Análisis Shantae and the Seven Sirens, la medio genio y las ninfas (Switch, PS5, iPhone, PC, Xbox One, PS4)

Parece que fue ayer cuando WayForward deleitó al público americano con Shantae, un tardío juego de Game Boy Color que, a pesar de fracasar en ventas, conquistó con su buen hacer a la crítica y a quienes le dieron una oportunidad en su momento, lo que sirvió para que la desarrolladora se animara a desarrollar varias secuelas de gran calidad con las que han ido, poco a poco, popularizando a esta entrañable medio genio y sus aventuras. Este mes la saga ha cumplido 18 añazos y su estudio ha querido celebrar su mayoría de edad por todo lo alto con Shantae and the Seven Sirens, una notable y divertida odisea repleta de buenos momentos.

No hay una medio genio tan genial

Como es habitual en la serie, la historia no es más que una excusa para justificar nuestro viaje y que nuestra heroína se ponga manos a la obra. Siendo un poco más concretos, esta vez nos tocará explorar una misteriosa isla para encontrar y rescatar a otras medio genios que han sido capturadas cuando Shantae y sus amigos se disponían a disfrutar de unas merecidas vacaciones. Huelga decir que el desarrollo de los acontecimientos es bastante predecible y que aquí lo que realmente importa es su inocente y simpático sentido del humor, con conversaciones y situaciones muy absurdas que conseguirán que juguemos de principio a fin con una sonrisa en la boca, algo que siempre se agradece y que no es nada fácil conseguir.

En lo jugable nos encontramos con que en WayForward han decidido regresar a las raíces de la saga para ofrecernos un metroidvania en el que deberemos abrirnos camino por un mapa de tamaño considerable mientras buscamos en él la entrada a una serie de mazmorras al más puro estilo Zelda, con sus puzles, llaves, mecánicas propias, jefes y poderes para conseguir que nos permitirán acceder a nuevas zonas de la isla.

Aquí tenemos que destacar lo mucho que nos ha gustado su diseño de niveles, convirtiendo la exploración en un auténtico gustazo con unos laberintos muy bien planteados y un backtracking minuciosamente estudiado para que no tengamos que dar demasiadas vueltas innecesarias durante la historia principal, pero que siempre nos permite desviarnos para encontrar todo tipo de secretos, muchos de ellos tan bien escondidos que pondrán a prueba nuestra capacidad de observación.

Es de esos pocos juegos tan bien diseñados que consiguen que cada vez que adquirimos una habilidad queramos pasar de la trama para explorar libremente todo el mapa de nuevo en busca de recovecos y lugares que antes permanecían bloqueados, lo que habla muy positivamente del trabajo del estudio. A esto también hay que añadirle unas mazmorras muy variadas y entretenidas y unos atajos genialmente planteados que hacen que moverse por la isla sea muy satisfactorio y dinámico, algo que se va potenciando a medida que progresamos y nuestra medio genio gana en posibilidades de acción.

Hablando de habilidades, nos has llamado mucho la atención cómo el tradicional sistema de transformaciones de la saga a través de bailes se ha modificado para hacer que nuestra heroína se transforme en diversos animales según algunas acciones contextuales, algo que haremos de forma instantánea e inmediata sin tener que bailar previamente. Por ejemplo, al entrar en contacto con el agua y movernos en ella nos transformaremos en rana, mientras que si hacemos el doble salto de toda la vida, Shantae adoptará la forma de un calamar en el aire y se impulsará con tinta. Como veis, con este nuevo planteamiento han conseguido darle un toque más orgánico a nuestras transformaciones que ayuda a que la exploración sea mucho más ágil y orgánica. Eso sí, no os penséis que las danzas se han eliminado por completo, ya que aprenderemos varias con las que podremos desencadenar ciertos hechizos que nos serán imprescindibles para interactuar con nuestro entorno, activar mecanismos y encontrar secretos.

Como veis, se trata de una aventura muy entretenida, bien planteada y con un diseño muy bueno que nos llevará entre siete y ocho horas completar, una cifra que puede irse hasta las diez y doce horas si pretendemos conseguir el 100%. Además, cuenta con los suficientes valores rejugables como para invitarnos a darle varias vueltas para desbloquear sus diferentes ilustraciones finales, algo que nos obligará a jugar muy bien y conocernos el título al dedillo.

