Mortal Kombat no deja de reinventarse, como concluimos en nuestro reportaje sobre la saga. Comenzó con una plantilla de luchadores muy escasa, siete -dos de ellos clónicos en apariencia- y posteriormente algunas de sus entregas han batido récords de personajes, codo con codo con la saga Tekken. Inicialmente todos los luchadores se comportaban igual, a excepción de dos o tres movimientos especiales; y hay capítulos que han mezclado los golpes con las amas blancas tres estilos de lucha únicos por personaje. Comenzó causando escándalo por sus gráficos realistas en 16 bits y su violencia gratuita; y la última entrega se ambientó en el mundo fantástico del cómic con poco gore. Nació en espectaculares 2D y no dudó en dar el salto a las 3D a la primera ocasión. Los movimientos finales abundaban en cantidad, y algún juego prácticamente los hizo desaparecer. Mortal Kombat había probado de todo, excepto mantener la esencia original.
Tras el movimiento empresarial de Warner, que adquirió a Midway, y la creación de NetherRealm Studios -que no deja de ser el mismo estudio encargado de la saga, auspiciada por Ed Boon-, el anuncio no se hizo esperar. Mortal Kombat regresaría en la mayoría de aspectos a la primera trilogía, sin duda, la más recordada de toda la saga -si bien, esto no significa que no se haya disfrutado de grandes juegos en la pasada generación-. Esa vuelta a los orígenes por la que la mayoría de sagas veteranas pasan en algún momento de su historia para contentar a los fans originales y para sorprender a los nuevos, que desconocen gran parte de sus orígenes. Mortal Kombat -a secas- es la prometida entrega de la saga que reinicia plantilla e historia, situándose en un punto temporal de la trilogía original.
El argumento de este juego es algo extraño. Como ha confesado Ed Boon, "Mortal Kombat tiene su historia, 18 años haciendo juegos y realmente no queremos continuar con, por ejemplo, el capítulo 17 del argumento. Así que vamos a hacer algo tipo 'Regreso al Futuro', en el que Raiden está a punto de morir a manos de Shao Kahn, y justo antes de su final, se envía un mensaje mental al Raiden del primer juego. El Raiden de Mortal Kombat I no sabe los detalles, pero reconoce que algo malo ocurrirá, y así intentará modificar el curso conocido de MK, MKII y MK3. Cualquier cosa puede suceder, así que todo lo que pasó -Liu Kang ganando torneos, los ciborgs...- cambian, y puedes ver versiones ciborg de luchadores que antes no lo eran, y ver diferentes acontecimientos."
La verdad es que el argumento del juego no es digno del premio Nobel de Literatura precisamente, pero sabemos que los diálogos y trasfondo de un juego de lucha suelen ser algo que no llega a ser ni a secundario. Incluso con esto, Mortal Kombat ha sido una de las sagas con mejor trasfondo para sus personajes, y la disculpa para revivir escenarios, combatientes y momentos legendarios de los salones arcade y consolas 16 bits cumple su papel.
Muchas de las críticas -más en aspecto que en mecánica- a Mortal Kombat vs. DC Universe- han sido escuchadas por Ed Boon y remediadas en el nuevo MK. Y es que contar con personajes como Batman, Superman o Flash pueden ser un gran reclamo para los seguidores de los cómics, pero el jugador habitual temió, y luego constató, cómo la violencia se hizo muy ligera; si, la sangre abundaba, pero desaparecieron las crudas mutilaciones. La historia no se considera oficial dentro del mundo de la saga, los gráficos no resultaron especialmente llamativos -concretamente los escenarios, anodinos en la mayoría de casos- y apenas se innovó en la parte de los luchadores de MK, siendo la parte de DC la única llamativa. Un juego de lucha notable, pero alejado de lo que se espera cuando compras un producto con Mortal Kombat en la carátula.
El nuevo Mortal Kombat borra de un plumazo muchas de las novedades de la última década. En primer lugar, por supuesto se siguen utilizando gráficos tridimensionales, pero la jugabilidad será 2D. Se acabó el desplazamiento por el escenario para arrinconar al enemigo o evitar las "magias"; como otros juegos nacidos para la bidimensionalidad -caso de Street Fighter IV- no tiene reparos en limitar la exploración de los escenarios a un plano. De esta manera, los combates aumentan en precisión y velocidad, y los saltos vuelven a recuperar protagonismo -uno de los movimientos más perjudicados generalmente en la lucha 3D-.
