Universal y AMC Theatres, el estudio y la principal cadena de cines de Estados Unidos y una de las grandes damnificadas por la pandemia de coronavirus, han llegado a un importante acuerdo. Si recordáis, ambas partes tuvieron un encontronazo por los derechos de distribución y exhibición de Trolls World Tour, que se lanzó en varias plataformas digitales antes de llegar a los cines en mitad la pandemia, cuando las salas permanecían cerradas. AMC amenazó con no estrenar nuevos films de la major en sus instalaciones. El asunto se calmó Universal Pictures buscó un término medio y ahora parece que el debate ha cristalizado con una ventana de lanzamiento para las películas que puede cambiar el cine para siempre.
Universal lanzará sus películas en digital tres semanas después de su estreno en cines
AMC no podía permitirse dejar ir a Universal, ya que la major tenía en sus manos películas y éxitos de taquilla muy esperados como Fast & Furious 9 y Jurassic World: Dominion, dos de las grandes cintas que pueden cambiar el sino de los cines en 2021. Meses después de que las dos partes discutieran inicialmente sobre los derechos de exhibición, ahora hay un nuevo acuerdo que parece que marca las pautas para un cambio enorme en el sector cinematográfico. Desde ahora, las películas de Universal tendrán que comprometerse a una ventana de exclusividad teatral de al menos tres fines de semana (17 días), tras los cuales el estudio tendrá la oportunidad de distribuir o vender sus películas a través de las plataformas premium de video bajo demanda como iTunes o similares, incluyendo el portal de la cadena, AMC Theatres On Demand.
¿Qué quiere decir esto? Pues que tras años de status quo, ahora una major importante puede decidir si lanzar su película de éxito tras el plazo de los tres fines de semana en una plataforma digital. La situación cambia radicalmente las ventanas de lanzamiento clásicas, en las que las productoras y distribuidoras esperaban unos meses -entre dos y cuatro- para el lanzamiento en formato digital, y otras semanas para la llegada al formato doméstico en formato físico.
Entre el estreno en cines de un gran éxito y la llegada en Blu-ray o DVD al consumidor, podían pasar entre cuatro y cinco meses, quizás algo más en determinadas circunstancias. El escenario tras el coronavirus, en el que la distribución digital VOD ha salvado los muebles de una temporada que sigue siendo catastrófica, es muy diferente. Las compañías quieren rentabilidad en un mundo en el que los cines cierran y abren en un círculo vicioso, y en el que los costes de las producciones han ascendido considerablemente.
También pueden existir diferencias en los grandes estrenos. Fast and Furious 9 y Jurassic World: Dominion estarían más tiempo en pantalla grande, es lógico, son blockbusters pantagruélicos que necesitan de todo el dinero que sean capaces de recaudar, pero pequeñas producciones como El hombre invisible, uno de los éxitos del año, pueden obtener más rédito de lo que creemos con este cambio de paradigma. Si una película tiene perspectivas de taquilla limitadas, puede saltar al formato digital, y ahí ganar mucho dinero. Por último, así se ofrecen nuevas opciones al espectador. Una persona puede decidir si ver la película que espera en el cine o guardar dicha entrada para hacerlo desde la comodidad de su casa.
