Cuphead incluye tres mausoleos (uno por mundo), una serie de niveles especiales donde podremos desbloquear las tres habilidades más devastadoras y útiles de todo el juego, las cuales pueden ser utilizadas cuando conseguimos rellenar cinco cartas de nuestro medidor de ataque especial.
A diferencia de los jefes y los niveles run and gun, aquí tendremos que defender una vasija de los fantasmas que irán apareciendo por todas las esquinas y laterales de la pantalla.
Estos nos ignorarán y avanzarán incansablemente hacia dicho objeto, por lo que si uno solo de ellos llega hasta él, perderemos automáticamente la partida y tendremos que reintentar la fase desde el principio.
Al ser fantasmas, estos no pueden ser eliminados con métodos tradicionales (es decir, disparando), por lo que el único modo que tendremos de acabar con ellos será realizar "parries" sobre estos espectros.
Tipos de fantasmas
Como era de esperar, existen diferentes tipos de fantasmas, por lo que hay que saber cuáles priorizar en cada momento, ya que suelen salir varios a la vez desde múltiples direcciones. Este es el patrón de cada uno de ellos:
- Fantasmas rosas: Simplemente avanzan hacia la urna a una velocidad media. Son los únicos que encontraremos en el primer mausoleo.
- Fantasmas pequeños con sombrero y bigote: Avanzan muy rápido y son más difíciles de acertar por su pequeño tamaño. Son introducidos por primera vez en el segundo mausoleo.
- Fantasmas con lazo rosa: Estos comienzan realizando un amplio círculo alrededor de la urna y poco a poco lo van cerrando para acercarse a ella. Cuando aparecen son difíciles de acertar, aunque a medida que van reduciendo el radio del círculo se facilita mucho el cálculo del momento en el que tenemos que saltar para acabar con ellos de un parry. También aparecen por primera vez en el segundo mausoleo.
- Fantasmas grandes con sombrero y dientes deformes: Estos avanzan lentamente, aunque una vez son golpeados se dividen en dos fantasmas más pequeños. Si calculamos bien, podemos acabar con todos ellos en una sola tanda y sin tocar el suelo.