Tras el colosal éxito de Fornite, no se puede discutir que Epic Games no sea a día de hoy una de las empresas de videojuegos más importantes del sector. Otros títulos como la saga Gears of War han ayudado a consolidar a la empresa y darle prestigio a lo largo de los años, aunque de todas sus obras, una de las (tal vez) menos conocidas por el público mayoritario sea el magnífico Shadow Complex.
Hablamos de un metroidvania 2.5D de la época de Xbox 360 que si no conoces no deberías perdértelo, especialmente si te gusta el género, ya que es un juego divertidísimo, con una jugabilidad maravillosa por la que no han pasado los años y que tristemente creemos que el tiempo ha hecho que se olvide de forma injusta.
Shadow Complex: El olvidado y divertidísimo metroidvania indie de Epic Games
Shadow Complex es un juego desarrollado por Chair Entertainment en colaboración con Epic Games y dirigido por Donald Mustard que fue inicialmente un indie publicado en exclusiva en 2009 en el catálogo de Xbox Live Arcade de la Xbox 360. Años más tarde, llegaría al mercado también en su versión Shadow Complex Remastered disponible para PC, Xbox One y PlayStation 4.
Utilizando el motor gráfico Unreal Engine 3, el equipo de Chair Entertainment se inspiró en los juegos principales de la serie Metroid de Nintendo, como Super Metroid, y otros clásicos como Castlevania: Symphony of the Night, para crear este Shadow Complex, un juego que bebe de lo mejor del género pero presenta hábilmente escenarios en tres dimensiones en un formato jugable 2.5D muy dinámico.
La historia de Shadow Complex nos presenta a una pareja, Jason Flemming (Nolan North) y su novia Claire (Eliza Jane Schneider), haciendo excursionismo por el noroeste del Pacífico cuando descubren unas cavernas en las que se encuentra todo un enorme complejo custodiado por soldados con tecnología militar de última generación. Allí, Jason oirá que estos soldados planean iniciar un ataque a los Estados Unidos, y decidirá infiltrarse en las instalaciones para averiguar más sobre esta amenaza.
Shadow Complex se desarrolló a lo largo de unos 18 meses y la mayor parte de este tiempo se dedicó a pulir su divertida jugabilidad, algo en lo que Mustard estaba empeñado ya que consideraba que sin unas buenas bases jugables el título no triunfaría. La historia, por su parte, se dejó más en un enfoque minimalista con diálogos mínimos y con escenarios que presentan el contexto general de la narración.
Una vez en el mercado, la jugada salió bien, y tanto la crítica como los jugadores recibieron con los brazos abiertos Shadow Complex y alabaron sus controles, sus escenas de acción y su gran uso del motor gráfico para colocar enemigos en los fondos. No en vano, muchos lo catalogaron entre lo mejor del año y un refrescante título en su género.
La aventura de Shadow Complex es breve, no dura mucho más que 5 o 6 horas, pero tiene un ritmo trepidante y ofrece todo lo que podríamos esperar de un juego de estas características, con un mapa plagado de zonas y secretos, jefes finales, mejoras para el protagonista, nuevas habilidades y armas geniales.
Si bien no se puede decir que Shadow Complex no tuviese éxito, ya que se convirtió en uno de los diez juegos más descargados de todo Xbox Live Arcade y se estima que llegó a vender algo más de medio millón de copias a lo largo de un par de años, nunca hemos visto fraguarse una posible secuela. Es una lástima, ya que en la última década ha habido un gran interés renovado por los juegos metroidvania que ha permitido la consagración de títulos estupendos como Hollow Knight, cierto, pero que también ha provocado que joyas como esta se pierdan en la bruma.
