Rockstar ha confirmado que la versión final de Red Dead Redemption tendrá la opción de escoger entre tres niveles diferentes de dificultad.
Se trata de la primera vez que un juego en mundo abierto desarrollado por la compañía, creadora también de la saga GTA, y la clasificación en dificultades afecta muy especialmente al sistema de apuntado, parte esencial en este juego ambientado en el Lejano Oeste.
El modo más fácil, por tanto, "permite un sistema completo de auto-apuntado", además de "salud que se regenera más rápidamente". El modo normal permite "cambiar de objetivos" al disparar pudiendo usar un sistema de fijado automático de objetivos con opción de tiro preciso "usando la palanca derecha" del mando de la consola. El último modo, el más difícil, tiene un sistema de "puntería libre sin ningún sistema de fijado de objetivos."
La compañía ha reconocido que están especialmente interesados en ver la reacción de los jugadores, ya que es la primera vez que introducen un sistema como éste en sus videojuegos de este estilo.
El título se lanzará el 21 de mayo en Xbox 360 y PlayStation 3.