La protección de Denuvo vuelve a causar polémica entre los jugadores de PC. Este sistema DRM -gestión de derechos digitales- ha sido culpado de empeorar el rendimiento en Assassin's Creed Origins y de incrementar la carga de la CPU hasta en un 40%. Ubisoft niega esta información.
En un mensaje en Steam, Ubisoft declara que "las soluciones antipiratería implementadas en la versión Windows PC de Assassin's Creed Origins no tienen efecto perceptible en el rendimiento del juego".
"Assassin's Creed Origins utiliza al máximo los requisitos mínimos y recomendados de PC para asegurar un rendimiento estable de 30fps.
Estamos comprometidos a asegurar la experiencia más óptima posible para todos, y aconsejamos a los jugadores que encuentren problemas de rendimiento contactar con el soporte por una posible solución existente o contactar con nosotros para explicar mejor sus problemas y así resolverlos".
Ubisoft suele utilizar los sistemas de protección de Denuvo para proteger sus juegos ante el ataque de los piratas, pero este DRM ha sido acusado en muchas ocasiones de bajar notablemente el rendimiento, como sucedió con Dishonored 2 o Rime -donde fue eliminado-.