Análisis Ghost Trick: Phantom Detective, una merecidísima segunda oportunidad (Switch, iPhone, PS4, Xbox One, PC)
Hay auténticos juegazos que merecen una segunda oportunidad y Ghost Trick: Phantom Detective es, indudablemente, uno de ellos. Un original e ingenioso juego de misterios y puzles lanzado en 2010 para Nintendo DS (a posteriori también recibió una conversión para iOS) que tuvo la mala fortuna de pasar muy desapercibido entre el público a pesar de su innegable calidad y las buenas críticas que recibió. Sin embargo, tal y como suele ocurrir en este tipo de casos, con el tiempo acabó convirtiéndose en un título de culto gracias a los entusiastas y positivos comentarios de los pocos jugadores que decidieron darle una oportunidad.
Capcom, consciente de esta situación, ha decidido rescatar del olvido esta magnífica obra de Shu Takumi, el padre de Ace Attorney, con una remasterización para plataformas actuales que tiene el objetivo de dar a conocer a un público mucho mayor la que es, sin lugar a dudas, una aventura inolvidable que sigue siendo tan disfrutable ahora como hace ya 13 años.
Un misterio apasionante que atrapa hasta el final
Lo primero que tenemos que dejar claro es que a efectos prácticos nos encontramos ante el mismo juego de siempre, por lo que se mantiene su jugabilidad, historia y contenidos.
Sí, se han adaptado los controles, se han mejorado los gráficos y se han añadido algunos extras, pero no esperéis encontrar nuevos capítulos ni ningún cambio relevante que afecte lo más mínimo a la experiencia original.
Así pues, volvemos a estar ante una aventura de puzles muy guiada por la historia en la que encarnaremos a alguien que acaba de morir asesinado y que se ha convertido en un fantasma. Por desgracia para él, no es capaz de recordar nada: ni su nombre, ni quién es, ni qué estaba haciendo ni quién ha puesto fin a su vida.
No pasarán ni cinco minutos hasta que descubramos que nuestra nueva condición como espectros nos permite poseer objetos de nuestro entorno para manipularlos y movernos por ellos, una mecánica que tendremos que usar para crear nuevos caminos y resolver todo tipo de situaciones distintas que van propiciando unos rompecabezas muy divertidos e ingeniosos.
A partir de aquí, comienza una historia de la que no os queremos contar nada más, pero que os aseguramos que atrapa de principio a fin: está genialmente escrita, cuenta con unos personajes muy variopintos y peculiares que desbordan carisma, los diálogos son fantásticos y sabe encontrar un equilibrio perfecto entre el humor y el drama al mismo tiempo que va desarrollando una trama repleta de misterios e inesperados giros que nos animará a avanzar constantemente con tal de descubrir qué es lo que va a ocurrir a continuación.
Es un juego que da una importancia enorme a la narrativa y la historia será la que marque todos nuestros pasos, lo que se traduce en un desarrollo muy lineal que siempre delimitará lo que tenemos que hacer y los sitios por los que nos podemos mover, acotando así de forma considerable nuestra libertad de movimiento.
A pesar de lo que podría parecer por esta descripción, el título suele equilibrar con mucha soltura los momentos narrativos con los de resolución de acertijos, algo que solo cambia en la recta final, donde la historia cobra muchísimo más peso por la necesidad de resolver todos los interrogantes, dar las explicaciones pertinentes y dejar todo bien cerrado, afectando negativamente al ritmo de juego. Eso sí, aunque fluya peor, todo lo que nos cuentan es tan interesante que tampoco llega a molestar demasiado ni entorpecer nuestro disfrute.
En lo que respecta a la parte puramente jugable, al ser un fantasma solo podremos movernos poseyendo objetos que se encuentren dentro de nuestro rango de acción, así que para llegar a ciertos sitios deberemos buscar y crear un camino haciendo uso de los elementos que nos encontremos por los escenarios. Además, algunos de ellos pueden permitirnos realizar una acción especial, como hacer rodar una rueda, abrir un paraguas o activar una máquina, algo que también tendremos que aprovechar para salir al paso y encontrar la solución de los puzles que se nos planteen.
Lo interesante es que hay momentos en los que nos hacen retroceder en el tiempo para experimentar los últimos cuatro minutos de vida de algún personaje, unas secuencias en las que nuestro objetivo será salvar a la víctima y evitar que se cumpla su aciago destino. Para conseguirlo, deberemos repetir ese pequeño bucle temporal tantas veces como nos sea necesario y ejecutar ciertas acciones en los momentos adecuados, lo que ayuda a crear una variedad de situaciones sorprendentemente alta que saca bastante partido de una jugabilidad muy sencilla e incluso limitada.
