El cierre de un estudio siempre es una noticia triste, pero más duele cuando nos deja uno que, claramente, necesitaba al menos otra oportunidad. United Front Games, creado por antiguos miembros de Electronic Arts, Rockstar y Volition, entre otros, no tienen el historial más brillante, pero sí que dieron forma a uno de los juegos de mundo abierto más recordados de la pasada generación: Sleeping Dogs.
Este sandbox conquistó por su ambientación e historia, además de misiones bastantes interesantes (dentro de a lo que estamos acostumbrados en el género, claro). No sabemos hasta qué punto acompañaron las ventas, pero parece que ni las del remaster para nueva generación fueron suficientes para salvar al estudio. Como decimos, United Front Games se merecía otra oportunidad para expandir el mundo de Sleeping Dogs, aunque todos esperábamos una secuela propiamente dicho, en lugar del experimento fallido que os tramos hoy.
Concebido como un spin-off de Sleeping Dogs, Triad Wars era un título independiente concebido para explotar la vertiente multijugador de esta saga, de manera similar a lo que GTA Online hizo con Grand Theft Auto V. Esto quiere decir que la acción transcurriría en el mismo mapa, pudiendo aprovechar el universo de la aventura en solitario, pero expandiendo sus posibilidades constantemente.
En Triad Wars comenzábamos en como un gánster de poca monta en los barrios bajos de Hong Kong. Nuestro objetivo era hacernos con el control de la ciudad, empezando desde abajo y montando negocios poco lícitos, a la vez que nos enfrentábamos a otras bandas por el control de los diferentes territorios de la ciudad asiática.
Podríamos formar nuestra propia banda de matones, establecer nuestra base e involucrarnos en diferentes actividades que nos proporcionarían los ingresos para ir financiando nuestro imperio en esta guerra de triadas. Lo más importante, eso sí, eran los enfrentamientos con otros jugadores, de quienes podíamos robar dinero, propiedades, terreno, etcétera.
La experiencia de Triad Wars se construía sobre dos pilares: la fuerza y la inteligencia. La gestión era tan importante como la ejecución de nuestros golpes, y tendríamos que saber cómo invertir nuestros ingresos con cabeza. Por ejemplo, en nuestra base podíamos comprar mejoras de defensa por si nos veíamos atacados, pero también podíamos invertir en entretenimiento para que nuestra banda pudiera divertirse mientras descansaba. La gestión de la base era de lo más completa, permitiéndonos diseñar una a nuestra medida.
También teníamos opciones de personalización para nuestros personajes, tanto estéticas como jugables. Con un sistema de niveles y estadísticas, cuanto más jugábamos más mejorábamos, haciendo que nuestro protagonista fuese cada vez un rival más temible.
Por supuesto, como el propio Sleeping Dogs, Triad Wars contaba con infinidad de posibilidades, alternando conducción con acción y exploración, ofreciéndonos tiroteos y combates cuerpo a cuerpo con entornos interactivos. Cualquiera que probase la aventura principal ya podía hacerse una idea de la variedad de situaciones que encontraríamos en Triad Wars.
A la hora de pasar a la acción, teníamos multitud de misiones que realizar, que iban desde robar coches a blanquear dinero, pasando por hackear, extorsionar o simplemente matar a miembros de las bandas rivales y quedarnos con todo lo que pudiéramos. La idea de United Front Games era ofrecer algo para cada jugador, con opciones que, obviamente, se expandirían con el tiempo.
Otro de sus aspectos destacables era sus valores de producción, a la altura de Sleeping Dogs. Este título contaba con secuencias de vídeo y narrativa, aunque obviamente, al no contar con una historia guiada, ésta se iría disipando mucho más rápido. En cualquier caso, era un juego con una gran puesta en escena, sobre todo teniendo en cuenta que se trataba de un título free-to-play.
Anunciado en 2013, abrió sus puertas a los jugadores a través de una beta que se extendió a lo largo de más de un año, hasta que, finalmente, en enero de este mismo año cerraba sus puertas. El estudio reconoció que Triad Wars "no eran lo que muchos querían", probablemente señalando que el público quería un Sleeping Dogs 2.
Antes decíamos que Triad Wars hacía un poco lo que Grand Theft Auto V hacía con GTA Online, y quizás el lanzamiento de éste en PC en abril de 2015 acabó arrastrando a los potenciales usuarios del juego de United Front Games. Por desgracia, parece que el estudio no pudo recuperarse de este golpe, y esta misma semana cerraban sus puertas.
Apéndice:
Aquí tenéis el inicio del juego. Podéis encontrar muchos más videos de su jugabilidad en internet.