Kathryn Kirton, antigua jefa de prensa de Activision, estafó más de 22.000 euros a la compañía, aprovechando, entre otras cosas, las espectaculares presentaciones de los juegos de la saga Call of Duty, que se realizan al estilo hollywoodiense.
Kirton, de 35 años, reconoce haberse gastado 18.963 libras en organizar su fiesta de prometida, en tomarse unas vacaciones de lujo cuando rompió con su prometido, y en comprarse ropa, entre otras cosas.
Asegura que fue "seducida por el glamour del mundo en el que trabajaba".
El asesor de prensa Jamie Kaye tampoco se libra, y reconoce haberse "corrompido por el mundo en el que trabajaba", y también aprovechaba los fondos de la compañía para darse caprichos como un viaje de más de 4.000 euros con su familia a Florida. Además, robó seis iPads de Activision.
El juez los ha declarado culpables, y de materializarse la sentencia –se espera que sus respectivos abogados recurran– Kirton tendrá que ir 18 meses a la cárcel, y Kaye, 9.
