Phil Spencer, máximo responsable de Xbox, quiere que los jugadores se dejen de las insustanciales peleas por las consolas y que se centren en disfrutar de los videojuegos. Para él, son conversaciones inútiles que no llevan a nada y, de hecho, apuntan en el sentido contrario que deberían seguir los aficionados de este mundillo.
Lo cierto es que las discusiones de patio de colegio en el mundo de las consolas han estado presentes desde siempre, con fans de Sega y Nintendo discutiendo durante los años 80 y 90 para dar paso a las disputas pueriles entre los fans de Sony y Nintendo al salir Sega del mercado de fabricación de consolas, y finalmente a las de seguidores de Sony, Nintendo y Microsoft. Cómo no, estas rencillas triviales trascienden los patios escolares de tal forma que adolescentes y adultos mantienen ese discurso confrontacional en comunidades en línea.
En declaraciones concedidas a The Washington Post, Phil Spencer expresa claramente su deseo de que esas discusiones burdas dejen de existir, aunque sabe que eso exige un cambio de mentalidad entre ese tipo de aficionado que disfruta insultando o agrediendo a otros porque sus gustos no coinciden.
"La idea de que para que la industria pueda crecer algunas compañías deban triunfar y otras fracasar no ayuda al mundo del videojuego a alcanzar su potencial", explica Spencer.
"Deberíamos guiarnos por el deseo de ayudar a que los videojuegos crezcan como industria, para que los creativos puedan tomar los mayores riesgos posibles. Cuando un gran juego se lanza, deberíamos aplaudirlo, sea en PC, en PlayStation o en Switch".
"Deberíamos centrarnos en la industria que amamos y ayudarla a crecer. Y deberíamos protegerla de los problemas que tiene", defiende el ejecutivo. "Si vas a gastar tus energías, gástalas en esas cosas, no en que 'mi pieza de plástico es mejor que la tuya'. No creo que esa sea una conversación productiva".
