Facebook conocía los riesgos de seguridad que implicaban el uso de la herramienta para iniciar sesión en aplicaciones y webs de terceros usando la cuenta de la red social, pero se lo comunicó solo a los empleados de la compañía, no a los cientos de millones de usuarios de la red social.
El año pasado, Facebook desvelaba que las cuentas de 50 millones de usuarios habían quedado al descubierto. Más tarde se supo que realmente habían sido 29 millones el número de cuentas comprometidas. En un principio se creyó que los hackers habían accedido a sitios y aplicaciones de terceros usando las cuentas de Facebook comprometidas, pero más tarde se comprobó que no fue así.
La Corte de Distrito del Norte de California, San Francisco, está inmersa en un proceso judicial centrado en los posibles peligros de que Facebook ofrezca un servicio de inicio de sesión para aplicaciones y webs de terceros. Según Reuters, de dicha investigación se extrae que la compañía advirtió a sus empleados de los problemas de seguridad de la funcionalidad, pero estos no fueron compartidos con los usuarios.
William Alsup, el juez que se está encargado del caso, dijo en enero de este año que permitiría un "fortísimo descubrimiento de pruebas" para llegar al fondo de cómo fueron comprometidos los datos de los usuarios de la red social. Gracias a esto, los abogados de los demandantes pueden acceder a los registros de Facebook.
Esta misma semana Facebook se veía inmersa en un nuevo escándalo sobre privacidad al hacerse público que la compañía había estado escuchando y transcribiendo los mensajes de audio privados de usuarios que utilizaban Messenger.
