Con un lanzamiento muy cercano, previsto para el mes de septiembre, Wario Land: The Shake Dimension no tiene la aureola de título estrella de Wii Sports Resort, Animal Crossing o los juegos que tanto se rumoreaban y que no han sido anunciados, pero en los minutos que lo pudimos probar durante la feria E3 nos resultó un título de plataformas muy divertido que, partiendo de un concepto clásico que apenas ha cambiado respecto a los juegos de Wario originales de Game Boy, integra el uso de las funciones de detección de movimiento del mando de la consola Wii y las combina con un estilo gráfico muy "cartoon", completamente 2D pero con una gran calidad en sus animaciones.
Wario, como siempre, está en busca de fortuna, con el pretexto de salvar a una princesa, y en los diferentes niveles del juego tendrá no solo que saltar de plataforma en plataforma y acabar con bastantes enemigos, sino también conseguir el mayor dinero posible.
Hay numerosos cofres secretos dispersos por el juego, pero sobre todo bolsas de dinero que, como dice el título, tendremos que agitar para que suelten hasta la última moneda, moviendo arriba y abajo frenéticamente el mando de la consola Wii, que se coge en horizontal y solo usa los botones A y B.
Aparte del clásico movimiento de ataque hacia delante de Wario, y el botón de salto, otra de las posibilidades del juego es la de noquear a enemigos, para luego cogerlos y, dirigiéndolos según la inclinación de nuestro Wiimote, soltarlos para acabar con más enemigos o accionar algún interruptor. Estos son bastante numerosos a lo largo del juego, y en el nivel que probamos se activaban, de nuevo, agitando mucho el mando de Wii, lo que provoca que Wario haga un gran ataque hacia el suelo, que éste tiemble, y que la barrera se levante durante unos segundos.
En el nivel en el que jugábamos, dividido en pequeñas pantallas, avanzábamos hasta que se desencadenaba una cuenta atrás y teníamos que volver sobre nuestros pasos, una vez conseguido el tesoro, huyendo por los caminos que antes habíamos recorrido y guiados por una especie de hada que nos mostraba el camino a la nave de Wario, antes de que se quedase atrapado para siempre.
La experiencia es la de un juego de plataformas clásico, de hecho como decíamos antes muy parecida a los Wario Land originales de Game Boy, pero con la particularidad de los controles del Wiimote, que hacen que sea muy divertido jugar. Cuenta además con un apartado gráfico que, dentro de su estilo bidimensional, es tremendamente vistoso por como están dibujados los personajes, y también por la calidad de la animación de Wario. Recién anunciado pero con un lanzamiento cercano, para septiembre, Wario quizás no satisfaga las ansias de los que esperan el retorno de las grandes sagas de Nintendo, pero resultará un juego de plataformas mitad clásico, mitad innovador, y por lo que hemos podido probar muy divertido.