La plantilla del juego estará compuesta por luchadores de los tres primeros Mortal Kombat. De un total de 26, a los que se pueden sumar más por descarga, conocemos a Scorpion, Mileena, Reptile, Sub-Zero, Kung Lao, Johnny Cage, Nightwolf y Sektor, viejos amigos que mostrarán sus ataques más característicos, desde el garfio "ven aquí" del espectro Scorpion a los poderes heladores de Sub-Zero. Aún es pronto para avanzar todo el plantel, pero Ed Boon asegura que si tu luchador favorito está en la trilogía, seguro que podrás jugar con él. En el lado de los jefes finales seguro que veremos a Shao Khan, y con bastantes papeletas para reaparecer, Goro.
Pero no hay que rechazar la introducción de algunos cambios a una mecánica conocida, y es por ello que el equipo ha ideado los movimientos "Rayos X" -el nombre es provisional-, tan prácticos como espectaculares. Son secuencias diferentes para cada personaje, y consistente en combos automáticos de dos o tres golpes muy potentes. Desatar uno de estos movimientos puede inclinar la balanza del combate, pero además, refleja de manera dolorosa la crudeza de la batalla, pues el nombre (Rayos X) se otorga por la visión de los órganos internos del sufrido luchador que recibe los golpes. De esta manera, además de ver reflejadas las heridas en la parte externa -como en las últimas entregas de MK-, seremos testigos de roturas de huesos y otro tipo de traumas internos con asombroso realismo. No es la primera vez que vemos algo así en un juego de acción, Death by Degrees ya contaba con algo similar, pero no cabe duda que Mortal Kombat lo lleva a un paso más, en realismo.
Otra de las novedades son los combos personalizables. Porque los primeros juegos eran buenos, pero podían mejorarse en esta área, el nuevo Mortal Kombat hará que juguemos a algo más que un remake poligonal de los originales. Ed Boon habla de esta nueva característica: "Queríamos hacer los combos lo menos programados que se pudiese, y dejar al jugador escoger partes, y unir estas piezas en un combo."
Al hilo de lo anterior, hay que mencionar los modos de equipos de dos contra dos. El clásico "tag", al que Mortal Kombat no se había apuntado hasta ahora, permite realizar combos conjuntos, ataques combinados y cambio de personaje en cualquier comento. Sin duda, una de las ideas que más se echaba de menos para hacer completa a una entrega de MK. Las opciones online, tanto 1 contra 1 como los "tag" prometen ser muy divertidas, fundamentalmente cuando se permite que dos jugadores reales compitan contra otros dos -cada uno asignado a un luchador-. Los baños de sangre pueden ser épicos.
Para poner orden a todas estas nuevas ventajas y habilidades, el juego incorpora unas barras divididas en tres segmentos, que se consumen según algunas habilidades. Por ejemplo, se pueden potenciar movimientos consumiendo una porción, para hacer "magias" más dañinas y difíciles de esquivar. De esta manera, el proyectil verde de Reptile cobra un tamaño considerablemente más grande del visto en MKII. ¿Y el suelo helado de Sub-Zero? Potencia este ataque y la superficie de hielo se extenderá mucho más lejos que el tradicional charco. La barra rige también el uso de los ataques combinados en equipo, para evitar cebarse en un enemigo y terminar la partida en pocos segundos, y el combo Rayos X se activa con la energía al máximo. Pero también se utiliza para tareas defensivas, como detener el combo de un rival -consume dos porciones de la barra-. Un elemento estratégico muy a tener en cuenta.
Ed Boon explica toda la nueva jugabilidad: "Cuando unes los equipos y el sistema de combos, hay un montón de nuevas variables. Queríamos dar un montón de opciones al jugador para que formase su propio estilo. Con cada nuevo añadido, como los movimientos Rayos X, los especiales y los especiales mejorados, el jugador puede unir estas piezas a su gusto."
