Sobrevivir en las tierras de Mordor puede ser realmente complicado. En muchas ocasiones te verás superado en número por el enemigo y más de una vez tu vida correrá peligro por lo que tendrás que huir del combate o intentar recuperar tu salud.
En el primer juego podíamos conseguir salud consumiendo las diferentes hierbas de Mordor, pero esta faceta ha desaparecido en esta segunda parte, por lo que solo podremos recuperar salud de cuatro formas:
- Cuando estamos muy dañados, esperar unos segundos sin recibir más daños para que se regenere parte de nuestra salud.
- Al tener éxito en una última oportunidad y salvar la vida in extremis, recuperaremos un tercio de nuestra salud.
- Subiendo de nivel.
- Absorber salud: Ésta será la forma más habitual de ganar salud en el juego.
Absorber salud
Al poco de avanzar en la historia desbloquearás la habilidad Absorber salud.
Esta habilidad te permite absorber salud de cualquier tipo de enemigo que no sea de gran tamaño y también de las ratas que rondan los lugares de forma aleatoria.
Para absorber salud de cualquiera de ellos solo debes dejar pulsado el botín Círculo / B y verás cómo sale una especie de haz hacia el enemigo mientras se rellena un indicado sobre su cabeza. Si ese indicador se rellena del todo antes de que seas golpeado recuperarás una porción de vida.
La habilidad Absorber salud tiene las siguientes mejoras:
- Dominación: Los enemigos a los que les has absorbido la salud también quedan dominados y lucharán por ti.
- Carcaj de almas: Al absorber la salud de un enemigo recuperas toda la puntería élfica.
- Ira del Señor de la Luz: Al dominar o absorber la salud de un enemigo recuperas toda la salud y ganas de ira.
Cada una de estas mejora requerirá que gastes un Punto de habilidad que podrás conseguir cada vez que completes cualquier misión principal o secundaria, recojas un conjunto de coleccionables, derrotes a algún enemigo importante o subas de nivel.