La tendencia de las plataformas de streaming hacia una oferta más pasiva y lineal ha marcado un giro en la industria del entretenimiento. En este contexto, el reciente acuerdo entre Apple y la FIFA para los derechos de televisión del Mundial de Clubes, programado para 2025, ha generado un impacto importante en toda la industria. No es un movimiento más. Se trata de una estrategia que los gigantes del entretenimiento están llevan a cabo con esfuerzos similares y variados, como hemos visto con Disney y su esfuerzo por los canales de televisión y la renovada obsesión de los deportes en directo de Netflix, que cerró un importante trato con la WWE. Si Apple le sale todo bien, representaría un hito, siendo la primera vez que la FIFA firma un contrato mundial único.
Apple se vuelve loca con el fútbol: el portal de streaming adquiere los derechos del Mundial de Clubes de FIFA y cambia para siempre la emisión del deporte rey
Aunque los detalles específicos aún no se han revelado, y se especula que se habrían pagado y ofrecido más de 1000 millones de dólares por los derechos de emisión, todo este movimiento podría significar que el evento deportivo -uno de los más esperados- esté exclusivamente disponible en Apple TV+, requiriendo una suscripción adicional para los espectadores.
El Mundial de Clubes 2025, que reunirá a los 32 mejores equipos de fútbol del mundo en Estados Unidos, se perfila como un evento de gran relevancia. Entre los participantes destacan equipos como el Real Madrid, el Atlético de Madrid, el Paris Saint-Germain y el Manchester City. La elección de las fechas, tras la temporada europea y en meses tradicionalmente sin eventos importantes, sugiere una estrategia para captar una audiencia global.
¿Puede funcionar? Sí. De hecho, para Cupertino, esta incursión en el mundo del deporte no es nueva. La compañía ha demostrado un interés constante en ofrecer eventos deportivos de alta calidad, como se refleja en acuerdos previos, como el firmado con la Major League Soccer (MLS) por 2500 millones de dólares.
El acuerdo con la FIFA es solo el último paso en la estrategia de Apple para diversificar su oferta de entretenimiento y atraer a nuevos suscriptores, que reclaman algo más que cine y series. En un mercado saturado de opciones de streaming, la competencia por la atención del público se intensifica, y el contenido deportivo en directo emerge como un factor clave para diferenciarse y atraer audiencia. Junto a los esfuerzos de Amazon Prime Video y Netflix, que también han comenzado a emitir eventos deportivos en directo, se espera que la competencia por los derechos de emisión del fútbol, el baloncesto y otros deportes de élite profesional, se intensifique en los próximos años.