La saga comenzó con los míticos Fatality, para dar paso a un número casi exagerado de movimientos finales, como los Animality, Friendship, Babality, Brutality... posteriormente, y con cada reinicio, el equipo volvía a la esencia original. En este caso, el Mortal Kombat, que apuesta por temas más oscuros que el último juego, se olvida de los finales "amistosos" y se centra en los Fatality, tanto los propios de cada personaje como los de escenario -el que tiene lugar en el puente, o el lago de ácido...-. Deadly Alliance demostró que la imaginación del equipo no pasaba por su mejor momento, pero sin duda la serie tocó fondo con MK vs. DC, en el que, por imposición de los luchadores invitados, la mayoría de finales eran aptos para un público menor al habitual. Gracias al modelado interno con el que cuentan los personajes para los efectos de Rayos X, en el nuevo juego los creadores tienen más libertad creativa para producir seccionamientos y mostrarlos con gran realismo, como el corte que hace Kung Lao con su sombrero, que divide al perdedor verticalmente, o las mutilaciones de la espada de Scorpion. La tecnología puesta al servicio del humor más negro.
Sin embargo, no está todo dicho en cuanto a sorpresas. Mortal Kombat siempre ha sido una mina para la rumorología y buscadores de easter eggs -especialmente en los tiempos en los que Internet no detallaba todos los golpes el mismo día del lanzamiento-. Ed Boon no confirma los Babalities, pero deja caer que "si hiciésemos algo así definitivamente no lo diríamos. Era parte de la diversión de los viejos juegos: '¡Has convertido al tío en un bebé! ¿Has visto ese arco iris?' Queremos que este tipo de eventos, si suceden, sean casi como rumores."
El juego en línea y las descargas estarán más potenciadas que en el último juego. MK vs DC tenía previsto aumentar su plantilla con más personajes, tanto de los juegos como de la editorial de cómics -la compañía había hecho encuestas, y Lobo era uno de los más demandados-, pero finalmente los usuarios quedaron sin opción de adquirir más contenido. Con el nuevo Mortal Kombat, el equipo se tomará más en serio este apartado, y además de los nuevos personajes -los básicos están centrados en la trilogía, pero no hay que descartar otros más recientes, como Quan Chi, de gran peso en la saga- hasta un total de ocho jugadores pueden ocupar una sala virtual, ver, comentar en directo la competición y tomar relevo para luchar contra el ganador. El mismo tipo de emociones que convertían los centros recreativos en lugares sociales, pero todo desde la red.
El juego hace uso de la última versión del Unreal Engine 3. MK vs DC ya corría en este motor multiplataforma, aunque los resultados no sorprendieron demasiado, sólo el modelado de los luchadores -con una estética de plástico, eso sí- podía destacarse. Los escenarios eran bastante pobres en detalle, algo interactivos -algunos con varios pisos- pero no a la altura de lo esperado. El nuevo Mortal Kombat soluciona este problema recuperando el estilo de los primeros juegos, versionando en 3D algunos de los escenarios más emblemáticos de la trilogía, lo que garantiza un tono más oscuro e imaginativo que las vacías calles que pudimos ver de Gotham City. Unos escenarios que mezclan fantasía y ambiente oriental, con desplazamiento 2D, pero con cambios de cámara para resaltar los mejores golpes y Fatalities. La mejora gráfica conseguida en algo menos de dos años está fuera de toda duda.
Aunque el daño externo, ropas rasgadas y manchas de sangre sobre los luchadores no es nuevo, el espectacular movimiento que deja ver los órganos internos es un añadido que completa los golpes más brutales del combate. El modelado de músculos y huesos está bastante cuidado y personalizado, no son lo mismo las entrañas de un luchador humano que el cráneo de Reptile o el torso de Sektor, que incluye cables y metal. La guinda la pone la compatibilidad con las 3D, confirmada en PlayStation 3, aunque será una característica que posiblemente no puedan experimentar muchos usuarios.
Más explícito que nunca.
Mortal Kombat supone un giro respecto a la tendencia de la saga en los últimos años, creemos que a mejor. Tras experimentar con armas, estilos de lucha, cambios de plantilla más o menos drásticos y multitud de minijuegos y extras, el equipo de Ed Boon se ha centrado en lo más importante y lo que hizo grande a la saga.
Las novedades en el sistema de combos y movimientos potenciados añaden profundidad sin cambiar lo esencial, pero la novedad que en principio nos parece más atractiva es el modo "tag", que puede ser una de las opciones favoritas una vez se lance en 2011 en Xbox 360 y PlayStation 3.
