Lies of P es un juego que llama la atención. A primera vista estamos ante otro soulslike con una estética fuertemente inspirada en Bloodborne, aunque lo que lo hace realmente especial es el hecho de que se trata de una oscura y retorcida adaptación de Pinocho, uno de los cuentos más populares y famosos que jamás se han escrito. Desde luego, su propuesta es tan curiosa que captó nuestro interés desde su mismísimo anuncio hace dos años, aunque ahora por fin hemos tenido la oportunidad de echarle el guante gracias a una demo que, en el momento en el que leáis estas líneas, ya debería estar disponible para todo el mundo. Y sí, lo que nos hemos encontrado en ella es una obra con potencial a la que parece que merecerá la pena no perderle la pista en los próximos meses.
La rebelión de las marionetas
Su historia nos lleva hasta la ciudad de Krat, un lugar inspirado en la Belle Époque que ha acabado por convertirse en un auténtico infierno por culpa de una plaga que está acabando con sus habitantes. Por si esta situación no fuese lo suficientemente desesperada ya de por sí, las marionetas que antaño servían como protectoras de la urbe y que se encargaban de ayudar a los ciudadanos, se han vuelto locas y ahora se dedican a cazar con furia a cualquier humano que se cruza en su camino.
Por suerte para todos, el gran artesano Geppetto creó una marioneta muy especial llamada Pinocho, una que, a diferencia de las demás, realmente parece humana y tiene la capacidad de hacer lo que otras no pueden, como mentir.
La aventura comienza cuando una voz despierta a nuestro héroe, momento en el que tomaremos su control y empezaremos a explorar Krat buscando la forma de salvarla y devolver todo a la normalidad, una tarea que nos llevará a luchar contra todo tipo de peligrosos autómatas mientras desbloqueamos atajos, encontramos tesoros, mejoramos a Pinocho y, por supuesto, hacemos morder el polvo a gigantescos jefes que no dudarán en ponernos las cosas difíciles.
En lo puramente jugable nos hemos encontrado ante un soulslike de manual que sigue a pies juntillas la fórmula habitual. De este modo, exploraremos una serie de niveles donde desbloquearemos multitud de puertas, escaleras y ascensores para que nos sirvan de atajos, hay puntos de control donde descansar, recargar nuestras pociones de vida y realizar gestiones que también sirven como puntos de viaje rápido y que hacen que todos los enemigos reaparezcan al tocarlos, el sistema de combate se basa en la gestión de una barra de resistencia que se consume cuando golpeamos, defendemos y esquivamos, y al morir toda la experiencia que hayamos acumulado y no hayamos usado caerá al suelo, obligándonos a llegar de nuevo al punto en el que nos derrotaron para recuperarla.
De hecho, hasta la forma de subir niveles es muy similar, pudiendo escoger cada vez que lo hacemos el atributo de nuestro héroe, y también existe un sistema de peso que hará que nos movamos más lentos, esquivemos peor y nos cueste más regenerar nuestra resistencia según nuestra capacidad de carga y lo pesado que sea nuestro equipo.
La buena noticia es que el título funciona muy bien a los mandos gracias a unos controles competentes, a una buena sensación de impacto y a una dificultad bien equilibrada. Explorar Krat nos está resultando muy entretenido y los enemigos y las numerosas trampas que nos tienden nos obligan a estar siempre alerta. Sin embargo, por muy familiar que nos resulte todo, el título también cuenta con algunos detalles que le dan un ligero sabor propio.
Un ejemplo muy claro de esto lo hemos visto con la acción de esquivar, mucho más torpe e imprecisa que la vista en juegos como Bloodborne, y aunque vamos a tener que hacer uso de ella para evitar que nos agarren con ciertos ataques, no tardamos en descubrir que la mejor forma de defender reside en realizar paradas perfectas.
Al igual que en muchos otros títulos, si pulsamos el botón de bloqueo en el momento justo en el que vamos a recibir un impacto, anularemos todo el daño e incluso el consumo de resistencia que conllevaría dicha acción, algo que funciona incluso con las técnicas imbloqueables de nuestros rivales, las cuales se indican con un fulgor rojo. Por supuesto, también podemos defender a la antigua usanza, aunque esto resulta de todo menos práctico, ya que perderemos mucha energía y el daño que nos hagan se convertirá en daño temporal que podemos recuperar si atacamos a nuestro contrincante justo a continuación, algo que no siempre vamos a poder hacer.
