Todo ocurrió hace varios años, cuando Disney despidió de forma fulminante a Gina Carano, Cara Dune en The Mandalorian, por comparar la difícil situación que enfrenta alguien de ideología conservadora en Hollywood (como es su caso) con ser judío durante el Holocausto. La compañía de Star Wars cortó vínculos con ella, borrando sus imágenes y juguetes de la faz de la Tierra, evitando que la polémica salpicase a la saga galáctica. Ahora, con el apoyo de Elon Musk, ha anunciado que demandará a la Casa del Ratón y Lucasfilm, alegando que ese despido no fue justo. Y tiene razones para volver a Star Wars.
Gina Carano quiere regresar a Star Wars: demandará a Disney y exigirá regresar a la serie de The Mandalorian
La demanda de despido improcedente es solo una parte de las exigencias de Carano, que exige que se la vuelva a incluir en el reparto de The Mandalorian como Cara Dune, la veterana rebelde que ayudaría a Din Djarin en sus distintas misiones y que casi llegó a protagonizar una serie propia, Star Wars: Rangers of The New Republic, que ha acabado por cancelarse. La intérprete, exluchadora de MMA, que ha exigido más de 75.000 dólares a Disney por daños punitivos derivados de su despido, quiere volver a Star Wars. En su perfil oficial en redes, pese al enfado de Bob Iger y otros ejecutivos de Disney, Carano tiene claro por qué quiere volver a trabajar con Lucasfilm.
"Me encantaría continuar donde lo dejé y seguir mi viaje de crear y participar en la narración de historias, que es mi mayor pasión y todo por lo que trabajé tan duro. Ha sido difícil seguir adelante con las mentiras sobre mí y las etiquetas que me han puesto, respaldadas y alentadas por la compañía de entretenimiento más poderosa del mundo.", indica la actriz.
"Estoy agradecida de que alguien haya salido en mi defensa de forma tan poderosa y espero limpiar mi nombre", concluía Carano. El camino no será fácil. Disney y la intérprete se pueden encontrar en los tribunales, dando pie a un juicio por despido improcedente y discriminatorio, algo que generaría a su vez un nuevo círculo mediático que la empresa no quiere bajo ningún concepto.