Análisis de EA Sports Grand Slam Tennis (Wii)
A nadie pilla ya por sorpresa que Wii Sports es el juego más exitoso de la generación, y que de hecho se convirtió hace varias semanas en el título más vendido de la historia, haciendo una combinación perfecta con la consola Wii en el pack en el que ambas cosas se venden conjuntamente. Quizás, de los cinco deportes incluidos, el que más interés despertó entre el gran público fue el tenis, y es que la popularidad de dicho juego, unida a la novedad que suponía para el jugador empuñar el mando a modo de raqueta e imitar los golpes con su brazo, hicieron que todo el mundo quisiera probarlo y que se convirtiera en el protagonista de numerosos spots publicitarios de la consola de Nintendo. Sin embargo, y aunque Wii parecía predestinada a ser una consola con un catálogo a rebosar de juegos de tenis, hasta ahora podría decirse que dicha modalidad de Wii Sports seguía siendo la más realista de cara a la jugabilidad, y la que mejor uso ha hecho del mando. Mientras, otros títulos no han estado a la altura y no han sabido aprovechar como es debido el control remoto. Pero eso cambia a partir de ahora, porque EA Sports se ha puesto manos a la obra, conscientes de que Wii pedía un juego de tenis de calidad, y ha visto la ocasión perfecta para estrenarse en este deporte con Grand Slam Tennis.
Estreno de Wii MotionPlus
Como decíamos, éste es el primer juego, junto a Tiger Woods PGA Tour 10 y Virtua Tennis 2009, que usa el nuevo periférico de Nintendo, capaz de dotar al Wiimote de más sensibilidad y precisión, además de determinar la posición espacial en la que se encuentra la mano con el controlador. De Wii MotionPlus se ha prometido mucho, sobre todo alcanzar un grado de precisión real o 1:1, algo no sólo difícil de conseguir, sino también complicado de poder adaptar correctamente a según qué juego y en qué condiciones. Grand Slam Tennis, para decepción de muchos, no consigue ese 1:1, sino que se sirve del Wii MotionPlus para ganar precisión en los golpeos y determinar en todo momento la posición de la raqueta del jugador con respecto al cuerpo, siendo esto lo que sí puede considerarse movimiento en tiempo real. La diferencia entre jugar con Wii MotionPlus o sin él radica, sobre todo, en este último aspecto que hemos comentado.
Colocarnos correctamente, ya sea de derecha o de revés, es muy importante para poder mandar cada bola a donde deseemos. No menos importante es saber cómo darle a la pelota, y esto es algo que entra dentro de la curva de aprendizaje del juego, y que iremos mejorando y dominando a medida que disputemos más partidos. Con Wii MotionPlus, dada la precisión que hay que ejercer a cada golpe, la curva se intensifica, lo cual puede ser un tanto dificultoso para los más inexpertos. El repertorio de golpes es de lo más completo, teniendo a nuestra disposición derechas y reveses planos, liftados, cortados, y por supuesto globos y dejadas. Estos últimos son los que más controversia han generado, ya que se ejecutan pulsado un botón mientras movemos el mando, algo que en teoría es contrario al nuevo periférico, que promete control real en todas las acciones.
Dado que el título que nos ocupa es el estreno de EA Sports en el tenis y también son primerizos en controles con nuevos sensores más complejos como el Wii MotionPlus, es comprensible que no hayan dado con la fórmula exacta para algunos tipos de situaciones y hayan preferido tirar de algo tan clásico como apretar un botón, aunque esperemos que mejoren estos detalles en el futuro, como no puede ser de otra forma. Precisamente, tanto los globos –que se realizan con el botón A- como las dejadas –con el B-, son los golpes menos precisos y los que menos nos saldrán como queremos que lo hagan. Los demás se ejecutan de forma totalmente natural y como los haríamos con una raqueta en el tenis real, dándole al golpe liftado un efecto de abajo hacia arriba, lo contrario que el cortado, al que golpearemos de arriba hacia abajo para que adopte una fuerza de retroceso, siendo éste normalmente un golpe defensivo que nos permita recuperar la posición tras recibir un ataque.
Por último, el clásico golpe plano, sin ningún tipo de efecto y completamente recto. Al principio de algunos partidos, y mientras el juego carga, nos saldrán pantallas de muestra para que aprendamos a hacer cada golpe y a dirigir la bola hacia donde queramos. Aunque como dijimos anteriormente, requiere práctica, siempre vienen bien esos esquemas para recordar conceptos.
