Como cabe suponer, el servidor de un videojuego debe poseer unas características muy especiales, ya que deberá hospedar un buen número de partidas de juegos multijugador. Es un servicio que suele ser contratado por varios jugadores para entrenar para futuras competiciones. Es una práctica habitual que los proveedores entreguen a sus usuarios las herramientas necesarias para modificar el juego según necesite el propio cliente. El servicio de la administración, en cambio, se dejará completamente a cargo del contratante.
De forma general, es un servidor dedicado el que se ocupa de los procesos para que los videojuegos multijugador en línea funcionen correctamente. Su trabajo consiste en recoger la información de cada jugador y enviarla rápidamente al resto de participantes para que, de este modo, la experiencia del grupo sea los más cercana posible a la acción en tiempo real.
Elegir la compañía de hosting apropiada
Todos aquellos que estén interesados en contratar los servicios de una empresa de hosting para cumplir con este propósito deberán saber que no todas las compañías de este sector ofrecen este tipo de servicios. Sin embargo, sí es posible contratar un servidor para después acondicionarlo, de tal modo que sea capaz de administrar partidas de videojuegos.
Esta opción aporta, en ocasiones, mejores características y, por tanto, optimiza la experiencia de juego de los usuarios. El motivo de esta mejora de la calidad se debe a que los servidores de videojuegos suelen vender salas con potencial para hospedar solo una partida cada vez, dejando en manos del cliente todo el trabajo posterior relacionado con la administración del servidor, algo para lo que generalmente no está capacitado.
Dos opciones para elegir el servidor correcto
Para el uso concreto de las partidas de videojuegos existen dos tipos: el compartido y el dedicado.
Servidor compartido
En primer lugar, el servidor que escucha, es decir, el que va a facilitar la generación y el desarrollo de la partida. Al mismo tiempo permitirá que un jugador pueda formar parte de ella usando el mismo servidor. Esto es lo habitual en salas donde se juegan partidas de videojuegos clásicos, como el Couter-Strike.
En este caso, las partidas no están preparadas para soportar una cantidad elevada de jugadores, puesto que el hecho de tener un cliente compartiendo recursos de la máquina hace que presente serias limitaciones. En este tipo de servidores, no es extraño que aparezcan problemas de retraso, perjudicando seriamente la experiencia durante el juego. Así mismo, habrá que considerar que cuando el creador de la partida se desconecte, el juego habrá terminado.
Servidor dedicado
Como cabe suponer, esta es la mejor opción, puesto que evita los problemas que presenta la anterior, ya que usar un servidor dedicado permite mantener siempre las partidas activas, independientemente de quien salga o entre en ella.
Para los juegos multijugador online que requieren muchos jugadores interconectados no existe mejor elección. Este tipo de servidor será administrado y mantenido por los propios desarrolladores, por lo que podrán actualizar y manejar el juego como crean más conveniente. El motivo no es otro que la necesidad de utilizar un desarrollo y una elaboración mayor en relación a las expansiones que vayan necesitando. Este tipo de juegos requieren aplicar continuas innovaciones periódicamente, añadiendo sectores de mapas, misiones, equipamientos…
Un ejemplo clásico de un juego muy popular que requiere de los servidores dedicados es el League of Legends. Se trata de un juego que tiene habituado a sus jugadores a constantes entregas, con nuevo y más sofisticado contenido que tendrá que ser gestionado por los servidores dedicados para que los usuarios puedan actualizarlos.
Como cabe suponer, el servidor dedicado resultará más rentable para un uso profesional, puesto que permitirá a los clientes estar satisfechos con la calidad de las partidas.
