Análisis Shovel Knight: Showdown, a palazo limpio (PS4, Switch, Xbox One, PC, Wii U, PS3)
Shovel Knight ha recibido por fin sus dos últimas expansiones, King of Cards y Showdown, dos contenidos adicionales tan completos que puede adquirirse incluso de forma independiente sin necesidad de tener el juego base. De la nueva y divertida campaña protagonizada por King Knight ya os hablamos ayer, así que esta vez vamos a centrarnos en Showdown, un curioso modo multijugador competitivo al más puro estilo Super Smash Bros. que, sin embargo, a la hora de la verdad no pasa de ser una mera curiosidad muy trabajada.
Duelos de caballeros
Así pues, tenemos una especie de juego de lucha basado en Shovel Knight que parte de la base jugable de su título principal para plantear unas intensas y caóticas batallas entre los personajes de este carismático universo. En total contamos con hasta 20 luchadores distintos, todos ellos muy bien diferenciados y con sus propias peculiaridades, por lo que nuestro estilo de combate variará considerablemente según nuestra elección.
Por desgracia, el control de todos ellos es extremadamente básico y simple, con dos o tres tipos de golpes por luchador y la nula existencia de combos o algo que añado un mínimo de profundidad, un problema que se ve agravado por la falta total de equilibrio que hay en la plantilla, con guerreros que son mucho más fuertes que el resto y otros con los que resulta casi imposible ganar por lo limitados que están.
Siendo un modo que ha nacido como extra de un juego de plataformas tampoco le podemos pedir mucho más, pero son detalles que al final acaban afectando a su disfrute y que le restan interés. Al menos se ha procurado introducir una nueva acción de bloqueo y parada con la que podemos rechazar los golpes de nuestros rivales y desequilibrarlos para dejarlos expuestos a un contraataque.
Evidentemente, en un título de estas características tampoco faltan objetos, armas y mecánicas propias de cada escenario que ayudan a elevar el caos de las partidas, aunque el menú de opciones es tan completo que podemos desactivar todo esto para centrarnos únicamente en pelear y dejar que sea nuestra habilidad la que hable por nosotros. El problema de jugar de esta manera es que el sistema de combate es tan plano que no consigue propiciar buenos duelos, mientras que con todo activado los enfrentamientos se convierten en algo extremadamente caótico que se queda lejos de satisfacer, por lo que no llega a encontrar un equilibrio en ninguna de sus vertientes.
Sorprendentemente completo
Que la base jugable falle de esta manera es una auténtica pena, ya que se trata de una expansión bastante trabajada y que demuestra que ha sido muy mimada. Tanto es así que incluye multitud de contenidos desbloqueables, un completo Modo Historia con prólogos y finales para cada personaje (así como un nuevo jefe final y minijuegos), un modo en el que romper dianas y el siempre imprescindible modo entrenamiento. Además, los combates multijugador y contra la IA cuentan con numerosas variantes y posibilidades de personalización (partidas por vidas, por tiempo, con objetivos, etcétera), por lo que en este sentido solo podríamos achacarle la ausencia de batallas a través de internet. Este problema es más grave de lo que podría parecer, ya que la IA enemiga es nefasta y nunca ofrece duelos que sean mínimamente satisfactorios, lo que le resta valor a sus contenidos para un jugador.
Donde sí que no podemos ponerle ninguna pega es en su apartado gráfico, con un estilo retro pixel art que es simplemente sensacional. Los sprites, las animaciones, los escenarios, el colorido que se le ha dado y su estilo artístico son herederos directos del título base, pero siguen desprendiendo muchísimo encanto y están a un nivel que no muchos suelen alcanzar. Y ojo con la banda sonora, repleta de remezclas muy acertadas de los temazos que escuchamos en la aventura original del Caballero de la Pala, aunque no se olvida de introducir también nuevas melodías igual de pegadizas.
Conclusiones
Shovel Knight: Showdown es una expansión relativamente entretenida que no pasa de la mera curiosidad. Se nota que ha tenido mucho trabajo detrás y que sus desarrolladores la han cuidado todo lo que han podido, aunque a la hora de la verdad las batallas no resultan tan divertidas ni satisfactorias como deberían. Un juego muy completo, sí, pero con poca "chicha" jugable y del que no tardaremos en cansarnos tras unas pocas partidas, ya sea en solitario o con amigos. Como actualización gratuita de Shovel Knigt es un añadido muy agradecido y que funciona bien, pero si pretendéis adquirirlo de forma independiente, quizá queráis explorar otras opciones en las que invertir vuestro dinero.
Hemos realizado este análisis gracias a un código de descarga para Switch que nos ha facilitado Yacht Club Games.