Dungeon Siege, Total Annihilation, Supreme Commander… son muchas las obras maestras que no han ofrecido Chris Taylor y su equipo, Gas Powered Games, a lo largo de estos últimos años. Es precisamente por este detalle por el que el anuncio de sus nuevos proyectos siempre despierta tanta expectación. Y es que pese al chasco que supuso Space Siege, las sensaciones que desprende Demigod no podían ser más esperanzadoras.
Combinando de una forma realmente sorprendente la acción, el rol y la estrategia, el nuevo proyecto de Gas Powered Games promete sumergirnos en impresionantes e intensas refriegas en una sucesión de arenas de combate en las que nuestro único objetivo no será otro más que el de exterminar a los rivales ya que nuestra recompensa no podía ser mejor: convertirnos en un dios.
Un torneo de dioses
Una serie de criaturas fantásticas a medio camino entre lo mortal y divino, los demigod (semidioses), se encuentran inmersas en un brutal torneo que esperan superar para convertirse en dioses. Las reglas del mismo son de lo más sencillas. A través de una serie de arenas de combate de dimensiones reducidas para que la batalla se libre desde el primer instante, y con varios niveles en las mismas para que se puedan aplicar diversas estrategias, cada demigod contará con una base a proteger y en el lado opuesto del escenario, que será simétrico para que la igualdad sea máxima, la base enemiga que por supuesto tendrá que arrasar.
En este sentido, da la sensación de que Demigod funcionará como cualquier otro juego de estrategia en tiempo real, pero nada más lejos de la realidad. Por un lado, hay que resaltar que únicamente controlaremos de forma directa semidiós que encarnemos y no a todo el ejército que le acompañará a lo largo de cada contienda, aspecto que ya deja claro que no estamos ante un título convencional. Y es que como decíamos anteriormente, la nueva obra de Gas Powered Games combinará a partes iguales la acción con el rol y la estrategia. De este modo, a la hora de controlar a nuestro demigod, que contará con habilidades especiales que le diferenciarán del resto y que lógicamente deberemos aprovechar al máximo para vencer a las decenas y decenas de tropas enemigas que nos atacarán constantemente, nos encontraremos con un sistema de control y una interfaz muy cercano a lo que podríamos ver en cualquier juego de acción y rol como Diablo o el anteriormente citado Dungeon Siege.
Esto significa que nuestro semidiós contará con una serie de habilidades y movimientos especiales que tendremos que ir activando de forma rítmica para lanzar los mejores ataques en el momento oportuno, pudiendo progresivamente mejorar sus habilidades para que su poderío bélico no deje de crecer. Al respecto, nos encontraremos con dos tipos de semidiós bien diferenciados. Por un lado, los generales, más débiles en el combate cuerpo a cuerpo (prefieren la lucha a distancia), pero con la habilidad de impartir órdenes entre las filas o convocar a nuevas unidades para que le asistan en el combate, a modo de guardia personal; así como establecer diversas estructuras en el escenario (un estilo más cercano al de la estrategia tradicional); y los asesinos, que como os podéis imaginar, se dedicarán sobre todo a reventar las posiciones enemigas a base de golpes. En ambos casos, el juego promete quedarse a medio camino entre la estrategia en tiempo real y la acción y el rol, una combinación que puede resultar de lo más interesante.
Y decimos esto porque el desarrollo de la acción promete ser de lo más intenso. No por nada, como explicábamos anteriormente, las arenas de combate están siendo diseñadas de tal modo que la acción no decaiga en ningún momento, permitiéndonos por ejemplo sorprender al rival por la retaguardia con una fracción de nuestro ejército, del mismo modo que nosotros seremos sometidos a contantes ofensivas desde varios frentes a la vez, lo que sin duda pondrá a prueba nuestra destreza. Hay que resaltar en este punto que nuestros logros en combate serán recompensados con puntos de honor que nos permitirán convocar a más tropas para nuestra causa, así como mejorar las habilidades del semidiós en liza. Sin embargo, no debemos pecar de temerarios ya que lanzar un ataque apresurado sin seguir una estrategia nos puede salir muy caro: si nuestro demigod cae, durante unos instantes el rival se encontrará con un escenario de combate sin un enemigo a la altura de su semidiós, por lo que con demasiada facilidad podrá alcanzar nuestra base de operaciones y comenzar a causar estragos. Pero es que además, tras morir, los ítems con los que estuviera equipado nuestro general quedarán repartidos por el suelo a merced del contrario.
Lo mejor es que toda esta intensidad promete trasladarse a la perfección a la vertiente multijugador de Demigod, que es sin duda su principal atractivo. No en vano, el juego ha sido diseñado como una experiencia multijugador, ya que se permitirá que varios usuarios compitan entre sí en todas y cada una de las arenas que presentará el juego, con opción de realizar alianzas para combatir contra otros ejércitos controlados por la inteligencia artificial. En este caso, de nuevo el diseño de los escenarios promete ser de lo más acertado puesto que, como decíamos, éstos han sido creados de tal modo que en ningún momento habrá tiempos muertos. La mayoría de combates se decidirán entre 30 y 40 minutos, pero a lo largo de este tiempo, según los desarrolladores, viviremos un sinfín de escaramuzas que no nos dejarán ni respirar.
Y ya que hablamos del diseño de los escenarios, no podemos sino destacar también el fantástico trabajo que se está llevando a cabo a nivel técnico. Haciendo uso del motor gráfico de Supreme Commander, Demigod mostrará unos entornos con un gran nivel de detalles, aunque principalmente destacarán por su ambientación y diseño, tendente al colosalismo. También, el número de tropas que se darán cita en el campo de batalla promete ser espectacular; vistosidad que gracias a la inclusión de los increíbles semidioses no dejará a nadie indiferente. Del mismo modo, las diversas habilidades especiales que podremos desencadenar en el campo de batalla resultarán de lo más impactantes amén de variadas, ya que los desarrolladores esperan que las deidades que podremos controlar a lo largo de la partida sean lo suficientemente distintas entre sí como para sorprender constantemente al usuario por sus formas de atacar a los rivales y defender sus intereses.
En definitiva, el nuevo trabajo de Gas Powered Games tiene todos los visos para convertirse en una de las grandes sorpresas del año. Bien es cierto que la apuesta resulta arriesgada, pero visto el trabajo realizado por este equipo de desarrollo a lo largo de su trayectoria, y la intensidad que prometen las contiendas –sobre todo en su vertiente multijugador-, no podemos más que desear que llegue el momento en el que nuestro semidios ponga en práctica todas sus destrezas militares para alzarse con la victoria en el torneo. No en vano, las puertas del Paraíso esperan al vencedor.
