Aunque Omega Force sea un estudio que se ha ganado su fama internacional a base de crear innumerables musou como Dynasty Warriors, Samurai Warriors, Hyrule Warriors o One Piece Warriors, lo cierto es que también ha hecho sus pinitos en otros géneros con resultados notables. Un buen ejemplo de ello lo tendríamos en las dos entregas de Toukiden, una serie de juegos de caza al más puro estilo Monster Hunter que nos llevó a combatir contra todo tipo de bestias inspiradas por los mitos del folclore japoneses, pero que lleva sin recibir una secuela desde 2016.
Ahora, en un movimiento que nos ha pillado a muchos por sorpresa, Koei Tecmo y Omega Force han decidido unir sus fuerzas con Electronic Arts para traernos Wild Hearts, un nuevo juego de caza que retoma la idea de Toukiden de llevarnos a un mundo ficticio inspirado en el Japón feudal para abatir grandes y poderosas criaturas. ¿Lo mejor? Llegará a PS5, Xbox Series X/S y PC el próximo 17 de febrero, por lo que no tendremos que esperar demasiado para hacernos con él.
Kemono y Karakuri
Así pues, volvemos a encontrarnos ante un juego de rol y acción en el que deberemos cumplir multitud de misiones consistentes en dar caza a grandes monstruos en unos combates muy intensos y espectaculares. Sin embargo, esta vez los seres a abatir son conocidos como Kemono, una especie de fusión entre las fuerzas de la naturaleza y diferentes animales.
Gracias a ello, sus diseñadores han podido concebir bestias tan identificables como un jabalí, un lobo o un gorila y darles un aspecto único, muy llamativo y amenazador con todo tipo de elementos fantásticos.
En este tipo de juegos, que los monstruos tengan presencia y cierta personalidad es algo muy importante, ya que ayuda a crear una relación personal muy estimulante entre cazador y presa que nos anima, como jugadores, a querer combatir contra ellos por lo mucho que nos fascinan. Si bien todavía es pronto para juzgar, lo cierto es que las pocas criaturas que nos han mostrado nos han gustado muchísimo. Son imponentes, sus diseños desprenden carisma y verlas en acción es todo un espectáculo. Evidentemente, queda por ver si sus mecánicas, patrones y comportamiento acompañan a lo puramente visual, pero la primera impresión ha sido muy positiva.
Algo que nos ha llamado la atención de todos ellos es el descomunal tamaño que tienen, una peculiaridad que promete traducirse en un rango de ataque amplísimo con el que tendremos que tener muchísimo cuidado, ya que son capaces de abarcar grandes cantidades de terreno de un solo movimiento.
Por suerte, para equilibrar las cosas contaremos con los Karakuri, un artilugio que nos permitirá fabricar una estructura con múltiples efectos distintos. No en vano, esta tecnología puede usarse como plataforma improvisada, como bomba, como muro e incluso como arpón para atar y retener al rival, por mencionar tan solo unos pocos ejemplos de sus aplicaciones. Es más, nos será útil incluso a la hora de movernos por el mapa, pudiendo crear tirolinas para cubrir grandes distancias en un instante.
Según Takuto Edagawa, uno de sus directores, los Karakuri son tan útiles e importantes en el desarrollo de las batallas que fue uno de los motivos por los que decidieron limitar las posibilidades multijugador del juego a 3 jugadores, ya que consideraron que tener a más cazadores implicaría tener más Karakuri, lo que hubiese desequilibrado por completo los duelos contra los Kemono.
En otro orden de cosas, cabe destacar que el título apunta a tener una estructura muy clásica, dividiendo su mundo en zonas independientes a las que acudiremos repetidas veces dependiendo de la misión que aceptemos, así que no esperéis un mundo abierto ni nada similar. Eso sí, dentro de cada terreno de caza no habrá cargas de ningún tipo y podremos movernos con total libertad por ellos creando nuestros propios caminos con los Karakuri y las habilidades de la que disponen los personajes a la hora de escalar, saltar y planear.
En lo que respecta a las armas, tendrán una fuerte inspiración japonesa y podremos sentirnos como auténticos samuráis empuñando cosas como katanas, arcos, paraguas y hasta una espada capaz de convertirse en un peligroso y afilado látigo, por lo que parece que habrá una buena variedad de estilos de combate.
Finalmente, a nivel gráfico también tiene muy buena pinta gracias a una portentosa dirección de arte que da vida a un mundo precioso con unos paisajes naturales imponentes, lo que se ve reforzado por una buena factura técnica donde destaca el uso de la iluminación, la distancia de dibujado y, por supuesto, el modelado de los Kemono, al igual que sus animaciones y la cantidad de efectos que ponen en pantalla con sus ataques más devastadores. Por cierto, llegará totalmente doblado al español.
Una cacería muy prometedora
Todavía nos queda mucho por saber de este proyecto, pero si algo tenemos claro es que estamos deseando probarlo. A nivel visual luce realmente bien, el diseño de los Kemono nos encanta, los combates prometen ser ágiles, intensos y desafiantes, y el uso de los Karakuri puede darle un soplo de aire fresco que lo diferencia de la competencia. ¿Estará a la altura cuando nos pongamos a los mandos? ¿Serán sus contenidos suficientes para tenernos cazando durante meses? Por suerte, en apenas unos pocos meses lo descubriremos.