Finalmente han trascendido las consecuencias del acuerdo alcanzado entre Bethesda e Interplay como resultado de sus disputas legales en torno a la marca Fallout y los derechos sobre la creación de un juego masivo en línea basado en la misma, Fallout Online, que estaba creando Interplay, propietaria original de los derechos que vendió a Bethesda.
La consecuencia inmediata es la cancelación de Fallout Online, al menos en su estado actual de desarrollo por Interplay, pues la compañía ya no tiene derechos sobre la saga con efecto inmediato. Bethesda es la dueña de todos los derechos sobre la propiedad intelectual del nombre Fallout.
A cambio, ZeniMax, compañía matriz de Bethesda, pagará a Interplay dos millones de dólares. Cada una de las empresas cubrirá sus costes legales, como parte del acuerdo alcanzado entre ambas.
Interplay creó la saga Fallout en 1997, pero la vendió en 2004 a Bethesda, si bien se reservó los derechos para la creación de un juego en línea sobre la misma, lo que fue motivo último de esta demanda.
Con todo, Interplay podrá seguir vendiendo los primeros tres títulos de la saga: Fallout, Fallout 2 y Fallout Tactics, aunque sus derechos expirarán en diciembre de 2013, momento en el que pasarán a ser propiedad de Bethesda.
Junto a la demanda principal había un segundo litigio contra Masthead el grupo que supuestamente (pues jamás se anunció oficialmente) estaba desarrollando Fallout Online para Interplay. Esta demanda ha sido retirada a cambio de que Masthead reconociera que no tiene derechos para usar la marca Fallout. No ha habido indemnizaciones ni acuerdos financieros adicionales en este caso.