Si algo ha llamado la atención del nuevo proyecto de la saga, conducido esta vez por Electronic Arts y Visceral, ha sido el cambio temático que ha impuesto Battlefield Hardline. La historia de policía y ladrones, las persecuciones, los robos de bancos… todo esto es algo que hemos visto innumerables veces en el cine, y alguna que otra vez también en los videojuegos. Ahora, los creadores de Dead Space quieren llevarlo un paso más allá, y fusionar este ambiente con tantas posibilidades en una saga tan ambiciosa como Battlefield.
Tras la presentación del juego en el E3, Visceral llevó a la gamescom una demostración en la que pudimos ver su modo para un jugador –y cuyas impresiones podéis leer aquí–, ahora podemos probar el multijugador, estrenando, además, un nuevo modo recién anunciado que se ha llevado por primera vez en exclusiva a la feria japonesa.
El modo ‘Puente’
Aunque os puede despistar su nombre en un primer momento, "Puente" no hace referencia a la construcción, sino al método poco ortodoxo de arrancar un vehículo. Llamado "Hotwire" en inglés, se suma a los ya conocidos Blood Money y Heist, que son variaciones de modos clásicos, como capturar la bandera o tomar el control de una base. El modo que nos ocupa podríamos decir que parte de una especie de fusión de estos dos, pero además, lo lleva hasta un nuevo nivel metiéndole vehículos de por medio, que parecen cobrar incluso más protagonismo; o mejor dicho, un protagonismo diferente.
Este modo nos lleva a un escenario –jugamos en el ya conocido que se mostró en la primera beta pública– en el que dos equipos de ocho jugadores, divididos en dos escuadrones de cuatro cada uno –al menos en la versión que probamos– se enfrentan por conseguir "capturar" y sabotear los diferentes vehículos clave repartidos por el escenario. La clave para ganar es mantener los coches a gran velocidad el mayor tiempo posible, a la vez que intentamos evitar que los rivales hagan lo propio.
Breaking the law
Obviamente, toda la atención de este modo pasa por la conducción, ya que, reiteramos, para que el control del coche cuente tiene que ir a una velocidad relativamente alta. Esto implica no chocarnos, no dar marcha atrás, y, además, tener más o menos una buena imagen mental del escenario para evitar meternos en zonas sin salida, por poner un ejemplo. En esta demo los vehículos a robar eran coches, pero no sabemos si en otras variantes podrían entrar otros tipos en juego.
Independientemente de los coches que mencionamos, el resto de vehículos están disponibles. Es decir, podemos darle caza a los malos abriéndonos camino con una furgoneta blindada, pasando por zonas inaccesibles para ellos con las motos, o dando apoyo aéreo desde el helicóptero. O a pie, claro, faltaría más. Lo que no podemos negar es que este modo está totalmente centrado en la velocidad, en crear secuencias espectaculares, muy dinámicas, y la verdad es algo que consigue con creces.
Aunque sea al final una cuestión de casualidad, el juego propicia momentos muy peliculeros en este modo, con choques muy llamativos, saltos casi imposibles y momentos de esos que estamos deseando compartir en la red. Dicho sea de paso, el mapa del centro de Los Ángeles no es demasiado abierto, y está lleno de zonas por las que es imposible maniobrar. Estamos deseando ver qué momentos nos dejan los mapas más abiertos, con tiempo para conducir en línea recta y sentir los disparos de nuestros perseguidores.
¿Y estos meses de trabajo?
Battlefield Hardline, como habréis leído en Vandal, se retrasó varios meses, y en Visceral nos aseguran que no se han quedado de brazos cruzados. Han estado implementado en el juego muchas cosas basándose en la opinión de los jugadores tras la beta. En esta demo no podemos notar demasiado, aunque sí es cierto que parece que el juego se ve un poco mejor, al menos en lo que a estabilidad y efectos respecta.
Parece ser que jugamos en PlayStation 4, ya que lo hicimos con su mando y en las opciones del juego podíamos ver la configuración de botones para PS Vita, y no bajó en ningún momento de las 60 imágenes por segundo, al menos de manera perceptible, si bien no vimos eventos "Levolution", que suelen ser los que ponen esta tasa en peligro. En cualquier caso, no esperéis una mejora demencial en este aspecto, y sigue teniendo ese sabor intergeneracional que probablemente no se pierda hasta que den el salto definitivo a las nuevas consolas.
Un nuevo Battlefield
Battlefield Hardline no deja de ser un juego de disparos en primera persona, pero quizás, precisamente por eso, nos parece que le sienta tan bien este modo. El tema de la conducción parece ser que será más importante de lo que nos esperamos en este título, y creemos que, al menos al multijugador, le va a venir muy bien permitir "desahogarnos de tanto tiro" con algo así. Nosotros nos lo hemos pasado muy bien con estas persecuciones, y eso que, tal y como recogíamos antes, el mapa en cuestión no nos parecía el más adecuado para disfrutarlo al máximo.
Últimamente estamos viendo cómo los retrasos parecen ser indicativo de buenas señales. Ya vimos el caso de DriveClub, al que casi un año de retraso le ha sentado genial. Battlefield Hardline apenas se ha pospuesto unos meses hasta el año que viene, pero apunta buenas maneras para ofrecer experiencias distintas dentro del universo asentado por DICE y su saga. Poco a poco, Visceral se está ganando la confianza en su próximo proyecto con cada elemento del juego que enseña, y este nuevo modo no ha sido una excepción.