Análisis de Pinball Arcade XBLA (Xbox 360)
Las máquinas de pinball siempre fueron un punto de referencia para los extintos salones recreativos. Durante todos los años que estuvieron de moda llegaron a crearse cientos de mesas de las que, todavía hoy, recordamos sus elegantes diseños, sus fantásticos juegos de luces, sus característicos sonidos y su adictiva y sencilla mecánica basada en obtener puntos manteniendo la bola, el mayor tiempo posible, dentro de los límites que marcaba la propia mesa como zona de juego. Para ello era necesaria una gran pericia del jugador golpeando la bola con los flippers, algo de fortuna y cierta participación activa a base de empujones a la mesa, con el fin de rectificar la dirección de la bola si ésta se dirigía hacia el vacío.
Desde los inicios de las consolas y los ordenadores de 8 bits hasta el día de hoy, los desarrolladores han tratado de crear videojuegos que emulasen fielmente la sensación de un Pinball auténtico, a pesar de la dificultad que tenía representar para una consola de aquellos días un juego basado casi exclusivamente en la física de la propia bola. Las nuevas tecnologías han ido permitiendo que cada vez se desarrollen mejores pinballs para los soportes domésticos.
Nuestro erizo más famoso hizo sus pinitos con el anecdótico Sonic Pinball, Nintendo nos sorprendió con el experimental Metroid Prime Pinball, que obtuvo el beneplácito de los amantes del género con un juego que respetaba los cánones de un pinball como pocos y así hasta una larga lista de títulos que han mostrado su particular visión de un pinball con mayor o menor fortuna.
Ahora nos llega para Xbox Live "Pinball Arcade", un divertidísimo videojuego descargable desarrollado por Farsight Studios, que por tan solo 800 MS Points nos ofrece una de las experiencias más parecidas a un auténtico pinball de mesa, salvando las distancias. El título incluye la reproducción de cuatro de las mesas de Pinball de mayor éxito de todos los tiempos: Black Hole de Gottlieb (1981); Theatre of Magic de Bally (1995); Tales Of The Arabian Nights de Williams (1996) y; Ripleys believe it or not de Stern (2004).
Todas estas mesas se han reproducido con tal similitud a las originales que llegan a rozar la excelencia y demuestran un tremendo trabajo de documentación. La física de la bola nos ha parecido excelente, algo esencial a la hora de jugar a un título de estas características que depende de nuestras reacciones ante la trayectoria de la misma. Los accesorios como los bumpers, las rampas, las dianas o los propios flippers tienen un comportamiento de lo más convincente. Los efectos sonoros son idénticos a los que disfrutamos en su momento en las máquinas originales y para más inri, el juego nos ofrece un excelente manual de instrucciones interactivo que nos muestra las funciones de todos y cada uno de los accesorios de las mesas, así como una digitalización de su folleto original.
Antes de comenzar a jugar veremos la máquina seleccionada a través de una perspectiva frontal algo elevada y ladeada. Dicha perspectiva nos permite observar con todo lujo de detalles las ranuras de las monedas, el botón electrónico de inicio, la clásica palanca de golpeo de la bola y el propio tablero de juego.
Una vez hayamos golpeado la bola con la palanca, la cámara del juego nos mostrará una perspectiva alzada. La mayor parte del tiempo, dicha cámara quedará fija en la zona inferior del tablero donde se encuentran los flippers. Los elementos superiores se verán algo más alejados, sin embargo cuando lleguemos con la bola a las zonas más elevadas, la cámara seguirá suavemente su trayectoria, de tal forma que no nos produzca ninguna confusión. Además, podremos ajustar la distancia de la cámara a nuestro gusto, en cualquier momento de la partida, poniendo cualquiera de sus tres vistas disponibles.
Una vez hayamos iniciado la partida comprobaremos que no todas las mesas nos ofrecen la misma experiencia de juego. Cada una de ellas tiene sus propias peculiaridades: Black Hole, es una aventura espacial que cuenta con una divertidísima superficie inferior de juego invertida jugable y se podría decir que es la mesa ideal para los iniciados al Pinball por su sobriedad en cuanto a objetivos a batir; Tales of the Arabian Nights, cuenta con un tablero muy recargado de elementos y nos marca una serie de objetivos mucho más profundos que los del juego anterior; Theatre of Magic es una mesa muy adictiva cuyo diseño enamoró a millones de seguidores al Pinball y por último; Ripleys believe it or not es un original tablero de tres flippers que muestra una reproducción de las sorprendentes aventuras del columnista real Robert Ripley.
En cuanto a la jugabilidad del título nos encontramos ante cuatro mesas realmente divertidas que entusiasmarán a los verdaderos amantes de las "vulgarmente denominadas" máquinas del millón. El juego cuenta con unos controles muy intuitivos: con el stick derecho disparamos la bola, los gatillos laterales accionan los flippers, con el botón b cambiamos la perspectiva del juego y con el stick izquierdo podemos golpear el tablero para cambiar la dirección de la bola, aunque deberemos controlar la intensidad con la que lo hagamos para no hacer "Tilt" que inmovilice los flippers.
Puede que al principio los iniciados al universo del pinball tengan un concepto equivocado del propio juego y se les haga aburrido, difícil e incluso simple en su concepción, aunque si uno se atreve a darle la oportunidad que este título merece, se dará cuenta de que es mucho más de lo que parece. Una vez vayamos dominando el uso de los flippers, conozcamos las características que ofrecen los objetivos a batir y sepamos utilizar con maestría la opción de mover el tablero para modificar trayectorias fatales, el juego deja de ser una simple cuestión de suerte y se convierte en un gran reto para los que quieran reventar la máquina consiguiendo millones y millones de puntos y después compartir sus mejores marcas con el resto del mundo gracias a un servicio online disponible.
Conclusiones
Pinball Arcade no es ni más ni menos que lo que dice su propio título, un juego de pinball en estado puro y además, a un precio más que razonable. Los amantes del género se sentirán entusiasmados cuando observen que se ha plasmado con gran cuidado todo aquello por lo que se hicieron famosos estos fantásticos muebles. Para ello se ha prestado una especial atención a la física de la bola y a su respuesta ante bumpers, rampas, dianas y otros muchos elementos que veremos en los cuatro tableros que nos ofrece el juego.
Todo esto y muchos otros detalles como las instrucciones interactivas, los folletos digitalizados de las propias máquinas originales o la posibilidad de enviar nuestros resultados vía online, hacen de Pinball Arcade una auténtica declaración de amor al género y una de las mejores reproducciones de pinball que hayamos tenido el placer de probar en un videojuego descargable hasta la fecha.