En las últimas horas se han ido conociendo los primeros detalles sobre Assassin's Creed Shadows, el siguiente juego de la serie de Ubisoft Assassin's Creed que saldrá a la venta el 15 de noviembre para PC, PS5 y Xbox Series y que estará ambientado en Japón. Entre la información que se ha hecho pública sobre su jugabilidad hay una que probablemente guste a los jugadores y que está en la serie desde Assassin's Creed Origins: no habrá dron explorador en forma de ave.
En Origins el protagonista tenía a Senu, un águila al que se podía invocar en cualquier momento y que ayudaba a descubrir la ubicación de los enemigos y marcar puntos de interés en el mapa, una expansión de la Vista de Águila propia de la serie. En Assassin's Creed Odyssey se trataba también de un águila llamada Ikaros y en Assassin's Creed Valhalla el ave era una cuervo llamado Synin.
Un uso criticado por los jugadores
El uso de las aves daba un componente más estratégico al juego pero a muchos jugadores no les gustaba recurrir al dron constantemente, lo que, decían, volvía al juego repetitivo. Además, consideraban que se perdía la sensación de descubrimiento al explorar con el personaje y cambiar la vista entre este y el ave rompía la inmersión.
El análisis de Vandal de AC Origins decía de Senu: "Funciona un poco como el dron de Watch Dogs 2, y a decir verdad, tenemos la sensación de que nos obligan demasiado a usarla". Tal vez por eso Ubisoft ha decidido que en AC Shadows no haya ningún dron animal que realice esta labor y el juego tendrá que llevar a cabo esta labor él mismo desde tierra.
En AC Shadows habrá dos protagonistas, Naoe y Yasuke, cada uno con un estilo de juego diferente.
Naoe es una ninja, entrenada para convertirse en asesina shinobi que viaja por Japón en busca de venganza y Yasuke es un experto samurai que encontrará en el juego un nuevo propósito para enfrentarse a los demonios de su pasado.