Konami y la desarrolladora Ukuza han lanzado hoy Skelattack, un plataformas de acción en dos dimensiones en el que controlamos a un esqueleto que, con la ayuda de su inseparable compañera murciélago, se ve en la tesitura de salvar el Underworld de hordas de enemigos. Ya está disponible en PS4, PC, Xbox One y Nintendo Switch a un precio de 19,99 euros.
Skelattack no busca hacer nada particularmente revolucionario, tan sólo ofrecer una propuesta divertida y entretenida para los jugadores que disfruten saltando entre plataformas y atacando a los enemigos que vayan apareciendo por ahí. Aquí nos ponemos en la piel de Skully, un recién fallecido que cuando se estaba acostumbrando a eso de estar entre los muertos se ve abocado a una misión contra una amenaza humana.
Salvar el inframundo de los humanos
Y es que la chispa de este juego está en el rapto de Elzedon, el esqueleto más antiguo del inframundo, a manos de un grupo de humanos que quiere conseguir la Blue Flame, un elemento mágico que consigue prender en llamas los espíritus de los muertos. Skully, el protagonista, se afana por detener este secuestro luchando con los humanos que han puesto patas arriba el mundo de los muertos.
Como uno de sus principales alicientes nos encontramos con el estilo visual de este juego, que busca ser agradable imitando las técnicas de animación de series infantiles clásicas, con diseños redondeados, personajes adorables y loops de animaciones más o menos exageradas.
En nuestro análisis decimos de él que nos recuerda a aquellos títulos independientes de la primera hornada de Xbox Live Arcade de Xbox 360, con todo lo que eso conlleva. Antes habría podido ser un soplo de aire fresco, pero en el panorama actual se queda "en una aventura que no destaca por nada; que no hace nada demasiado bien y tampoco hace nada demasiado mal".
