El 12 de marzo de 2014 Blizzard revolucionaba en PC el género de los juegos de cartas con Hearthstone: Heroes of Warcraft (aunque luego se abrevió el nombre a Hearthstone) que, ambientado en el universo de Warcraft y basado en estrategia, enfrenta a los jugadores en duelos uno contra uno usando mazos de cartas predefinidos. Ese mismo año el juego salió en iOS y Android.
La accesibilidad de Hearthstone
En Hearthstone cada carta representa un personaje, hechizo o habilidad que los jugadores deben utilizar para atacar al rival o defenderse, anticipándose a los movimientos del otro jugador.
El juego tiene una gran profundidad estratégica pero con unas normas fáciles de comprender y partidas ágiles, ya que hay que acabar con los puntos de vida del rival y todo se desarrolla de manera muy visual.
Wizards of the Coast había estado intentado durante años llevar a los videojuegos la popularidad de sus cartas en su serie Magic The Gathering, pero su complejidad era una fuerte barrera de entrada y fue Hearthstone quien popularizó el género en los videojuegos gracias a su sorprendente accesibilidad y hasta ha tenido repercusión como esport.
El análisis de Vandal explicaba la clave del éxito del juego: "Aprender a jugar no nos llevará ni cinco minutos y esto lo haremos en un divertidísimo y práctico tutorial que nos dejará más que preparados para dar el salto a sus modos online tras unas pocas partidas contra la IA del juego".
Revivir el interés por el juego
A esto hay que añadir que Blizzard acertó con el sistema de recompensas del juego y lo ha seguido alimentando con novedades, eventos e incentivos. El pasado mes de noviembre incluyó la expansión Duelo en las Tierras Inhóspitas, inspirada en un Salvaje Oeste del mundo de Warcraft con 145 cartas nuevas que tienen como objetivo que los jugadores recuperen el interés por el juego.
Hearthstone no ha llegado a convertirse en un juego de masas, pero sí ha atraído al número suficiente de jugadores como para que otros muchos decidieran seguir sus pasos. Es el caso de Cygames con Shadowverse (2016) o Valve con Artifact (2018), sin demasiado éxito, mientras que otros como CD Projekt o Riot Games se apoyaron en universos muy conocidos por los jugadores en Gwent: The Witcher Card Game (2018) y Legends of Runeterra (2020), respectivamente. La última incorporación con éxito al género de juegos con cartas es el reciente Balatro (2024).
