Con el vicepresidente de Bethesda a los mandos, Pete Hines, hemos disfrutado en la Gamescom que se está celebrando en Colonia de una nueva demostración del más que esperado The Elder Scrolls V: Skyrim. 11-11-11, muchos tenemos desde hace meses esa fecha grabada a fuego, el momento en el que el juego llegará a las tiendas. Esta es la tercera demostración a la que asistimos, pero no nos cansamos de ver la majestuosa obra que está creando Bethesda, si acaso, no nos gusta del todo volver a contemplarlo porque cada vez que lo hacemos más larga se hace la espera. Pero si algunos llevan esperando este juego desde hace cinco años, tantos como tiene Oblivion, ¿qué son aguantar ya tres meses?
Para aliviar la espera, os narramos lo que vimos en esta nueva demostración. Mientras carga la partida, Pete nos enseña un detalle curioso, ya que podremos girar y ver en tres dimensiones algunos de los modelados del juego, desde nuestro personaje, objetos a enemigos, además de leer unas descripción.
"¿Qué trabajadas las pantallas de carga, serán porque son muy largas no?" Bueno, es posible que por eso se hayan tomado tantas molestias, aunque no queremos ser mal pensados y es un detallito que queda muy bien, mejor esto que mirar el techo, pero sí, tiene la pinta de que los tiempos de carga, cuando salgamos de un interior al mundo de Skyrim, serán bastante grandes.
Lo primero que hizo Pete Hines fue crear un nuevo personaje, e incluso nos preguntó a los allí presentes si queríamos que eligiera alguno en particular. Altos elfos, argonianos, bretones, elfos del bosque, guardias rojos, imperial, khajiit, nórdicos y orcos. Por petición se eligió un khajiit, esas criaturas con apariencia felina, y pudimos comprobar lo potente y completo que es el editor de personajes. Empezando por el sexo, distintos tipos de apariencias para la piel -unas más similares a la de un tigre, otras a las de un jaguar-, el color, peso, color de ojos, pelo, vello facial, cicatrices y un largo etcétera. Un editor que permitirá mucha libertad a la hora de crear un personaje, lo que no será fácil, ya que gracias al impresionante apartado técnico nos costará decidirnos por la apariencia que más nos guste.
Empezamos la demostración en una caverna y nos muestran el sistema de equipamiento, muy intuitivo, práctico y sencillo, sorprendentemente simple para un juego de rol de la magnitud de este. Olvidaros del clásico inventario de los juegos de rol occidentales, con casillas llenas de objetos y muy complejos de dominar en un primer instante. Al entrar cuatro opciones - inventario, magia, habilidades y mapa – y una vez elegido el inventario vemos una simple columna a la izquierda de la pantalla que nos indica los distintos tipos de objetos –armas, pociones, varios, etcétera- y entrando en cada apartado vemos los que tenemos de esa clase y una representación gráfica, eligiendo en cuál de las dos manos queremos equiparlo simplemente pulsando uno de los gatillos. Como nos enseñó Pete, también dispondremos de la posibilidad de cambiar de arma rápidamente, sin entrar en este menú.
Acto seguido salimos al exterior viendo el precioso mundo de Skyrim. Estamos en un bosque y recogemos plantas y flores, vemos un conejo correr e incluso más adelante nos atacan unos lobos, ya que la fauna y flora del mundo creado por Bethesda será bastante completa. Osos, zorros, mariposas, ciervos, una gran cantidad de animales le dan un mucho realismo al entorno, y tendremos que tener cuidado cuando estemos explorando por un lugar recóndito, ya que nunca se sabe que amenaza de la naturaleza nos puede atacar. Para poder movernos el mapa del mundo es excelente, con una vista área en la que lo vemos todo y otra más cercana, en 3D, con relieve y mucho más detallada, que nos servirá para ver lo complicado y escarpado del terreno hacia el que nos dirigimos.
