Información del juego
Does not Commute es un videojuego de estrategia y conducción con una premisa única, desarrollado por Mediocre AB. Fue lanzado en 2015 y está disponible para plataformas como iOS y Android. En Does not Commute, los jugadores deben gestionar el flujo del tráfico en una ciudad a través de una serie de escenarios que gradualmente aumentan en complejidad.
Escenarios que aumentan en complejidad
El juego se desarrolla en una ciudad ficticia durante la década de 1970. El jugador comanda una serie de vehículos que deben ser guiados desde su punto de partida hasta su destino en un tiempo limitado. Cada vehículo se mueve de manera independiente y sigue la ruta trazada por el jugador, lo que significa que las decisiones hechas en el pasado afectan el tráfico y los obstáculos en el futuro. Esto crea un desafío complejo donde las colisiones deben ser evitadas y los tiempos de llegada optimizados.
Una característica llamativa de Does not Commute es su estilo narrativo. A través de los diferentes vehículos, se revela una serie de historias breves y fragmentadas sobre los residentes de la ciudad. Estas narrativas añadidas brindan un contexto humorístico y a menudo satírico de cómo cada personaje llega a su destino, sumergiendo al jugador en un microcosmos de la vida urbana.
Visualmente, Does not Commute destaca por su estilo artístico retro, que utiliza paletas de colores nostálgicos y un diseño estilizado que evoca la estética de los años setenta. Además, la física de conducción está finamente ajustada, ofreciendo una experiencia ágil y divertida.
Una de las características más únicas de Does not Commute es que, aunque se trata de un juego de coches, enfatiza la estrategia y la planificación más que la velocidad o las acrobacias. Esto lo diferencia notablemente de otros videojuegos de conducción.
En cuanto a la recepción crítica, Does not Commute fue acogido con entusiasmo. Los críticos elogiaron su mecánica innovadora y su enfoque fresco en el género de conducción y estrategia. La comunidad de jugadores también respondió positivamente, apreciando tanto la dificultad progresiva como la imaginación en los pequeños relatos de los personajes. Sin embargo, algunos jugadores observaron que la curva de dificultad podría ser intensa, lo que agregaba un elevado nivel de desafío.
En resumen, Does not Commute es un juego intrigante que combina mecánicas de estrategia en tiempo real con la gestión del tráfico en un entorno urbano. Su narrativa fragmentada y su enfoque en la planificación estratégica lo han convertido en una experiencia única que ha sabido capturar la atención tanto de los jugadores casuales como de los entusiastas del género.