Cuando The Last of Us se lanzó en 2013 supuso un paso de gigante para Naughty Dog en su apuesta por la diversidad. Fue por ello que sorprendió que, pese al protagonismo de Ellie en la historia y en la propia portada, no hubiera mujeres entre los bandos enemigos humanos con los que el jugador se enfrentaba.
Se trata de una carencia que no ha resuelto The Last of Us Parte I porque, en palabras de Matthew Gallant, su director, han querido mantener este nuevo trabajo "fiel" al publicado hace nueve años. Durante una mesa redonda con tres medios españoles, preguntado por Vandal, defendió que "mantenerse fiel al original fue lo que mandó en esa decisión".
Esa fidelidad ha primado sobre la que es un ausencia reconocida por el propio estudio californiano. Es más acuciante en el caso de la facción conocida como "cazadores" porque sí hay militares mujeres o Luciérnagas, como la propia Marlene, aunque no haya peleas directas con ellos. Por su parte, el grupo al que Joel y Ellie se enfrentan en Pittsburgh llega a hablar de una mujer contra la que han combatido a la que podían haber incorporado de no ser tan peligrosa. Pero entre las decenas que se ven en la ciudad de Pensilvania, no hay ni una sola mujer. Cabe mencionar que las mujeres cazadoras sí estuvieron presentes en el modo multijugador.
"Hemos mantenido esa fidelidad con las interpretaciones de voz originales y fue debido en parte a que esas líneas de diálogo de esos enemigos son icónicas. Realmente dan forma a las sensaciones del juego. Parece poco, pero algo tan simple como la manera en la que los cazadores enemigos en Pittsburgh gritan ‘turista’ cuando te ven… Esa manera de decirlo es icónica, es increíble", añadió el desarrollador de Naughty Dog durante la entrevista.
En agosto de 2013, dos meses después de lanzarse el juego original, durante una sesión de preguntas y respuestas en reddit, Neil Druckmann, cocreador de la saga, aseveró que "el tiempo de desarrollo y la memoria [de PlayStation 3]" les "impidieron" incluir a las cazadoras. Previamente, en julio, en los foros oficiales de PlayStation, el estudio se justificó en la memoria de la consola y en la capacidad de incluir "sus animaciones de movimiento" en los niveles en los que esa facción es la protagonista.
Que no estén presentes en esta entrega ha sido algo consciente, según asegura Gallant: "El objetivo de este proyecto era honrar la experiencia original y empujarla más hacia delante. Esta decisión estuvo al servicio de eso, de asegurarse de que sea un remake fiel pero hecho con la mejor tecnología".
Ya después de lanzarse Left Behind en 2014, Druckmann y Bruce Straley, director del juego original, volvieron a responder preguntas en reddit. Una de ellas inquiría sobre aquello que habrían cambiado tras el lanzamiento. Straley sugirió la posibilidad de "añadir un personaje en Pittsburgh que fuera más representativo de los cazadores" y arreglar "algunos bugs" pero dijo que lo importante era que estaba ya publicado. Druckmann, por su parte, explicó que de tener más tiempo habría hecho "que los Luciérnagas entraran corriendo al quirófano y te mataran a tiros si tardas demasiado en matar al médico".
La variación propuesta por Straley habría afectado profundamente a la experiencia general del remake. La de Druckmann, que tampoco se ve cumplida en Parte I, sería una modificación que daría más sentido y profundidad al momento cumbre de la obra sin trastocar lo que el juego cuenta.
El remake llega esta semana a PS5 y más adelante a PC
Naughty Dog ha caminado con Parte I sobre una una cuerda muy fina entre aquello que merece la pena ser cambiado o renovado y respetar lo que el original propuso. Parte de su labor ha sido discernir qué alterar y qué no. Si bien mejoras como pudieran ser los movimientos de Ellie en The Last of Us Parte II no tienen tanto sentido controlando a Joel, hay otros cambios que se habrían mejorado la experiencia y aportado valor a este lanzamiento.
The Last of Us Parte I estará disponible para PlayStation 5 desde el 2 de septiembre de 2022. Próximamente también se lanzará en PC, donde todavía no tiene fecha. Podéis leer el análisis de Vandal en este enlace.