El timing que requieren las paradas perfectas no es demasiado exigente y su ejecución nos ha parecido muy satisfactoria, convirtiendo los combates contra los rivales más duros en una experiencia muy intensa y divertida que nos obliga a aprendernos bien sus erráticas animaciones (no dejan de ser siniestras marionetas) y asumir el riesgo que supone fallar esta maniobra defensiva.
Otro detalle interesante lo tenemos en la barra de vida de los enemigos más fuertes, quienes regeneran parte del daño que les hagamos cuando no estamos atacando, dándonos un incentivo adicional para que juguemos con algo más de agresividad a la vez que ejercen cierta presión mental sobre nosotros para que nos precipitemos y cometamos errores. Además, habrá momentos en los que el contorno del medidor de salud del enemigo se volverá blanco durante unos segundos, algo que podemos aprovechar para ejecutar un golpe fuerte cargado y aturdirlo. Si lo hacemos bien, tendremos la oportunidad de castigarlo con un potentísimo y espectacular ataque crítico.
Entre otras mecánicas destacables conviene señalar que podremos crear nuevas armas ensamblando las hojas y empuñaduras que encontremos, lo que afectará a sus atributos y a las habilidades de combate que podremos utilizar, dándonos algo más de margen para hacernos con un arsenal con el que nos sintamos cómodos.
Tampoco podemos olvidarnos de la posibilidad de equipar a nuestro brazo izquierdo con diferentes tipos de herramientas que nos serán muy útiles en combate, pero que consumen su propia barra de energía. Por ejemplo, podemos usar un gancho para atraer enemigos ligeros hasta nuestra posición, desestabilizarlos y aprovechar para hacerles mucho daño antes de que puedan contraatacar.
Quizá lo que menos nos está convenciendo sea el hecho de que nos obliguen a teletransportarnos de vuelta a nuestra base principal para subir de nivel en vez de hacerlo directamente en los puntos de control, algo que, curiosamente, sí se puede hacer en el primer capítulo de la aventura. De igual modo, Krat está dividida en zonas independientes separadas por pantallas de cargas que solo están interconectadas mediante puntos de teletransporte, lo que le quita cierto encanto a su mapeado. Y sí, el diseño de niveles es correcto y cumple, pero no consigue sorprender en ningún momento.
Una cuidadísima dirección de arte
Lo que sí que nos ha gustado muchísimo es su dirección de arte, cuidada hasta el extremo y capaz de plasmar imágenes muy potentes con sus escenarios y el inquietante diseño de sus enemigos. Las calles de Krat están repletas de detalles, son lo suficientemente variadas y nos sumergen de lleno en un mundo oscuro y decadente, pero también bello y fascinante. Por suerte, esto se ve reforzado por un apartado técnico muy bueno que destaca por sus trabajados modelados, sus animaciones, texturas, uso de la iluminación y buena optimización en PC, la versión que hemos podido probar.
Finalmente, el sonido nos deja con una banda sonora cuya presencia suele relegarse a piezas épicas con orquesta y coro cuando toca enfrentarse a los jefes, aunque creemos que les falta algo de fuerza y personalidad a las pocas composiciones que hemos escuchado. Los efectos cumplen muy bien su papel de crear ambiente y ayudarnos a identificar amenazas antes de que las podamos ver, mientras que el doblaje inglés es de calidad. Los textos están traducidos al español.
Un interesante cuento
Puede que Lies of P no haga nada nuevo ni demasiado original, pero cumple de sobra con su cometido de entretener y hacernos pasar un buen rato mientras luchamos por sobrevivir en un mundo con una dirección de arte fantástica, virtudes que a las que tenemos que añadir ese atractivo adicional que tiene al ofrecernos una visión tan diferente y única de un cuento tan querido como Pinocho. Esta primera toma de contacto ha terminado de dejarnos bien claro que se trata de un soulslike muy prometedor que apunta a hacer las delicias de los fans de este tipo de aventuras, así que si os interesa lo que propone, no dudéis en darle una oportunidad a su demo. Seguro que la disfrutáis y os sirve de aperitivo de cara a su lanzamiento el próximo 19 de septiembre.
Hemos escrito estas impresiones gracias a un código de descarga anticipada de la demo de Lies of P para PC que nos ha facilitado Ico Partners.