Tras explorar un poco el exterior nos adentramos en una cueva, matamos a un guardia y al poco de entrar nos sorprende un desprendimiento de rocas hiriéndonos, momento que aprovecha Pete Hines para decirnos que las nuevas mazmorras de Skyrim serán mucho más complejas en todo los sentidos, tanto visualmente como por su estructura, con cantidad de trampas e imprevistos ante los que tendremos que estar atentos. Esta parece ser la guarida de unos bandidos, a los que vamos venciendo con flechas, el hacha y poderes mágicos de fuego, una habilidad que le encanta usar a Pete quemando a todos sus enemigos. Exploramos el entorno recogiendo multitud de objetos, con detalles como que las monedas de oro, en vez de recogerlas en sacos o en montones como en otros juegos de rol, aquí incluso podemos recogerlas una a una.
Nos hacemos con un libro de hechizos, aprendiendo uno nuevo, ya que los libros tendrán mucha importancia en el desarrollo, para aprender ciertas magias que de otra manera no serían posibles. Nos vuelven a enseñar el sistema de habilidades, una serie de constelaciones en las que podremos progresar cómo deseemos, muy visual y práctico, y abruma ver la cantidad de habilidades y parámetros que podemos mejorar, será todo un quebradero de cabeza cada vez que lo hagamos ante el número disponible.
Los alimentos serán muy relevantes en Skyrim, con un complejo sistema de cocina en el que podremos combinar varios ingredientes para realizar recetas, ya que sea porque las sabemos o porque nos pongamos a investigar. Algo similar a lo que pasa con la alquimia, en unas mesas especiales o los llamados laboratorios de alquimia, podremos combinar objetos para crear pociones, y tendremos total libertad para experimentar. También tenemos las forjas, para crear cosas como escudos, botas o dagas de metal, la herrería, donde mejoramos nuestras armas, o las mesas de encantamientos, en las que podemos aplicar a los objetos propiedades mágicas. Una gran cantidad se lugares de trabajo en los que mejorar nuestro inventario y en los que los más meticulosos se podrán tirar horas.
Salimos otra vez al exterior caminando por la orilla de un lago, viendo a los peces cómo en ocasiones saltan a la superficie, la vegetación que se mece por el viento, dan ganas de explorar hasta el último rincón del mundo de Skyrim, aunque simplemente sea por su belleza. Nos metemos en el agua y vemos cómo el personaje bucea, algo que tendremos que tener en cuenta ya que también hay mucho mundo por descubrir debajo del agua. De hecho gracias a esto descubrimos una caverna acuática, un torreón sumergido por el que entramos desde su superficie. Una vez dentro este lugar está lleno de agua por todas partes, y comprobamos que se trata de la guarida de unos magos un tanto hostiles, el aspecto, decoración y recreación de esta mazmorra hablan por sí solos, sin necesidad de ningún texto o escena que nos explique dónde estamos.
Tras luchar contra unos cuantos magos y practicar un rato la alquimia, descubrimos una puerta secreta al bucear en una sala. Esta para poder abrirla tendremos que usar dos ganzúas en un minijuego controlado por los dos sticks analógicos, de la misma manera que en Fallout 3, juego que menciona el propio Pete Hines. Después de explorar un rato más el lugar, salimos al exterior y se acaba la demo.
Una hora más de contacto con Skyrim y otra vez las mismas sensaciones: queremos tenerlo ya en nuestras manos. Pocos secretos quedan por desvelar del juego –o eso creemos-, y las cartas ya se encuentran encima de la mesa boca arriba, y son insuperables. Parece que explotará hasta sus últimas consecuencias el hardware de las consolas actuales –quien disponga de un PC adecuado debería disfrutar de Skyrim con la mayor belleza posible-, y por lo que hemos visto tras Oblivion, pueden que pasen otros cinco años hasta que volvamos a disfrutar de un juego de rol de esta magnitud. El 11 de noviembre está a la vuelta de la esquina, y los conocedores de la saga saben de sobra que nos esperan meses de estar frente a las pantallas disfrutando de The Elder Scrolls V: Skyrim. Solo queda esperar y frotarse las manos, algo muy grande está en camino.