GameStop, la cadena de tiendas de videojuegos estadounidense, ha despedido a más de 120 empleados, entre ellos parte del equipo editorial de la revista Game Informer.
Los despidos han afectado a sus oficinas centrales en Grapevine, Texas, y otras oficinas de la compañía a lo largo de Estados Unidos.
GameStop ha intentado a lo largo de este año venderse a otra empresa, pero no han logrado un acuerdo con ninguna compañía; sin embargo, sí consiguieron vender parte del negocio por 700 millones de dólares.
La cadena de tiendas comenzó el año desplomándose en bolsa y en abril anunció pérdidas por valor de 673 millones de dólares en 2018.
GameStop quiere reconvertir sus tiendas introduciendo esports y retro
La estrategia de la empresa, expresada en aquel momento, era poner en marcha "un plan de ahorro de costes y mejoras de beneficios". Esos planes también pasan por renovar sus tiendas, dejando a los jugadores probar juegos antes de comprarlos, introducir tiendas especializadas en retro y alojar competiciones de deportes electrónicos.
"Como parte de la iniciativa GameStop Reboot anunciada previamente para transformar nuestro negocio para el futuro y mejorar nuestro rendimiento financiero, podemos confirmar una reducción de nuestro total de trabajadores fue implementada", explica un portavoz de GameStop a Kotaku, "afectando a más de 120 posiciones de equipo corporativo, representando aproximadamente el 14% de nuestros socios en las oficinas centrales de la compañía, además de en otras oficinas".
"Aunque estos cambios fueron difíciles, eran necesarios para reducir costes y alinear mejor la empresa con nuestros planes para optimizar el negocio y alcanzar nuestros objetivos futuros y factores de éxito. Reconocemos que este es un día difícil para nuestra compañía y particularmente para aquellos socios afectados. Apreciamos su dedicación y servicio a GameStop y estamos comprometidos en apoyarlos durante este tiempo de transición".
En cuanto a la plantilla de la revista Game Informer, el medio tiene 19 redactores a tiempo completo, de los que al menos siete de ellos han sido afectados por los despidos. El redactor jefe, Andy McNamara, decía en Twitter que está intentando "hacer las cosas bien" con las personas afectadas en la revista.
GameStop no es la única cadena de tiendas afectada por el auge de las compras de videojuegos en formato digital, una problemática que probablemente se acentuará con el juego en la nube. La división británica de GAME ha vendido gran parte de su negocio a una cadena de tiendas deportivas de Reino Unido, Sports Direct.