Análisis de Top Spin 3 (Xbox 360, NDS, Wii, PS3)
Ganar tu primer juego a Top Spin 3 en nivel de dificultad normal es una de las más recientes satisfacciones que ha creado el mundo del videojuego. Tras las malas críticas de la segunda parte, 2K Games ha reinventado la saga Top Spin con esta tercera parte, dando un paso decisivo, y radical, hacia la simulación. El resultado es uno de los juegos deportivos más interesantes del año, al ser probablemente la recreación más exigente del deporte de Nadal, Federer y compañía.
Desarrollado de nuevo por PAM Development, el grupo anteriormente vinculado a Microsoft que 2K Games adquirió junto con la licencia, Top Spin 3 sigue las líneas maestras de cualquier juego de tenis que se precie. Por una parte cuenta con un plantel de tenistas real, con hombres y mujeres, donde destacan nombres como Roger Federer, Nadal (solo en la versión PS3, lo que constituye una extraña exclusiva), Nalbandian… o Justine Henin, Sharapova o Mauresmo, aparte de leyendas como Bjorn Borg, Boris Becker o Monica Seles. Hay algunos ausentes -Djokovic- y un modo de editor de personajes donde podremos crear a tenistas altamente personalizados, ya sea para usarlos en los diferentes modos de juego, o como requisito para entrar en el modo carrera, la habitual modalidad en la que empezamos desde cero, como principiantes, y avanzamos poco a poco hasta convertirnos en el número uno del mundo
Como decíamos al comienzo del análisis, Top Spin 3 es un simulador de tenis por lo que lo primero que notamos al comenzar la primera partida es que no es tan fácil, ni tan intuitivo, como los juegos de tenis al uso como Virtua Tennis, Smash Court y los anteriores títulos de esta saga. En estos títulos el golpeo de la pelota pasaba a un segundo plano, y teníamos que centrarnos sobre todo en la estrategia, a dónde mandar la pelota para doblegar a nuestro rival, seguros de que siempre, o casi siempre, entraba dentro de las líneas de la cancha, pero aquí la cosa no es tan sencilla.
Top Spin 3 por supuesto nos obliga a ganar cada punto haciendo que la pelota sea inalcanzable para nuestro adversario, pero del mismo modo que para meter gol en un simulador de fútbol tenemos que trazar una buena jugada, aquí para dar un buen golpe tendremos que sincronizar bien nuestros movimientos. Este sistema de control exigente marca completamente el desarrollo del juego, sobre todo porque se cambia la tónica de otros títulos. Generalmente, en los juegos de tenis pulsamos el botón que queramos y cuanto más tiempo lo pulsemos, más fuerte será el golpe; en Top Spin 3 el sistema es parecido, pero tendremos que soltar el botón en el momento exacto para golpear la pelota.
Este detallito puede parecer anecdótico, pero requiere primero un cambio de chip a la hora de jugar, similar a lo que pasa en los juegos de fútbol que tienen diferente botón de disparo y pase, y luego concentrarnos cada vez que golpeemos la bola en soltar el botón en el momento exacto, acorde con la posición de la pelota y la animación de nuestro tenista. Generalmente el momento idóneo es cuando la pelota bota, pero dependiendo de nuestra posición en la pista, no siempre será así. Soltar el botón antes o después del momento ideal hará que nuestro tenista golpee la pelota de forma muy forzada, resultando en un disparo flojo, mal colocado, o directamente fuera de la pista. No será raro que las pelotas acaben en "out", o en la red, como ocurre en el tenis real. La época en la que todas las bolas entraban ha terminado.
Mientras que la colocación dependerá de la dirección de nuestro mando al golpear la pelota (la precisión depende de la sincronización), la potencia del golpe es en función de la cantidad de tiempo que hayamos pulsado el botón antes de soltarlo. La potencia es vital para lograr golpes rápidos que pongan realmente a nuestro rival contra las cuerdas. Cuanto más potente sea el golpe, por cierto, más sincronización requerirá para que no salga fuera. Olvidaos del juego mecánico, cada golpe requiere habilidad con el mando.
Por otra parte, el repertorio de golpes disponible es el mismo que el de anteriores juegos. Contamos con el golpe normal, el globo (que tendremos que dirigir si no queremos que nos vaya fuera) y los letales golpes liftados y cortados, tremendamente efectivos si se usan bien, y especialmente en ciertas superficies. Además de los golpes estándar, contamos con la opción de forzarlos para que sean más potentes o mejor colocados, pulsando el gatillo izquierdo, derecho, o los dos al a vez. No hace falta decir que, si no golpeamos la pelota con sincronización, estos golpes se irán fuera casi por sistema.
