La mítica serie de juegos de coches de Electronic Arts se ha vuelto desde hace unos años de carácter anual, y ahora el peso de las entregas más importantes recae sobre los británicos Criterion Games, unos expertos en realizar excelentes arcades de conducción, como ya demostraron con su saga Burnout. Tras el genial Need for Speed: Hot Pursuit de 2010, y el fabuloso aunque un tanto discutido Need for Speed: Most Wanted de las navidades pasadas, los británicos se toman un descanso, seguro para volver en 2014 con fuerzas renovadas, y pasan el testigo a un nuevo estudio, los suecos Ghost Games.
Con la colaboración de Criterion, este nuevo estudio es el responsable de Need for Speed: Rivals, la nueva entrega de la saga que llegará a finales de año a Xbox 360, PlayStation 3, PC y las nuevas Xbox One y PlayStation 4.
Como suele ocurrir últimamente cada vez que sale una nueva desarrolladora para un juego de conducción, este estudio está formado por empleados con amplia experiencia en el género, como Alex Ward, creador de Burnout, o Marcus Nilsson ex de DICE, que ha trabajado en títulos como Battlefield 2142 y Shift 2: Unleashed.
Esta nueva entrega mete en una coctelera los mejores ingredientes de los dos últimos trabajos de Criterion. De Hot Pursuit coge las trepidantes persecuciones pudiendo elegir ser corredor o policía, y su bello apartado visual; de Most Wanted el mundo abierto, los Speed Points, su peculiar multijugador, y la inteligente manera de proponernos constantes retos con el Autolog. De esta mezcla no puede salir nada malo, y efectivamente, tras haberlo probado podemos decir que este nuevo Need for Speed tiene una pinta excelente, a lo que ayuda el espectacular apartado gráfico gracias al Frostbite 3, el motor gráfico de Battlefield 4 y que en los próximos meses utilizarán casi todos los juegos de EA, menos los deportivos.
Ya sea como policía o como corredor, cada bando tendrá sus propios retos, apuestas y recompensas. Como corredor competiremos en frenéticas carreras y seremos puntuados por realizar las maniobras más arriesgadas, pero eso sí, tendremos que tener cuidado ya que si nos pilla la policía perderemos todos los Speed Points acumulados, por lo que tendremos que valorar en todo momento cuánto riesgo queremos correr. Según consigamos más puntos, desbloquearemos nuevos coches y objetos. Como policía formarás parte de un equipo de persecución colaborando con otros jugadores, y si atrapas a los corredores más osados, con más Speed Points, obtendrás más prestigio y desbloquearás nuevos vehículos y tecnología que te ayudará a atrapar a los malhechores.
Como se está poniendo tan de moda en múltiples juegos de nueva generación, Need for Speed Rivals apuesta por derribar las barreras entre la experiencia para un jugador y el multijugador, gracias al All Drive, que elimina cualquier tipo de lobby o sala de espera para jugar online. Correremos junto a otros jugadores que se mezclarán con los coches manejados por la inteligencia artificial, y nuestros amigos se podrán convertir en los policías que nos siguen durante una carrera, y viceversa, todo en un enorme mundo abierto. Una única experiencia que fusiona el modo para un jugador con el multijugador tanto cooperativo como competitivo, con una única progresión.
Pudimos probar esto durante el E3, en una carrera en la que competíamos contra otros jugadores, mientras a la vez estábamos siendo perseguidos por policías también controlados por usuarios, lo que podéis imaginar era divertidísimo, a la par que caótico la verdad, al menos en un primer contacto. Por suerte la conducción es muy accesible desde el primer minuto, muy arcade, con sensaciones similares a los juegos de Criterion, y si has disfrutado de algunos de los últimos Need for Speed desarrollados por este estudio británico, te sentirás rápidamente cómodo al volante.
El nitro o turbo juega un papel fundamental, si lo usamos con inteligencia en las curvas más difíciles para enderezarnos, así como el arte de derrapar, y contamos con un botón para usar el gadget pertinente, en el caso de los corredores y en esta demo un impulso electromagnético que estropea la electrónica del coche al que se lo lanzas, reduciendo su velocidad drásticamente durante unos segundos, aunque hay que estar enfocándole durante un buen rato, lo que no es fácil. Cuando te lo están haciendo a ti, un aviso aparece en pantalla, y te dan unos segundos para poder evitarlo.
Un aspecto también a destacar, es que a diferencia de lo que pasa en otros juegos de conducción en mundo abierto, aquí se han preocupado de que no te pierdas, que no elijas el camino o carretera que no es, y hay buenas indicaciones visuales que te marcan la ruta correcta, además de un sencillo pero intuitivo mapa que permanece en todo momento en pantalla. También nos gustó mucho que durante una carrera, además del objetivo principal que es quedar el primero, tienes una serie de retos que te proporcionan puntos extra, como derrapar un número de metros, causar accidentes, o saltar cierta distancia, lo que añade diversión y un desafío extra a cada prueba.
Visualmente estamos ante un juego espectacular, de los que mejor aspecto tenían en toda la feria, con algunos detalles realmente sorprendentes, demostrando el Frostbite 3 lo versátil que puede llegar a ser. Las marcas que dejan los neumáticos sobre el asfalto mojado, los impresionantes efectos de iluminación con todo tipo de reflejos, la realista lluvia que es azotada por el viento, los atractivos relámpagos de una tormenta que iluminan todo el entorno, simplemente genial. Lo que más no gustó fueron ciertos efectos gráficos que no solo están para adornar, sino que además tienen cierta influencia en la jugabilidad.
Por ejemplo cuando un coche delante de ti pasa por encima de un gran charco, el agua que levanta te dificulta la visión durante unos segundos. O lo mismo cuando un coche se sale de la carretera y levanta una nube de polvo o arena, algo que te deja a ciegas hasta que la atraviesas. Los coches cuentan con unos modelados excelentes, buenas físicas y unos desperfectos muy detallados, en los que se marca hasta cada raspón sobre la carrocería. Y los amantes de los coches más lujosos estáis de enhorabuena, vuelve la marca Ferrari a la serie Need for Speed, después de siete años de ausencia, por lo que podréis conducir los modelos más espectaculares de la marca italiana, como el F12 Berlinetta.
Need for Speed llega a la nueva generación en plena forma
Parece que en EA, tras el batacazo de The Run, se están tomando con toda la seriedad que se merece las nuevas entregas de su popular saga de conducción, y tras el excelente Most Wanted, este año preparan una nueva entrega que de momento tiene muy buena pinta. Los mismos cochazos de siempre, trepidantes carreras y persecuciones policiales junto y contra otros jugadores, y un apartado visual de excepción, que os va a dejar francamente sorprendidos cuando lo veáis en directo. El género de la conducción va a estar muy competido en el estreno de las nuevas consolas, con títulos como Forza Motorsport 5, DriveClub y The Crew, y este nuevo Need for Speed no se lo va a poner fácil a la competencia, apunta a que va a ser un juego excelente. Además de para PlayStation 4, Xbox One y PC, también llegará a Xbox 360 y PlayStation 3.