Es probablemente el spoiler más conocido de toda la historia del cine. 'Yo soy tu padre', pronuncia Darth Vader en el momento álgido de 'El imperio contraataca' tras luchar a espadazos contra Luke Skywalker. La que fue en su momento la segunda película de la saga Star Wars estrenada en 1980 trastocaría para siempre los cimientos del séptimo arte con esta breve línea de guion. La frase, una revelación que nadie vio venir, ha pasado a la posteridad y se ha convertido en un icono, en una réplica que mucha gente ha repetido una y otra vez, incluso aquellos que ni siquiera han llegado a ver el material original del que procede.
¿Cómo se escribió este instante? ¿Cómo se preparó una de las sorpresas mejor guardadas y qué motivó a George Lucas y su equipo a unir por parentesco familiar al villano y al héroe de su historia? Hace unos años, el propio Lawrence Kasdan, co-guionista del filme, rememoró en una entrevista especial con Entertaiment Weekly los entresijos detrás de esta increíble revelación.
Lawrence Kasdan, co-guionista de 'El imperio contraataca', explica cómo se creó el mítico giro de guion de 'Yo soy tu padre'
Es curioso saber que George Lucas, el padre de Star Wars, no tenía inicialmente entre sus planes convertir a Darth Vader en el padre de Luke Skywalker. Esto no estaba escrito en las notas del cineasta en 1977, cuando se estrenó la primera película de la saga, pero una vez se dio luz verde a una secuela tras el éxito fulgurante de 'Una nueva esperanza', Lucas empezó a pensar que sería una ideal genial sorprender a todos con este jugoso giro inesperado de los acontecimientos.
Por aquella época, el también guionista y amigo de Lucas, Lawrence Kasdan, acababa de terminar el guion de 'En busca del arca perdida', la primera cinta de Indiana Jones, y George lo contrató para que se encargase de dar forma al texto de la secuela de Star Wars. Ambos se reunieron y Kasdan cuenta que Lucas le espetó: "Sabes, Darth Vader es el padre de Luke". "Me quedé estupefacto y asombrado", recuerda el escritor.
Era una sorpresa que debía ser un secreto, incluso dentro del set. "Escribimos páginas falsas, todas diferentes. El elenco no tuvo las páginas hasta el último segundo", menciona Kasdan.
Por ejemplo, a Mark Hamill no le dijeron la verdad hasta unos momentos antes de rodar la mítica escena. Hasta ese punto llegó el secretismo en unos tiempos en los que no era tan habitual como hoy día mantener a buen resguardo las sorpresas de las tramas.
Así, para que nadie estropease este impactante giro, se les ocurrió que la gente que tenía acceso al guion leyese otra revelación distinta. En el guion falso, la frase de Darth Vader aludía a que había sido Obi-Wan Kenobi el que había matado al padre de Luke. Otro giro interesante, sin duda, que de hecho acabó filtrándose a la prensa británica en menos de una semana y sirvió para despistar a los espectadores más curiosos cuando fuesen finalmente al cine a ver la versión definitiva.
Kasdan tiene claro que la escena funcionó no solo por la sorpresa en sí, sino porque "toda esa energía y toda esa narración que se desarrolló estaba dirigida a ese pequeño lugar". El guionista asegura que todos trabajaron para llegar hasta ese momento perfecto como un engranaje. La secuencia, además, añadió un elemento clave que subvertía las expectativas de todos: Darth Vader le corta una mano a Luke al final de la lucha, intensificando la sensación de peligro e introduciendo la idea en el público de que tal vez el héroe no logre salir victorioso.
"Cuando George y yo escribíamos el guion, una de las principales presunciones de la [trilogía] es que en el transcurso del segundo acto de esta estructura de tres actos, Luke no solo descubriría algo devastador sobre su pasado, sino que veríamos en él esas cualidades que podrían ir por el camino equivocado", explica Kasdan. "Entonces, cuando pierde su brazo, pasa a la siguiente etapa en la que comienza a convertirse literalmente en una máquina como su padre".
Este cambio en la relación entre Vader y Luke añadía profundidad a la historia, daba muchos más matices al villano y al héroe, y apuntalaba un clímax sensacional para generar una gran expectación por la que sería la siguiente entrega encargada de concluir la exitosa trilogía. Con todo, la tercera parte nunca acabó de tener tan buenas críticas como esta secuela, y es que en parte la relevación de 'El imperio contraataca' ayudó a elevar el estatus de la cinta y convertirla en una obra maestra para muchos.
"A la gente le sorprendió", reconoce con orgullo Kasdan sobre este legendario momento. "Nunca asistí a una proyección de la película donde la gente no se sorprendiera, donde no se quedaran sin aliento. Yo diría que ese fue el secreto más exitoso jamás guardado en una película. La gente fue increíble al no decírselo a otras personas".