La cuestión es qué beneficios trae esto, y la respuesta es una mayor profundidad. Obligarnos a demostrar nuestra habilidad con cada golpe, combinando esta exigencia con una buena inteligencia artificial por parte de la máquina, hace de Top Spin 3 un juego exigente, emocionante, donde realmente los puntos importan, porque no son en absoluto fáciles de ganar y porque, especialmente al principio, es muy fácil perderlos por un error por nuestra parte, ya sea por un mal golpe o por un riesgo mal asumido. La curva de aprendizaje puede ser empinada al principio, incluso un poco frustrante, pues si en nuestra primera partida cogemos a Federer e intentamos ganar Roland Garros (recordemos que Nadal no está en el juego), probablemente perderemos con un sparring en primera ronda, puede que incluso sin hacer ningún punto. Sin embargo, este duro aprendizaje, con la ayuda del tutorial del juego, dará sus frutos pronto, y descubriremos una profundidad mucho mayor que la de cualquier juego de tenis, que repercute en mayor emoción y tensión al a hora de jugar.
Aparte de los partidos de exhibición, en Top Spin 3 contamos con una serie de torneos, algunos de ellos reales como Roland Garros o el US Open, que podremos comenzar, y luego continuar en otro momento tras haber guardado nuestros progresos. Sin embargo, el modo "principal" para un solo jugador es el Carrera. Primero tendremos que crear a un jugador en el editor, que tiene bastantes opciones, e incluso la posibilidad de "esculpir" el rostro de nuestro tenista para hacerlo lo más parecido a nuestro objetivo como queramos. Podremos también escoger su vestimenta y accesorios, aparte de detalles de su juego como su postura, si el reves lo hace a una mano o a dos, o si es diestro o zurdo. Luego lo haremos progresar desde el nivel amateur, midiéndose a oponentes de su categoría, participando en torneos, y aumentado sus habilidades poco a poco. Comenzará teniendo una media de 30 (Federer, mejor del juego, tiene 75), y a base de ganar partidos lograremos puntos de experiencia para irlo mejorando.
Aparte de las satisfacciones que nos traerá este modo carrera, luego podremos usar a nuestro tenista en los otros modos, e incluso a la hora de jugar online. El modo online del juego combina tanto los encuentros tradicionales, eligiendo a un jugador del plantel del juego y midiéndonos a otros por todo el mundo, con una especie de modo carrera donde podremos coger a nuestro jugador creado y hacerlo progresar por una serie de torneos online. Aquí el juego usa un sistema muy inteligente e imaginativo, y es que podremos dejar de jugar un torneo y reanudarlo después; evidentemente nuestros adversarios serán también otros jugadores, pero el sistema de emparejamientos es dinámico, es decir, los torneos no están fijados, sino que simplemente hay una serie de jugadores que están en segunda ronda, octavos, cuartos, etc… y el sistema los empareja dinámicamente, por lo que podremos dejar un torneo, y reanudarlo después, jugando siempre contra rivales humanos. Es una forma muy acertada de implementar torneos online sin exigir al jugador que esté a unas horas determinadas conectado.
A nivel gráfico Top Spin 3 llama la atención por la calidad de sus escenarios y el buen modelado de los tenistas. Éstos tienen un notable parecido con sus homónimos reales, aunque no exagerado, y unas buenas animaciones; aparte, el juego representa el cansancio de los jugadores muy bien, haciendo notar marcas de sudor tanto en la ropa como en el rostro, y una sensación de cansancio en la expresión del tenista. Los escenarios, como comentábamos, tienen una buena calidad en su diseño y además condiciones atmosféricas variantes en tiempo real, si bien el público adolece de ser bastante estático, como sin vida, aparte de no tener un buen modelado.
El sonido combina los clásicos efectos de la bola al impactar en diferentes superficies, con algo de ruido ambiental que no se nota mucho, dejando todo el protagonismo al golpeo de la pelota contra las cuerdas de la raqueta, y contra el suelo, y a los eventuales comentarios del juez de silla; no hay comentaristas ni música durante los partidos, aunque sí la hay en los menús, y es licenciada. Hay temas muy conocidos y se agradece esta preocupación de 2K Games por animar los menús.
Aún así, para los aficionados al tenis estamos ante uno de los títulos más atractivos que pueden encontrar. Este paso firme hacia la simulación, arriesgado pero bien realizado, diferencia a Top Spin 3 de los otros juegos de tenis del mercado, y le dota de personalidad propia, algo difícil de conseguir en este tipo de juegos. Quien echase de menos profundidad en los otros títulos tiene ante sí una compra casi obligada, y los aficionados a los juegos de deportes en general deberían considerarlo.