Siguiendo con los tipos de golpes, el saque es, por decirlo de algún modo, el más arcade del juego. En él no importan ni la fuerza, ni el efecto, ni hacia donde dirijamos el mando. El sistema es parecido al de un arcade de tenis, pero sin barra para medir la fuerza, de modo que tenemos que darle a la bola en el momento justo de altura para que vaya a la mayor velocidad que nuestro tenista se puede permitir. Del mismo modo, la dirección a la que queremos mandar el saque viene determinada por la cruz de control o la palanca del nunchaku, dependiendo del sistema de control que estemos utilizando. A los que hayan probado el tenis de Wii Sports les sonará este sistema de saque, puesto que es muy parecido. Y de hecho, quizás se podría decir que esperábamos un poco más de evolución en este aspecto como sí ha habido en otros, ya que Grand Slam Tennis es un título que, sin apostar claramente por una vertiente tenística, se inclina más por la simulación. Aquí hay que medir la fuerza y dirección de cada golpe, preocuparnos de que la pelota no salga o vaya a la red, e incluso saber ajustar a las líneas una derecha ganadora que nos dé un punto.
Como acabamos de mencionar, se puede jugar con nunchaku o sin él. Jugar sin él nos permite controlar la dirección de cada golpe de forma más correcta, puesto que es de lo único que debemos de preocuparnos, mientras que con él, moveremos al jugador libremente por la pista al mismo tiempo que tendremos que encadenar cada golpeo hacia donde corresponda. Éste último método necesita aprendizaje y dominio, aunque por supuesto nos proporciona un control total sobre todo lo que hagamos en la pista, por lo que es el sistema de manejo que recomendamos al público más experto. Mientras tanto, sin nunchaku es la inteligencia artificial la que mueve a nuestro personaje hacia la bola en todo momento. Un detalle de agradecer es que podremos controlar con la cruz del mando de Wii algunos movimientos puntuales, como subir a la red o bajar de ella, y movernos a derecha o izquierda mientras esperamos el saque del rival, para restar más correctamente.
Tenis con licencias
Si algo se echaba de menos en los juegos de tenis que han ido saliendo a lo largo de la historia, es que no contaban con licencias reales de los torneos más importantes o de la mayoría de los tenistas de élite en cada momento. Sin embargo, EA Sports se caracteriza por implementar en cada uno de sus títulos todo el contenido licenciado que se pueda. Así lo hemos visto en juegos como FIFA o NBA Live, y ahora que da el salto al tenis, también podremos disfrutar de todos los Grand Slam oficiales, los cuales dan título al juego. Los famosos Roland Garros y Wimbledon, sobre tierra batida y hierba respectivamente, así como el US Open y Australian Open, sobre pista dura, están representados con todo lujo de detalles. Tendremos a nuestra disposición los estadios principales de cada torneo, así como el segundo y otras pistas menores, todas ellas reales y con su nombre original.
Y si están la mayoría de pistas de tenis más importantes del mundo, no podían faltar los tenistas importantes. Hasta 23 jugadores se dan cita en Grand Slam Tennis, masculinos y femeninos, pero todos ellos con algo en común: son clásicos de los circuitos ATP o WTA. Aquí encontraremos a leyendas como Bjorn Borg, John McEnroe, Pete Sampras o Martina Navratilova, junto a otros actuales que también han dado y darán que hablar, como Roger Federer, Rafa Nadal, Novak Djokovic, Andy Murray, único jugador del plantel junto a Tsonga y Kei Nishikori que no han ganado aún un Grand Slam en la vida real; las hermanas Williams, Justin Henin o Maria Sharapova. Quizás se puedan echar de menos a algunos jugadores míticos como Steffi Graf o Andre Agassi, ganadores ambos de todos los Grand Slam y pareja en la vida real, pero hay que reconocer que el plantel es completo y difícilmente dejará indiferente a nadie.
Llegar a lo más alto
Sin embargo, para ser el número uno en el modo carrera tendremos que crearnos a nuestro personaje e ir avanzando poco a poco por los torneos, obteniendo habilidades que nos permitan ser más competitivos y poder ganar los partidos frente a los mejores jugadores del circuito. El modo edición nos deja elegir tanto rasgo físico como vestimenta y herramienta de trabajo, habiendo aquí también un gran número de licencias de las más conocidas marcas deportivas: Adidas, Nike, Penn, Wilson o Babolat, entre otras. Una vez creado nuestro personaje, empezaremos por el primer Grand Slam de la temporada tenística, que es el Open de Australia.
Antes de empezar el torneo, tendremos que conseguir mejorar cada parámetro del jugador en unos retos que el juego nos va proponiendo, como retar a ciertas leyendas a un partido amistoso. Poco a poco, el personaje que hayamos creado estará más dotado para ganar los torneos, aunque requiere paciencia por nuestra parte, pues al principio no será nada sencillo. Es por ello que podremos elegir entre tres niveles de dificultad, siendo el fácil el que se recomienda a los novatos o a los que tengan menos paciencia, y el difícil un auténtico reto.