Sin embargo, no todo son aciertos y hay algunos detalles que empañan ligeramente el resultado final, como su dificultad, totalmente inexistente y sensiblemente por debajo de los estándares de la propia saga. No es que pretenda ser una experiencia especialmente desafiante, pero no ha habido ni un solo momento en el que hayamos tenido la más mínima sensación de peligro, ya que con la danza curativa y las decenas de objetos para recuperar salud que recogeremos siempre nos sobrarán puntos de vida, algo que se agrava cuando apenas hemos tenido que usar estos recursos ante el poco daño que recibimos y lo fuertes que podemos llegar a ser maximizando el daño de nuestro ataque básico (un latigazo con nuestro pelo) durante la primera mitad del viaje.

Esto, en consecuencia, consigue tirar por tierra los enfrentamientos contra los jefes, muy variados y bien diseñados, pero nada emocionantes, lo que es una auténtica pena. No pedimos que sea un juego difícil, pero un mínimo de reto no habría estado de más, por lo que toda la dificultad queda relegada en encontrar todos sus secretos y coleccionables.

Otro detalle que no nos ha terminado de convencer es el nuevo sistema de cartas que se ha incluido. Ahora los enemigos que derrotemos pueden dejar caer un naipe que podemos equiparnos para obtener diversas ventajas, como aumentar el daño de algunos ataques o regenerar puntos de magia de forma pasiva, una idea que sobre el papel suena bien y que nos debería dar muchas opciones para personalizar y definir el estilo de juego de nuestra heroína, pero que en la práctica se siente totalmente desaprovechado. Para que os hagáis una idea, no hemos visto la necesidad de cambiar nuestra configuración de cartas desde el segundo capítulo, ya que ni hemos encontrado tarjetas que nos gustasen más ni la bajísima dificultad de la aventura nos ha exigido optimizar.

También nos ha decepcionado un poco la falta de variedad en los escenarios, ya que la inmensa mayoría del título transcurre en el subsuelo de la isla, por lo que podéis esperar cuevas, túneles subterráneos y fondos de ese corte durante casi todo el juego, algo que puede llegar a resultar un tanto aburrido y monótono en lo visual, especialmente si tenemos en cuenta que venimos de dos entregas como Shantae and the Pirate's Curse y Shantae Half-Genie Hero que hicieron un trabajo espectacular en este sentido.

Donde sí que no podemos poner grandes quejas es en su apartado gráfico, con unos personajes fantásticamente diseñados y animados que difícilmente podrían ser más expresivos. Sí, recicla mucho de su predecesor, pero la sensación sigue siendo similar a la de jugar una película de animación. Además, la presentación se ha mejorado bastante, con diálogos que muestran mejores ilustraciones y el añadido de secuencias de anime de gran calidad.

Finalmente, la banda sonora nos deja una buena selección de temas musicales muy animados que suelen tender al chiptune y que ambientan genial nuestras andanzas, aunque se echa en falta la batuta de Jake Kaufman y la personalidad que sabía imprimirle a las composiciones de la saga, dejándonos con su ausencia un apartado musical mucho menos memorable e inspirado. Por su parte, los efectos cumplen correctamente su cometido y el doblaje, en inglés, se limita a unas pocas frases. ¿La buena noticia? Por primera vez en la historia de la serie contamos con una traducción al español digna y trabajada que se puede entender sin mayores problemas y con expresiones muy bien adaptadas a nuestra lengua.

Conclusiones

Shantae and the Seven Sirens es una divertidísima aventura que engancha de principio a fin con una facilidad pasmosa. Quizá no sea la mejor entrega de esta carismática medio genio, pero sí que hace muchas cosas bien, mantiene su encanto intacto y demuestra que sus desarrolladores han depositado mucho cariño y mimo en su elaboración, algo que se nota en cada frame del juego. Una compra muy recomendable que os hará pasar un rato estupendo y sin mayores complicaciones a poco que os llame la atención su propuesta, así que no dudéis en darle su merecida oportunidad.
Hemos realizado este análisis comprando el juego en su versión digital para PlayStation 4.

Hemos realizado este análisis en su versión de PS4 comprando el juego en PlayStation Store.