una declaración descarnada de alguien que, aun enfrentándose al abismo, se niega a entregarse. “No creo que este sea el final de mi historia. No quiero que lo sea”, afirma con firmeza. “Si me dijeran que comiéndome una cabeza de serpiente de cascabel me curo, lo haría. Volaría a Alemania si hiciera falta”.
Mientras su cuerpo comenzaba a deteriorarse —espasmos, dificultades para hablar, una mano completamente paralizada y la otra empezando a fallar—, Dane no detuvo su actividad profesional. Rodó la serie La cuenta atrás y, poco después, se reincorporó al set de la tercera temporada de Euphoria. Todo eso mientras el miedo a que sus piernas dejen también de responder se cuela silenciosamente en su día a día.
En este proceso, ha contado con un apoyo fundamental: su exmujer, la actriz y directora Rebecca Gayheart. Aunque su divorcio estaba en marcha, lo paralizaron tras el diagnóstico. Juntos comparten la crianza de sus dos hijas, de 13 y 15 años. Fue precisamente una de ellas quien, en un episodio que el propio actor describe como “descorazonador”, tuvo que rescatarlo en el mar al no poder nadar de vuelta al bote.
A pesar de todo, sus compañeros lo describen como un titán. “Eric lucha, no huye. Me enorgullece conocerlo, pero aún más ser su amigo”, afirma Jensen Ackles, compañero de reparto en La cuenta atrás. En medio del dolor y la incertidumbre, Dane sigue firme, aferrado a la vida y decidido a escribir, él mismo, el siguiente capítulo de su historia.















