Comienzan a presentarse en sociedad los títulos más importantes para el último trimestre del año, y el encargado de abrir fuego es Beyond: Dos Almas, que ha desembarcado en la plaza de Callao madrileña de la mano de su director, David Cage (Farenheit, Heavy Rain), y el actor Willem Dafoe (Platoon, Spiderman).
Cage ha afirmado que su intención era desarrollar un juego muy distinto de los habitales, "que no estuviese basado en disparos, saltos o en conducir, sino que fuese un viaje emocional en la vida de una persona, ponerte en la piel de la protagonista de la historia".
Jodie, la protagonista tiene un vínculo con una entidad desde que nació. No se sabe qué es exactamente, pero siempre está con ella. El juego cuenta 15 años de su vida, "la vemos de niña, cuando tiene 8 años, de adolescente y de joven adulta. Vemos cómo cambia", ha explicado el director.
Especifica que el juego mostrará los momentos clave de la vida de la protagonista para que entendamos cómo les afecta. "Va de crecer, aprender y aceptar quiénes somos. Pero también de la muerte y lo que hay al otro lado", ha afirmado Cage.
Cage se lleva enfrentando a este reto de transmitir emociones con su obra durante casi toda su vida como desarrollador. Ha recordado que mucha gente piensa que es imposible contar una historia cuando hay por medio interactividad. En esta posición de quienes piensan que si el jugador controla al protagonista se pierde el control sobre la narración están, según el director de Beyond, Steven Spielberg o George Lucas, pero "con juegos como éste o Heavy Rain creemos que sí se puede contar la historia y mantener la implicación".
Juega como fantasma o como Jodie
Todo lo que se ve en el juego está capturado de movimientos de actores reales. Cage ha destacado que Jodie se mueve de una manera u otra según actúe el jugador, los movimientos serán contextuales y el sistema de control se ha simplificado, y está centrado por un punto que marca hacia dónde hay que mover el stick. En este sistema de acción es relevante el tiempo que tardas en realizar la acción para que ésta salga de la manera deseada.
El jugador también puede tomar el control de Eiden, la entidad que está ligada a Jodie desde que ella nació, y entonces actuará como se supone debe hacerlo un fantasma invisible a todos, atravesando paredes e interactuando con la materia. Eiden puede ver el aura de una persona y puede llegar a poseerla para que realice una acción concreta. "Con Jodie interactúas con el mundo real, y como fantasma hacer todo lo que puede hacer un fantasma", según Cage.
Y todo ello pretende Beyond contarlo a través de la interactividad. Cage ha rechazado que el juego vaya a ser una sucesión de vídeos y escenas interativas. El jugador tomará una decisión en ciertos momentos del juego y, en función de lo que haga, la historia evolucionará en una dirección u otra hasta alguno de los 23 finales posibles. Beyond no indicará con claridad qué opciones tiene el jugador, sino que le dará indicaciones o sugerencia.
El director del juego también ha informado de que no habrá game over. Simplemente, que la acción no salga como estaba previsto o cómo quería llevará la acción por otro camino. Cage muestra un ejemplo en el que Jodie está dormida viajando en un tren y vienen a buscarla. Si se despierta a tiempo podrá huir, pero si no, la encerrarán en un compartimento del tren y deberá escapar. Todas estas opciones estaban incluidas en un guión de 2.000 páginas.
Cage ha recordado que, cuando Quantic Dreams comienza un proyecto no parte de la historia o de la tecnología, sino de la emoción que quieren transmitir. Pese a esto, en Beyond la tecnología ha jugado un papel básico. Los movimientos de los actores se han capturado con el sistema que utilizó David Cameron en la película Avatar, llamado performance capture, que permite registrar a la vez los movimientos corporales, la voz y la expresión facial de varios actores al mismo tiempo a través de 90 puntos en la cara y otros tantos repartidos por todo el cuerpo. Tres cuartos de hora diarios costaba poner esos puntos de referencia en los actores, pese a que de algunos de ellos, los protagonistas, se realizó una máscara con agujeros donde iban los puntos para agilizar su colocación.
En el escenario únicamente estaban los objetos básicos de referencia para los actores, muchas veces simulados como trozos de cartón que después se convirtieron en porciones de pizza; una discusión en un helicóptero se simuló con los actores sobre una plataforma que movían varias personas.
De marionetista a tomar el mando
Cage se ha referido a Heavy Rain, del que ha dicho que aprendió que muchas veces lo jugaba el hombre con la novia o mujer al lado y que ella solía decir cómo debía reaccionar ante los dilemas que planteaba el juego "como si fuera un marionetista", ha dicho.
Con Beyond Cage busca que ese acompañante de un paso adelante y tome el mando. Para quienes se sientan intimidados por la cantidad de botones del mando Quantic Dreams ha adoptado una decisión que probablemente creará polémica, y lanzará una aplicación gratis para plataformas móviles IOS y Android en la que se podrá conectar la Tablet o teléfono con PS3 y jugar con un dedo. "Queremos que el juego sea lo más accesible posible y lo juegue la mayor cantidad de gente posible", ha explicado Cage.
WIllem Dafoe ha hablado de su experiencia en la captura de movimientos: "Había 65 cámaras. En el cine eres consciente de que hay una o dos cámaras enfocándote y estás pendiente de ellas, pero con 65 no puedes, y esto te lleva a liberarte y a que haya más variaciones en la interpretación. Preguntado por las diferencias entre trabajar en una película o videojuego ha respondido: "Emocional y físicamente [el videojuego] es muy fluido. Puedes dejarte llevar y no preocuparte por nada. Fue divertido. Era un entorno muy neutral, lo que nos permitía soltarnos. Era entrar y actuar para este tío [señalando a Cage]".
Ya en el turno de preguntas, Cage ha debido defenderse de la principal acusación que se hace a su trabajo de que está más cercano al cine que al entretenimiento interactivo. Según CAge, una película y un videojuego son muy diferentes y no pueden compararse. La película, ha alegado, es algo pasivo que ves pero no puedes cambiar, mientras en un juego sí puedes hacerlo. "En Heavy Rain un jugador me dijo que llegó a apagar la consola durante dos semanas porque se le había planteado un dilema y tenía que decidir cómo iba a actuar. Eso sólo puede suceder en un juego, no en una película", ha señalado, y ha añadido que Beyond es un juego que toma parte del código que utilizan las películas. Cage nunca ha intentado dirigir una película, ha dicho, "porque hace 16 años decidí que mi mundo era el de los videojuegos, que es lo que hago".
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