En el campo de batalla la visión no es el único sentido necesario para atisbar al contrincante. De hecho, el propio camuflaje se basa en crear efectos ópticos para engañar a este mismo sentido, por lo que muy eficaz no es. Desde hace décadas, las cámaras térmicas han sido un gran aliado para detectar personas incluso dentro de edificaciones o vehículos. Su vulnerabilidad, ser animales de sangre caliente.
Tal y como si fueran un 'Predator', los militares que contaran con esta tecnología contaban con un sexto sentido infalible, hasta ahora. En 2014, en respuesta al Jueves Negro y la crisis de Crimea, es decir, los primeros pasos que han desembocado en la actual invasión de Ucrania, científicos ucranianos comenzaron el desarrollo de una 'capa de invisibilidad'.
Este proyecto, liderado por el Doctor en Ciencias Técnicas, Kostiantyn Boriak, tenía como objetivo principal proteger a los soldados ucranianos de las cámaras térmicas y drones enemigos. Bajo el nombre "PNM-1, Capa de Camuflaje para Personal Militar contra Vigilancia e Inteligencia de Imagen Térmica", el proyecto ha evolucionado significativamente desde su concepción.
Después de ocho años de desarrollo, los científicos de la Universidad Estatal de Tecnologías Intelectuales y Comunicaciones han mejorado continuamente esta tecnología, que ahora está compuesta de material multicapa con propiedades reflectantes del calor. Con un peso de 2,5 kg, la capa bloquea la radiación térmica, haciéndola esencial para francotiradores y equipos de operaciones especiales.
Ya no hará falta recurrir al barro fresco para evitar ser detectados, basta con ponerse una capa por encima, como la capa de invisibilidad que sale en la saga de Harry Pottter, y listo. Lo positivo no solo es el coste del abrigo completo, que sería de 400 euros, sino que no se quema, protege de lluvia, nieve y altas temperaturas, y la mayoría de los materiales utilizados para fabricar las capas de invisibilidad son de producción local.
Proyecto reactivado por la invasión de 2022
El proyecto se reactivó tras la invasión a gran escala que sufrieron de 2022 por parte de Rusia, tal y como revela Boriak a AIN Capital. Es entonces cuando los científicos han solicitado una nueva patente para la versión mejorada de la capa, buscando proteger su innovación.
A diferencia de los modelos extranjeros, la capa ucraniana se basa en ajustar los procesos naturales de intercambio de calor, lo que le confiere ventajas significativas.
El proyecto recibió atención adicional tras ser destacado por el Ministro de Transformación Digital de Ucrania, Mykhailo Fedorov. Además, se ha inscrito en el acelerador estatal MillTech Brave1, que busca fomentar la industria tecnológica de defensa en Ucrania.