Todos los rompecabezas responden a una lógica aplastante y muy coherente, y aunque siempre son divertidos de resolver y los hay realmente ingeniosos, quizá se echa de menos algo más de dificultad en ellos, ya que no supondrán ningún problema para cualquiera que esté mínimamente curtido en aventuras de este tipo. Al estar siempre todo tan delimitado por el guion, al final hay muy pocos elementos con los que podamos interactuar y los escenarios son muy pequeños, lo que facilita muchísimo descubrir las soluciones incluso cuando no tenemos del todo claro qué es lo que debemos hacer.
Independientemente de estas pequeñeces, repetimos: estamos ante un juego divertidísimo, absolutamente recomendable y que ningún aficionado a las buenas historias de misterio debería perderse. Además, su propuesta sigue resultando muy fresca, original y diferente, lo que habla muy bien de un producto que tiene ya más de una década a sus espaldas.
Las novedades
Que Ghost Trick: Phantom Detective es un juegazo no es algo que debería pillaros de nuevas a estas alturas, así que llegados a este punto probablemente os estaréis preguntando qué tal ha salido esta remasterización y cómo se ha adaptado una aventura concebida para Nintendo DS y los controles táctiles a las plataformas de hoy en día.
En general, nos hemos quedado muy satisfechos con el resultado, empezando por lo mucho que han salido ganando sus gráficos. A diferencia del original, aquí todo funciona a 1080p y 60 fps, lo que nos permite disfrutar de su precioso apartado visual con todo lujo de detalles gracias a una imagen muy nítida que realza todas sus bondades, beneficiando tanto a los personajes como a los fondos. Y ojo a las ya de por sí sobresalientes animaciones, las cuales han ganado muchísima fluidez y recalcan más que nunca los extravagantes gestos y las exageradas personalidades de cada uno de los protagonistas y secundarios.
Quizá podríamos echar de menos que se hubiese adaptado a un formato de pantalla panorámico, lo que habría conllevado reducir incluso más su dificultad al poder ver cosas que no deberíamos, pero no creemos que se le pueda pedir mucho más a un juego que más allá de la mencionada mejora de resolución y rendimiento ya luce genial y cuenta con una personalidad visual muy marcada y atractiva.
Por otra parte, la interfaz se ha rediseñado con muchísimo acierto para mostrarlo todo en una única pantalla, algo que se ha hecho de un modo más elegante e intuitivo que en la versión de iOS, pues nos bastará poseer un objeto para que justo debajo suya nos indiquen la acción que podemos realizar con él sin que tengamos que desviar la mirada del punto en el que tenemos concentrada nuestra atención.
Quizá los controles no son igual de satisfactorios y precisos que en Nintendo DS con el uso del stylus, pero el stick izquierdo de los mandos actuales hace que resulte muy cómodo movernos de un objeto u otro y medir nuestro rango de alcance. Como detalle adicional que nos ha gustado, la versión de Switch, que es la que hemos jugado, es compatible con controles táctiles, por lo que sigue siendo una aventura ideal para jugar en portátil.
Entre otros extras se ha añadido una completísima galería de ilustraciones, un reproductor musical, un sistema de logros integrado y unos entretenidos aunque anecdóticos puzles en los que debemos mover paneles para formar una imagen. Eso sí, estos últimos no los desbloquearéis hasta terminar la historia principal y no son precisamente nuevos, ya que se incluyeron por primera vez en la versión para iOS.
Por último, pero no por ello menos importante, se ha revisado toda la banda sonora para incluir nuevas versiones de todos sus temas y hasta se ha aprovechado para incluir una nueva composición completamente inédita. A nosotros nos han encantado las nuevas remezclas, ya que mantienen el estilo de las originales, pero con más calidad de audio y nuevos matices. En el caso de que prefiráis una experiencia más pura, os alegrará saber que también se incluye la opción de jugar con la música de la versión de Nintendo DS.
Conclusiones
Ghost Trick: Phantom Detective es una buena puesta al día de todo un clasicazo de Nintendo DS que cualquier amante de las buenas historias de misterio y de los puzles debería probar. Un título muy fresco que hace gala de unos rompecabezas variados y divertidos, de un guion repleto de grandes giros y con un ritmo muy bien medido, con unos personajes inolvidables y con un apartado audiovisual muy atractivo.
Quizá a nivel de contenidos y novedades esta remasterización se limita a lo justo y necesario para que jugarlo a día de hoy en las plataformas actuales sea una experiencia satisfactoria y cómoda, lo que no quita el enorme valor que tiene este relanzamiento al facilitar su acceso a cualquiera que esté interesado en comprobar de primera mano por qué se considera a esta obra de Shu Takumi todo un juego de culto. Sin duda, una merecidísima segunda oportunidad que esperamos que sirva para que muchos de vosotros descubráis una joya que difícilmente olvidaréis.
Hemos realizado este análisis gracias a un código de descarga para Nintendo Switch que nos ha facilitado Plaion.