Digital Foundry ha realizado un análisis técnico en vídeo de Hellblade: Senua's Sacrifice para Nintendo Switch que se suma a las recientes comparativas de la versión de la consola de Nintendo con las precedentes.
A través del vídeo se muestra que el juego, en formato de consola conectada al televisor, utiliza resolución variable que va de un mínimo de 576p hasta un máximo de 720p. En el caso del modo portátil, funciona también a un máximo de 720p y puede bajar hasta 400p.
Se destaca que el sistema de anti-aliasing es un fuerte apoyo para mejorar la nitidez de los gráficos.
Según el análisis, las secuencias de vídeo están pregrabadas y no se ejecutan en tiempo real. Parece que se ha optado por esta solución para mantenerlas completamente estables en su resolución, pero se basan en el aspecto visual de Switch y no en las de otras plataformas. De este modo, no hay un salto visual, pero sí una estabilidad en su representación en pantalla.
El análisis indica también que las texturas empleadas son inferiores a en cuanto a resolución que en el caso de las que se usaron para la versión de PC, PlayStation 4 y Xbox One.
En cuanto a la tasa de imágenes por segundo, el juego persigue ofrecer 30 imágenes por segundo pero no logra estabilidad completa y hay variaciones, aunque no se observan cambios significativos entre su rendimiento entre el modo portátil y el modo de consola conectada al televisor.
Con todo eso, Digital Foundry se suma al que parece ser el consenso general: se trata de una muy buena adaptación a la consola que, si bien no brilla en lo técnico al mismo nivel que lo logrado en sistemas con más potencia técnica y sin el condicionante de hibridez portátil de Nintendo Switch, supone una versión muy notable para quienes quieran disfrutar del juego en portátil o para quienes no dispongan de los otros sistemas.
