Pocos hombres han cambiado tanto la industria del cine como Charles Lippincott, que ha fallecido a los ochenta años según confirma The Hollywood Reporter. Lippincot, clave en el desarrollo y la concepción de lo que hoy consideramos es un blockbuster, desarrolló la primigenia campaña de publicidad del film de George Lucas, La guerra de las galaxias, y modificó el horizonte de Hollywood al inventar una nueva forma de comercialización para un film: había nacido el marketing moderno.
Un publicista que lo cambió todo
Lippincott falleció el pasado martes a la edad de ochenta años tras un ataque al corazón. El responsable de la mercadotecnia de Star Wars, uno de los hombres de confianza de George Lucas, colaboró con éxito de la space opera, pero también trabajó en el diseño de producción y publicidad en films como Alien, el octavo pasajero (1979) y Westworld: Almas de metal (1973). Al cambiar el concepto de comercialización del film, vendiendo productos relacionados como juguetes o cómics que ampliaban la historia, ayudó a cimentar la base de lo que es Star Wars a día de hoy, una sólida creación transmedia capaz de traspasar la pantalla y convertirse en parte de nuestro día a día a través de un incalculable número de objetos distintos. Este avezado publicista fue uno de los que aprobó el trato con Kenner para la creación de los juguetes que irrumpieron con fuerza en las tiendas tras el estreno del film, y dio luz verde al inefable Star Wars Holiday Special en CBS, un fallido show que, sin embargo, abrió la puerta al creciente universo expandido de Lucasfilm y a la publicación de nuevas historias bajo el sello de Marvel.
"Charley fue uno de los pilares sobre los que se construyó el fenómeno de Star Wars", explicaba George Lucas a The Hollywood Reporter. "Comenzó en serio el concepto de licenciar películas en un momento en que la única compañía que lo hacía era Disney.
Charley fue quien dijo desde el principio que Star Wars podría funcionar en este aspecto y fue la primera persona en desarrollar licencias de la película y relacionarse de forma directa con los fans. Tenía ideas sobre marketing y relaciones públicas que eran realmente incomparables", añadía Lucas.
De hecho, Lippincott llevó la película a la Comic-Con de San Diego, mostrándole a los fans el cine que podría estar por llegar a las salas con muchos meses de antelación, un concepto pionero. "Las cosas que creó y consolidó con Star Wars revolucionaron la forma en la que se comercializaban las películas, con un enfoque de marketing más popular, llevando las cosas a la audiencia real", explicaba al citado medio su amigo y socio, Craig Miller, que trabajó como asistente de publicidad en Star Wars. "Creo que cambió la forma en que se desarrollaría la industria de ahí en adelante", matizaba. "Se convirtió en una leyenda del marketing por una razón... Fue brillante en lo que hizo. Recorrimos el mundo juntos promocionando Star Wars antes de que nadie supiera lo que era. Era un buen amigo, y siempre lo extrañaré", concluía Mark Hamill, Luke Skywalker en la saga galáctica que lo cambió todo.