Los años 90. Una época única, creativa y llena de ideas locas en el ámbito del entretenimiento. Durante toda la década, una de las sagas que más creció y supo diversificar su potencial fue Alien, que disfrutó de una serie de cómics editados por Dark Horse que nos presentó un buen número de aventuras protagonizadas por los Marines Coloniales -los mismos que protagonizan el último juego-, pero en una de sus historias más míticas, un equipo de ninjas se infiltra en un nido de xenomorfos y lo desmantela en un abrir y cerrar de ojos. Sí, como estáis leyendo.
La música de las lanzas: Uno de los mejores cómics de Alien
The Music of the Spears -La música de las lanzas- es una de las mejores historias de Alien. En ella se muestra a los xenomorfos siendo atacados y neutralizados por un equipo de ninjas muy bien entrenados y preparados, demostrándonos cómo las artes milenarias pueden hacer frente a unos seres realmente peligrosos y que hasta la fecha, únicamente habían sido enfrentados con el poder militar. En este cómic, editado por la citada Dark Horse, un grupo de asesinos a sueldo se interna en un nido alienígena con el objetivo de derribar a sus habitantes armados espadas y grandes dosis de sigilo.
Escrito por Chet Williamson con Tim Hamilton y Timothy Bradstreet a los lápices se nos cuenta cómo un músico en horas bajas decide contactar con una discográfica llamada Synsound para presentarle una nueva idea que puede convertirse en un tema de gran éxito. Tras la invasión de los extraterrestres a la Tierra, y con gran parte de la humanidad traumatizada por aquello, el público quiere experiencias cada vez más fuertes. Y este músico tiene una idea: grabar los sonidos de un xenomorfo para crear una Sinfonía del Odio. Usando esto como una excusa para combatir a MedTech -corporación rival de Weyland Yutani-, un ejecutivo de la discográfica decide contratar a un equipo de ninjas para robarle un huevo a la farmacéutica y claro, se lía. Bastante, además.
La narrativa visual es poco menos que excelente. Este grupo de soldados de élite se interna en el nido construido por la corporación -de ahí extraen la jalea real de las dependencia de la Reina para convertirla en una droga muy adictiva que se sintetiza en el llamado XenoZip-, luchando contra los diabólicos seres venidos del espacio exterior. Hay gore, tajos, luchas de vida o muerte y numerosos momentos realmente truculentos con el ácido que llevan por sangre estos seres como gran protagonista. Pese a las grandes pérdidas, tres ninjas salen de la colmena con un huevo. Trabajo cumplido. Se trata de un cambio radical a lo que estábamos acostumbrados en los cómics y las películas, que siempre habían mostrado a soldados de élite haciendo frente a oleadas de bichos. En Aliens: Music of the Spears, el equipo creativo da la vuelta a esa idea, enviando un pequeño equipo sin munición, solo espadas y habilidades para hacer el trabajo. Y funcionó.
Sin explicar nada más, os convidamos a que le echéis un vistazo al cómic, uno de los más divertidos y especiales de cuantos se han escrito sobre Alien. Con una película cancelada y con una serie para Disney+ que comenzará a rodarse próximamente, el universo de Alien está más vivo que nunca.
