Vivimos en medio de una tormenta de noticias sobre las tarjetas gráficas, su escasa disponibilidad y la subida en el coste de fabricación que ya ha provocado que algunos modelos de GPU de NVIDIA suban de precio recomendado entre 20 y 100 euros.
Sin embargo, este incremento en el valor "de fábrica" de las gráficas es, relativamente, lo de menos, ya que el problema real es que en las tiendas su precio es muchísimo mayor debido a varios factores aunque, por suerte, el 2022 ha comenzado con caídas en el precio de las GPU en los diferentes puntos de venta y aunque siguen lejos de estar a su importe "real" comenzamos a ver una tendencia a la baja evidente tanto en GPU de NVIDIA como de AMD.
El encargado de traernos estas buenas nuevas es el ya conocido portal 3dcenter que analiza los datos de distintas tiendas de Alemania y otros puntos de Europa, indicándonos que el sobreprecio de las gráficas en las tiendas ha bajado desde el pasado 12 de diciembre hasta en un 16 %. Centrándonos en las gráficas de NVIDIA, su sobrecoste ha caído un 10 % pasando de un 187 % a un 177 % mientras que el de AMD cae un 16 % pasando de un 183 % a un 167 %.
Centrándonos en modelos concretos para poner ejemplos, la NVIDIA RTX 3060 tiene un precio recomendado de 329 euros y en las tiendas de varios países de Europa puede encontrarse actualmente por entre 649 y 994 € mientras que en el caso de AMD la Radeon RX 6600 tiene un importe recomendado de 329 € y puede comprarse por entre 509 y 659 euros.
La caída en el precio de las criptomonedas, uno de los factores clave
Una vez más uno de los factores clave en el descenso del sobreprecio de las gráficas es la caída en el valor de las criptomonedas que no atraviesan por su mejor momento por la amenaza de Rusia de prohibir su minado u operaciones con ellas, lo que ha hecho (entre otras cosas) que su valor caiga. Además a esto hay que sumar que Ethereum va a cambiar este año su sistema de minado no requiriendo el uso de gráfica para el minado, por lo que las GPU van a ser menos atractivas para los mineros.
Esto, junto a la mejora del suministro prevista para todo este año (sobre todo a partir de junio), hacen que podamos ser algo más optimistas aunque la situación va a tardar en volver a la normalidad y, cuando lo haga, pagaremos un importe mayor por las gráficas que en 2020 o 2021 debido al aumento de costes de producción (incremento que también vemos en alimentos, luz, o servicio o productos cotidianos) pero ya no será ese sobrecoste de casi un 200 % que hemos llegado a ver durante los últimos meses.