El otro modo principal del juego es el multijugador, que en este caso cuenta con un fantástico modo online que corre a cargo de Electronic Arts (eso explica la ausencia del logo Wi-Fi Connection de Nintendo en la portada). El sistema nos permite crearnos varios perfiles con un nick (nada de arcaicos códigos) y agregar desde cada perfil a otros amigos. Una vez que les agreguemos, les llegará la invitación automáticamente, decidiendo ellos si nos aceptan o no. También permite mandar una solicitación a los contactos que tengamos agregados al tablón de Wii, así como chatear con frases predefinidas e iconos, tanto antes como después de los partidos. Por otra parte, hay rankings para los jugadores que jueguen online, utilizando un método similar al de Mario Kart Wii, que nos da ciertos puntos por las victorias y nos quita otros tantos por las derrotas. La cantidad de puntos que sumemos o perdamos dependerá de la calidad del rival con el que juguemos y su lugar en el ranking. Empezaremos con 500 puntos, y a partir de ahí será cosa nuestra intentar encadenar victorias, tanto con amigos como en partida igualada o no igualada, para sumar más puntos y subir posiciones.
Hay dos detalles de agradecer en el sistema online: el primero es que, al invitar a un amigo para un partido, es posible seleccionar la cantidad de sets y juegos que queramos, sin ser esto algo predefinido. El segundo es que se ha eliminado en su mayor parte el lag, tan molesto en otros juegos de tenis, incluso pertenecientes a consolas más prestadas al juego en red que Wii. Aunque como siempre depende de la calidad y el ancho de banda de nuestra conexión y de la del rival, se ha conseguido que pocas veces la pelota flote o se quede suspendida por poca velocidad en la transmisión de datos, afectando en esos casos por tanto a la rapidez de la pelota durante el partido. Es decir, difícilmente nos encontremos con lag, pero si las conexiones son malas, la pelota va a ir más lenta de lo que nos gustaría, mientras que si la conexión es buena, esto no va a pasar, y disfrutaremos de la velocidad real del juego.
El título cuenta con más modos de juego, aunque menos importantes. Hay pruebas, minijuegos, y hasta un contador de calorías, al cual no le vemos demasiado interés ni parece del todo exacto, pues mide los minutos del partido y da por hecho que hemos jugado moviéndonos siempre igual. Aunque siendo Wii una consola enfocada en cierto modo hacia el deporte en familia, el fitness y la diversión sana, comprendemos el interés de EA Sports por incluir esta opción. Por último sobra decir que se puede jugar en categorías individuales y dobles a cada modalidad que disputemos.
De aspecto desenfadado
A pesar de que Grand Slam Tennis es un juego con multitud de contenidos reales, el estilo que EA ha usado para caracterizar el aspecto visual es más bien caricaturesco, con personajes parecidos a los avatares usados en Xbox 360, en los que resaltan los rasgos físicos de la cara y la cabeza en general. Si bien la preferencia por este estilo o uno más realista es cuestión de gustos y nosotros no tenemos nada en contra de ninguno de los dos, hay que reconocer que técnicamente es un juego un tanto flojo. Los modelados poligonales podrían estar mejor construidos, así como detalles secundarios de las pistas. El público es demasiado simple y parece hecho con desgana, y otros objetos o detalles de algunas pistas más simples no se han cuidado casi nada, como algunos árboles, que deben tener, sin exagerar, no más de diez polígonos. Del mismo modo, las texturas son muy básicas en su mayoría, con poca variedad y sin deformación cuando se necesita. A estas alturas, ver la tierra de Roland Garros sin marcas de las pisadas o de los botes queda anticuado, y es algo que se podría haber trabajado bastante más. Sin embargo, en un juego tan orientado a la jugabilidad como éste, el apartado gráfico queda más en segundo plano que en otros, aunque esperemos que, en futuras entregas si las hay (esperemos que sí), EA Sports cuide más la parte gráfica.
Del apartado sonoro tenemos menos quejas. Melodías hay pocas –sólo en los menús- y se dejan oír muy bien. Por otro lado, el sonido ambiente es absolutamente realista, con el público jadeando tras cada punto, el árbitro usando expresiones típicas para calmarlos, y los gritos de los tenistas totalmente reconocibles. Notaremos rápidamente cuando juegue Nadal, por ejemplo, pues su voz es la de verdad. También habrá comentaristas en los partidos, que hablan entre punto y punto para informar de la situación, y antes y después de los partidos para añadir detalles de los mismos. Eso sí, los comentarios están en inglés, aunque serán familiares para los que vean tenis en canales extranjeros.
Concluiremos con dos preguntas que la mayoría de la gente a la que le interesa el título se ha hecho o se hará: ¿Es Grand Slam Tennis el juego perfecto para comprobar las capacidades de Wii MotionPlus? La respuesta es no. ¿Es Grand Slam Tennis un buen juego? Definitivamente sí, el juego de tenis más completo de Wii y el que tiene un control más realista, sin ninguna duda. La curva de dificultad y aprendizaje es muy buena, lo que le da un plus de duración y hará que los que disfruten jugando se sientan atrapados sin remedio. Aunque esperamos que se subsanen los errores en futuras entregas de esta, esperemos, recién nacida saga, la primera prueba sale airosa con éxito.