PlayStation 4 se lanzó al mercado en 2013, hace ya casi diez años. Una generación después, una función de su mando, el DualShock 4, ha ayudado a crear un dispositivo que ayudará a llevar los videojuegos a más personas, y a hacer el ocio interactivo más cómodo y variado para los jugadores con discapacidad motora. Hablamos del PlayStation Access, el mando modulable y configurable para PS5 que se lanzará el 6 de diciembre por 89,99 euros.
Además de probar el nuevo mando, en Vandal pudimos acudir a una mesa redonda con Alvin Daniel, senior technical program manager de Access. En la conversación se mencionó que el desarrollo comenzó en 2018, dos años antes del lanzamiento de PlayStation 5, por lo que surgió la duda de cómo se probó el mando sin existir la consola. Las primeras pruebas se realizaron en PS4, pero de una manera poco ortodoxa.
Una de las claves del Access es que sus botones son configurables: se puede indicar que hagan la función de cualquier botón de PlayStation, o que al pulsarlo se registre el comando de dos botones a la vez, o incluso que se mantenga pulsado como si se tratara del BLOQ MAYUS de un teclado. ¿Pero cómo configurar todo esto sin una interfaz como la que hay en PS5?
Sony creó un hardware para reconfigurar los botones de los prototipos de Access
Para ello desarrollaron un dispositivo externo que se conectaba al mando de PS4. "El DualShock 4 tiene un puerto de expansión", desvelaba Daniel. "Nunca se usó para ningún producto, pero existía. Nos aprovechamos de ese puerto de expansión para conectar el dispositivo al DualShock". Es decir, el mando podía alimentar a otros aparatos.
"Así que ahora el DualShock puede dar corriente a cualquier cosa y puede tener uso colaborativo, ya que todas las pulsaciones de botones van al dispositivo, de él van al DualShock, y de ahí se transmite sin cables a PS4", explica el ingeniero. "Fue una solución muy creativa que nos permitió tener programación de botones sin ninguna solución de software".
Esto tuvo otro beneficio secundario, pero muy importante, pues permitió al equipo iterar en el diseño mecánico de cada mando, cambiando su forma, los botones y demás componentes sin tener que crear un nuevo dispositivo de configuración con cada prototipo. De hecho, desde Sony se plantearon incluir el dispositivo en el Access comercial, pero al final decidieron que la configuración a través de la interfaz de PS5 en un gran televisor es una manera más accesible de hacerlo.